En Estados Unidos se conoce como “1T Club”. Se trata de un selecto grupo de compañías cuya valoración de mercado supera el billón de dólares (trillions, en inglés). Ahí, por ejemplo, están Apple, Nvidia, Microsoft, Amazon, Alphabet, Meta y Tesla, las mismas que son conocidas como las “Siete Magníficas”.

Pero ahora, este grupo podría crecer. La semana pasada, este exclusivo segmento recibió un nuevo inquilino: Broadcom, compañía que data de 1961 y que hoy tiene una capitalización bursátil de US$ 1,1 billones (millones de millones).

Se trata de una empresa americana que la semana pasada experimentó un fuerte ascenso luego de presentar su último informe de ganancias, el cual generó opiniones divididas en el mercado. A pesar de eso, todo Wall Street está atento a sus movimientos y eso ha generado efectos positivos en sus títulos: en los últimos 30 días, sus acciones han subido 42%, sustancialmente más que su competencia. Por ejemplo, en el mismo plazo, Nvidia ha retrocedido 8%, mientras que los papeles de AMD han caído 10%.

“Aunque los ingresos totales trimestrales no cumplieron las expectativas de los analistas, su liderazgo en soluciones como chips de IA XPUs y redes Ethernet, sumado a acuerdos clave con empresas como OpenAI y Apple, ha generado un fuerte optimismo entre los inversionistas. Este crecimiento posiciona a Broadcom como un actor estratégico en el mercado de chips para IA, diversificándose frente a competidores como Nvidia”, explica Emanoelle Santos, analista de mercados internacionales de XTB Latam.

Su negocio principal es el diseño, desarrollo y fabricación de productos de infraestructura computacional y semiconductores. Este último producto es clave, ya que ha sido la razón detrás del crecimiento explosivo de firmas como Nvidia. Por ejemplo, en 2023, para Broadcom el negocio de los semiconductores representaba el 79% de sus utilidades.

La razón detrás del crecimiento de los semiconductores tiene nombre y apellido: inteligencia artificial. Esta tecnología demanda mucha capacidad de procesamiento y eficiencia energética, elementos que solo los chips más avanzados pueden ofrecer.

Por eso, Broadcom es considerado el “new kid on the block” del rubro tecnológico en Estados Unidos. ¿Pero tiene espacio para seguir creciendo o ya llegó a su límite? Esa es la pregunta clave que muchos están tratando de responder.

Ganándole a la competencia

En los últimos seis meses, Broadcom ha tenido mejores resultados que su competencia. Esto, dice Santos, ha sido “gracias a su sólida posición como proveedor clave en la infraestructura de inteligencia artificial (IA), capturando una parte significativa del mercado de chips de red y soluciones personalizadas para los grandes centros de datos”.

Y agrega: “A diferencia de Nvidia, cuya oferta está más enfocada en GPUs costosas y a menudo limitadas por la capacidad de suministro, Broadcom ha capitalizado el interés de los gigantes tecnológicos por diversificar sus proveedores de chips de IA, colaborando con empresas como Google, Meta y Apple para desarrollar soluciones específicas”.

Además, el experto explica que “el mercado ha respondido favorablemente a las proyecciones de crecimiento masivo de Broadcom, con estimaciones de hasta US$ 90 mil millones en ingresos relacionados con la IA para 2027. Su enfoque estratégico, combinado con un múltiplo precio-beneficio más bajo en comparación con Nvidia, ha atraído a inversores buscando valor en un sector altamente competitivo”.

¿Conviene entrar?

Esa es la pregunta que muchos se hacen. En ese contexto, los expertos explican que la decisión final depende del perfil de riesgo de cada inversionista.

Eso sí, Santos alerta: “Aunque Broadcom se encuentra en una posición estratégica sólida debido a su liderazgo en soluciones de inteligencia artificial (IA) y proyecciones de crecimiento robusto, sus indicadores fundamentales actuales, en comparación con su promedio de los últimos cinco años, sugieren que la acción podría estar sobrevalorada. Esto implica que parte del optimismo sobre su futuro ya está reflejado en el precio actual de sus títulos”.

Vicente Silva, analista de mercado de Capitaria, opina algo similar: “Hay que tener en consideración que este aumento ya está interiorizado por el mercado y tras los fuertes impulsos alcistas es natural que se puedan producir correcciones en el corto plazo. Pensando en el largo plazo, en cambio, pareciera ser una compañía sólida para tener en el portafolio de inversión”.

¿Qué pasa con Nvidia?

En los últimos seis meses la acción Nvidia ha caído 0,7%, dejando atrás periodos de incrementos históricos. Esto se debe, explican expertos, por una saturación del mercado. Es decir, el mercado ya internalizó que esta empresa es un peso pesado en la industria.

Eso significa que los inversionistas tienen altas expectativas de los resultados de la compañía, y muchas veces la firma no logra satisfacer esos niveles de rendimiento esperados.

“Si bien los resultados han sido positivos en los últimos trimestres, no han logrado alcanzar las altas expectativas de los inversores. A esto hay que sumar las últimas proyecciones de Nvidia, que señalan el crecimiento de ingresos más lento de los últimos siete trimestres, y el retraso en el lanzamiento de su creación más reciente: Blackwell, el chip de inteligencia artificial de próxima generación, que se retrasará varios meses debido a problemas en la producción”, explica Emilio Venegas, socio en la consultora local BDO Chile.

A pesar de eso, Nvidia está en una posición preferente respecto a su competencia, como Intel o AMD. “Estas compañías, con amplia trayectoria en el sector, no lograron adaptarse a las nuevas tecnologías y, en los últimos años, han centrado su actividad en reducir la brecha tecnológica existente y han realizado fuertes inversiones en nuevas fábricas que puedan producir chips de última generación”.

Nvidia se ingresó al “1T Club” en mayo de 2023. En solo 13 meses triplicaron su valorización. ¿Podrá hacer lo mismo Broadcom? Esa es la pregunta que muchos se hacen.