La familia Navarro alista una nueva etapa en Las Tacas, uno de los proyectos de segunda vivienda más antiguos del país, ubicado a 20 minutos de La Serena, en la Cuarta Región.

A fines de 2007, el empresario Andrés Navarro (líder del clan y presidente de la empresa tecnológica Sonda) se convirtió en el controlador del complejo del que ya era socio, tras adquirir la porción que le pertenecía a Gustavo Montero, fundador del resort. La familia opera a través de la sociedad Las Tacas Corp S.A., la que -en todo este periodo- ha obtenido nueve permisos de edificación para un total de 165 departamentos.

Ahora, preparan la construcción de dos nuevos edificios, denominados Taqueño y Chiringuito, de 20 y 8 departamentos, respectivamente. La inversión se estima en poco más de US$ 10 millones. Las obras se desarrollarán en el denominado Lote M del complejo, que tiene una superficie de 15.580 metros cuadrados.

“El proyecto viene a complementar una localidad que se encuentra consolidada como una zona de extensión urbana, por lo que el emplazamiento del proyecto no ofrece ningún tipo de problemática desde el punto de vista ambiental”, dice la consulta de pertinencia presentada por Las Tacas Corp para que la autoridad sectorial determine si los nuevos edificios deben ser ingresados al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA).

“Solicitamos que se declare que el presente proyecto no requiere ingreso al SEIA”, dice la consulta firmada por Andrés Navarro Betteley, hijo del presidente de Sonda.