Sebastián Izquierdo, investigador y coordinador académico del CEP, plantea que la foto mostraba que casi dos tercios de la población estaba indeciso; casi la mitad de la población se encuentra desinteresada de este proceso; y además, que bajó abruptamente el porcentaje de ciudadanos que creía que si teníamos una nueva Constitución, ésta iba a resolver los problemas de la gente: 19%. “Pasamos de más de la mitad, a solamente uno de cada cinco chilenos”, expone.

- El desinterés se ha atribuido a cansancio, hastío después de estos cuatro años. ¿Pero ve algo más?
- Hay un dato que llama mucho la atención: este anhelo de la ciudadanía por llegar a acuerdos. Estamos hablando de un 70%. A las personas cuando se les pregunta cuáles son los mayores conflictos en Chile, son conflictos políticos entre quienes están ejerciendo autoridad, oficialismo vs oposición. Izquierda vs derecha. Y uno ve que nuevamente ese conflicto permeó también al proceso constitucional. Eso ha hecho que el proceso sea menos cautivador.

- ¿Quién capitaliza mejor el cierre del proceso?
- Hay una pregunta que creo que es bien decidora en la encuesta CEP, en que justamente se le pregunta a las personas en caso de que gane el En Contra, cómo cree usted que debe continuar el proceso. Hay un porcentaje en torno al 30% que cree que debería existir una nueva asamblea. Están ideológicamente más en la izquierda, con un apoyo importante al Gobierno de Boric. Por lo tanto, ahí hay un grupo que tiene una pulsión por continuar.

- ¿Cuáles son los ejes que van a definir el resultado?
- El botín está alojado en los indecisos, que tienen ciertas particularidades. Tienen una proporción mayor de mujeres, y todo el debate en torno a los derechos de la mujer va a ser un factor muy relevante, como también la interpretación que se le dé al tema de las tres causales del aborto. También hay un porcentaje relevante de personas que desaprueban al Gobierno actual, al Presidente Boric.
Pero ahí está la interrogante de qué porcentaje se debe más bien a que tienen una evaluación negativa respecto al desempeño del actual Gobierno, y quiénes tienen una opinión negativa de quien está arriba ostentando el poder. La campaña que logre hacerse cargo de los indecisos, va a ser justamente la triunfante. Porque hay un factor que es importante: los indecisos no es que estén desinteresados en el proceso. Están ávidos de poder comprender de qué se trata el texto y poder decidir.

- ¿Cómo se entiende que Chile, en cuatro años, pasó del 80/20 queriendo un cambio de Constitución, luego al 62/38 del anterior plebiscito, y ahora la indecisión? ¿En el camino vio que la Constitución no era el problema?
- El problema de fondo es que Chile lleva mucho tiempo estancado en lo económico -12 años sin crecer-, y también en la capacidad de llegar a acuerdos para las reformas sociales. Después del 18 de octubre, en todos los ámbitos, estamos peor. Y creo que es por la poca capacidad que tiene el sistema político de colaborar entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo, de poder llegar a acuerdos, por la fragmentación. Ahí está, creo yo, el meollo que nos ha llevado a pasarnos de extremo en extremo. Y paradojalmente, no haber resuelto los problemas sociales y económicos.

- En el último plebiscito, del 62/38 que rechazó el anterior texto, se podía colegir una correlación Gobierno vs oposición. Un núcleo duro del 38 que apoya al Gobierno. ¿Porque hoy, al parecer, esto varió?
- Claramente una de las estrategias que uno observa de campaña es tratar de que este plebiscito sea más bien una evaluación del Gobierno, para poder ir a buscar el porcentaje que desapruebe al Presidente, y traerlo al A Favor.

- ¿Puede jugar un rol el hecho de que siempre es más fácil estar en contra de algo, en rechazo a la clase política?
- La pregunta está abierta. Esas personas que se sienten desafectadas de la política, que no se identifican en el eje izquierda y derecha, ¿van a ser canalizadas en el En Contra? ¿O más bien en contra del Gobierno, de quien hoy día ostenta el poder y se van a la opción opuesta, el A Favor? Yo creo que es muy pronto como para poder zanjarlo. Estamos en el tramo más relevante de las campañas. Ahora, lo que uno observa, según la encuesta CEP, los que están A Favor en realidad uno de los factores determinantes ha sido conocer el texto. Y las personas que ya se han decidido por la opción En Contra, es que hay un alto nivel de desinterés. Por lo tanto, uno tendería a pensar que allí hay un sentimiento relevante de “anti” lo que me proponga el sistema político.

- ¿Este plebiscito está jugado?
- Este proceso está lejos de cerrarse. La opción En Contra es significativamente mayor a la opción A Favor. Pero es solamente relativo a un tercio. Dos tercios aún no se han definido. Ahí está el meollo del asunto. Y las campañas juegan un rol fundamental en persuadir a ese grupo que yo lo he llamado el Botín.