La declaración de emergencia de salud pública por el Mpox (viruela del mono) por parte de la Organización Mundial de la Salud es la segunda alerta de este tipo sobre esta enfermedad infecciosa en apenas dos años, y los expertos temen que ésta sea aún más grave.

El último brote, centrado en la República Democrática del Congo e identificado en una docena de países africanos, está provocado por el tipo clado 1 (variante) del virus, más grave. Suecia notificó esta semana el primer caso de clado 1 fuera de África.

La OMS se disponía el viernes a celebrar una reunión de emergencia para debatir el acceso equitativo a pruebas, tratamientos y vacunas.

Boghuma Titanji, profesor adjunto de medicina en la Universidad de Emory (EEUU), señaló que la advertencia sobre el Mpox era un “duro recordatorio de la importancia vital de la intervención precoz cuando las enfermedades infecciosas aún están geográficamente contenidas”.

¿Qué es el Mpox y qué desencadenó la emergencia?

La viruela del mono es una enfermedad vírica que provoca erupciones cutáneas y lesiones en las mucosas, como llagas en la boca. En las formas graves, puede provocar inflamación cerebral, sepsis e incluso la muerte.

Es un ejemplo de las llamadas enfermedades zoonóticas. Éstas se transmiten de los animales a los humanos y son una de las principales preocupaciones de salud pública como posibles desencadenantes de pandemias.

El virus mpox se descubrió en 1958 en monos cautivos, y el primer caso humano se registró en la RDC en 1970.

El agente patógeno, similar al que causa la viruela, se propaga por contacto con animales, personas o materiales infectados. Puede transmitirse durante interacciones íntimas y prolongadas cara a cara, como hablar o respirar, según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

Las emergencias sanitarias anunciadas por la OMS y los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades se producen tras un aumento de los casos en el continente.

Al menos 12 países han notificado brotes. Hasta ahora se han registrado más de 17.000 casos sospechosos y 500 muertes, dijeron los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de África, añadiendo que es probable que se trate de una gran subestimación.

¿Qué hay de diferente con respecto a la última emergencia?

La anterior emergencia internacional por viruela del mono en 2022-23 estuvo provocada por el tipo de virus del clado 2. Esta vez, es la versión más peligrosa del clado 1 -en particular una cepa conocida como clado 1b- la que se ha propagado rápidamente en la RDC.

El clado 1b parece transmitirse en la RDC principalmente por vía sexual, según la OMS. Las autoridades suecas señalaron que el caso de clado 1 del que informaron era de una persona que había visitado una zona infectada en un país africano.

El papel del virus de clado 1 es preocupante porque se asocia con una enfermedad más grave y mayores tasas de mortalidad que el de clado 2. Además hay indicios de que el virus de clado 2 se transmite por vía sexual. También hay indicios de que el patógeno del clado 1 es más transmisible entre humanos.

¿Cómo deben protegerse las personas?

Además de la vacunación, se pueden tomar otras medidas preventivas para evitar la propagación de la viruela símica, como evitar la proximidad con personas infectadas o con objetos que hayan utilizado, como sábanas.

La OMS aconseja que las personas se aíslen para evitar que el virus se propague. Las personas son infecciosas hasta que todas sus lesiones han formado costra, se han desprendido las costras y se forma una capa de piel debajo, según las orientaciones del organismo sanitario.

El caso del clado 1 en Suecia es la primera señal de lo que los científicos consideran una inevitable propagación internacional. Pakistán también ha confirmado un caso de mpox de un viajero procedente de Oriente Próximo, pero no ha dicho si el caso está relacionado con el clado 1.

¿Qué se está haciendo para controlar el brote?

La OMS está colaborando estrechamente con los CDC africanos, los países afectados y las organizaciones no gubernamentales para frenar la propagación de la enfermedad, según declaró el miércoles su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Esto ha incluido equipos sobre el terreno que toman muestras de sangre y llevan a cabo secuenciación genómica, rastreo de contactos y apoyo a los trabajadores sanitarios con formación.

Según los científicos, se necesitan más datos sobre la transmisibilidad y el impacto del virus del clado 1b.

Para apoyar los esfuerzos de vigilancia, la OMS ha liberado US$ 1,45 millones de sus fondos de emergencia y ha dicho que necesita al menos US$ 15 millones en fondos adicionales inmediatos de los donantes.

Pero la vigilancia y la atención a los pacientes son muy difíciles en zonas como el este de la República Democrática del Congo, donde hay un prolongado conflicto entre los rebeldes armados y el gobierno.

Los expertos han pedido vacunas para cubrir a los más expuestos y prepararse para futuros brotes, pero se han firmado pocos acuerdos de suministro. Los CDC africanos afirman que se necesitarán 10 millones de dosis.

El grupo asesor de inmunización de la OMS recomienda dos vacunas contra el mpox. La República Democrática del Congo y Nigeria han aprobado recientemente ambas.

Bavarian Nordic, uno de los fabricantes de vacunas, dijo que podría suministrar 10 millones de dosis para finales de 2025, si los donantes hacen suficientes pedidos. La UE dijo esta semana que enviaría más de 215.000 inyecciones del fabricante danés al CDC de África.

“Si queremos una solución a largo plazo, debemos plantearnos una vacunación más amplia de toda la población en las zonas donde se produzcan brotes de mpox, para evitar el riesgo de que los futuros brotes sean tan grandes”, afirma Michael Marks, profesor de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.

¿Podría convertirse en la próxima pandemia?

La “probabilidad de transmisión sostenida en Europa es muy baja siempre que los casos importados se diagnostiquen rápidamente y se apliquen medidas de control”, afirmó el ECDC. No hay pruebas de que el mpox se propague fácilmente como el Covid, a través de gotitas respiratorias y partículas transportadas por el aire.

Nigeria, el país más poblado de África, informó esta semana que los viajeros que entren en el país por los aeropuertos de Abuja, la capital, y Lagos, su centro económico, deberán rellenar en línea formularios de declaración sanitaria de viruela.

Al igual que durante la pandemia de Covid-19, uno de los mayores retos es garantizar que los países más afectados reciban los recursos adecuados, sobre todo si los sistemas sanitarios ya cuentan con pocos recursos o están bajo presión.

En el Congo, asolado por la guerra, la asistencia sanitaria ya está al límite debido a la malnutrición, el sarampión y el cólera.

El grueso de los casos de viruela maculosa se da en menores de 15 años, y los niños tienen más probabilidades de morir a causa del virus que los adultos, según Greg Ramm, director nacional de la organización benéfica Save the Children.

“Añadir a la mezcla un nuevo virus mortal que ataca agresivamente a los niños es un cruel golpe del destino”, afirmó.