Con el respaldo de la tecnología blockchain se creó EGRN Coin, una criptomoneda verde que busca democratizar el mercado de los bonos de carbono. Y sí, fue fundada por dos chilenos en 2018.

“El que compra el criptoactivo (un bono de carbono) lo recibe a precio justo, es decir, tal cual como se vende. No hay intermediario. Es el blockchain el que respalda cada movimiento”, señala Rodrigo Vega, CMO y cofundador de eGreen.

Un bono de carbono representa una reducción de una tonelada de emisión de CO2. Esta certificación fue creada en el Protocolo de Kioto. Tradicionalmente, están destinados para que los compre una empresa que ha medido previamente su huella, pero desde eGreen vieron la oportunidad de transformar este mercado con la creación de esta criptomoneda y así “democratizar y acelerar la inversión en proyectos que favorecen al medioambiente”.

Este token (unidad de valor que una empresa crea para que sus usuarios interactúen en su negocio) funciona bajo la misma lógica que una stablecoin (monedas estables), ya que está respaldado en un activo concreto, que en este caso es un certificado de bono de carbono.

Esta moneda digital está en funcionamiento desde comienzo de este año y hasta ahora, cuenta Andrés González -CEO y cofundador de la firma-, el balance es de “330 mil toneladas de CO2 reducidas y más de 200 clientes. Si el año pasado, cuando vendimos los primeros tokens (en el piloto), fue a tres dólares y medio, este año se vendieron a seis”.

Sus creadores agregan que este es un sistema de “triple win”: gana el medioambiente, las personas y las empresas.

Desde su fundación en 2018, la firma ha sido parte de la incubadora Magical Startups y el Global Entrepeneur Programme de Inglaterra. También ha contado con el apoyo de Corfo y, durante 2020 cerraron un acuerdo de abastecimiento de venta de bonos de carbono con Arauco. Hasta ahora, cuentan con tres inversionistas locales chilenos y uno extranjero, que prefieren mantener en reserva. Los locales son de family office, como los hijos de la segunda generación de la familia Patuelli, Gonzalo Prieto, Cristian Boetsch y SAI DOS SpA.

Los fundadores de la startup están ahora en Francia participando de la aceleración de TechStar, que durará tres meses y que les permitirá, según ellos, escalar el negocio a nivel global y abrirse al ecosistema de inversionistas. TechStar es reconocida por tener en su portafolio a firmas como Uber y otros 18 unicornios, como DataRobot y Alloy.

“En esta instancia tenemos dos objetivos: queremos levantar inversión para escalar nuestro proyecto a nivel global. En segundo lugar, poder nutrirnos y aprender de los miles de emprendedores que están allá, además de conseguir clientes”, añade González.

Aparte del criptoactivo mismo, eGreen ideó una forma de aumentar la eficiencia en el registro y medición de la huella de carbono de las empresas. Todo en forma digital. Con esto, evitan que las entidades que certifican la huella de carbono estén hasta tres meses auditando una empresa.

“Reducimos los tiempos y costos en hasta un 80%. Le entregamos la data lista al certificador, que extrae la información directamente del blockchain y que es altamente confiable. Esto sin necesidad de ir físicamente a la empresa. Nosotros aportamos con el registro de huella de carbono y también compensamos sus efectos con la EGRN Coin”, concluyen.