Cómo cuido mis lucas
¿Conviene comprar una propiedad en blanco?
-
Cuéntale a tus contactos
-
Recomiéndalo en tu red profesional
-
Cuéntale a todos
-
Cuéntale a tus amigos
-
envíalo por email
En los últimos meses el sueño de comprar una casa propia, para varios, se ha vuelto cada vez más difícil: la pandemia, la reducción de ingresos y el desempleo complican ese plan. De todas maneras, hay varias opciones para ahorrar dinero, sobre todo si se busca algo a largo plazo.
Una de estas es comprar una propiedad en blanco, es decir, una edificación que aún no ha iniciado sus obras, pero que ya cuenta con un permiso para hacerlo.
¿Cuáles son las ventajas a simple vista? Su bajo costo y la capacidad de elegir libremente el piso, departamento, estacionamientos y bodegas, en base a tu propia conveniencia. ¿Y las desventajas? El tiempo de entrega.
En general es una buena opción si quieres algo más barato y no tan urgente, pero también debes considerar las limitaciones y posibles riesgos. Aquí te contamos todo lo que debes saber sobre esta alternativa.
Así como lo lees, adquirir una propiedad en blanco es mucho más barato que comprar una ya construida, exactamente por lo mismo: no hay edificio, solo una idea.
“Al comprar en blanco puedes ahorrar entre un 10% y un 30% en el precio final respecto al mismo departamento si lo compraras con entrega inmediata, es decir, cuando el edificio ya está terminado. El ahorro dependerá de la plusvalía y desarrollo de la zona donde se ubica, además de otros factores asociados a la demanda y stock durante el proceso completo de venta”, explica la subgerente de Operaciones y Ventas de Inmobiliaria Insta, Isabel Letelier.
De igual manera, el pago resulta mucho más fácil que lo tradicional, pues como no estará lista de inmediato, habrá más tiempo para organizar los documentos necesarios, solicitar créditos y juntar la plata.
“Cuando se lanza un proyecto en blanco existe más tiempo para pagar el pie, que puede realizarse hasta 30 cuotas”, afirma la gerente comercial de Siena Inmobiliaria, Ana María del Río, quien agrega que varias veces se da la posibilidad de pagar el 10% del pie en 18 cuotas sin interés con tarjetas de crédito.
En este sentido, la gran desventaja será la espera, ya que la casa o departamento recién podrá estar a tu nombre cuando termine la construcción, lo cual podría tomar meses o, incluso, varios años. La paciencia es esencial en este caso.
¿Puedo pedir un crédito hipotecario?
Sí, pero ninguna entidad te lo entregará antes de que el proyecto esté finalizado. Sin embargo, siempre puedes preparar el trámite previamente.
Para eso, probablemente la inmobiliaria te pida demostrar que tu institución financiera aprobó el crédito hipotecario antes de firmar el contrato. Esto, como una garantía de que efectivamente eres parte del sistema financiero.
Eso sí, cabe recordar que posteriormente, cuando esté por cumplirse la fecha de entrega, la institución financiera igualmente podrá reevaluar la entrega del crédito, considerando todos los factores del momento. Solo ahí sabrás si realmente tienes o no el crédito.
“Al comprar en blanco puedes ahorrar entre un 10% y un 30% en el precio final respecto al mismo departamento si lo compraras con entrega inmediata”, explica la subgerente de Operaciones y Ventas de Inmobiliaria Insta, Isabel Letelier.
Puede parecer obvio, pero si una de las cualidades de comprar una propiedad en blanco es su bajo costo, las ganancias a futuro definitivamente serán superiores. Pero todo dependerá de la ubicación, pues entrega -o no- mayor plusvalía.
Por ejemplo estar al lado de supermercados, hospitales, colegios, estaciones de metro, etc. Entonces, si solo buscas algo barato para vivir, puedes quedarte tranquilo con la opción que desees. Pero si planeas realizar una venta o invertir directamente en esta propiedad, ten ojo con las ventajas y desventajas de cada sector.
“En general, el inversionista hormiga siempre está buscando estas oportunidades de compra en blanco, porque entiende que de esta manera se le hace mucho más abordable su inversión y la rentabiliza mucho más”, agrega Letelier.
Otra cosa importante que debes tener presente es que cuando firmes el contrato para adquirir una propiedad bajo este modelo no puedes arrepentirte. Esto principalmente porque incumplir el trato con la inmobiliaria puede derivar en multas bastante altas.
“Es muy importante revisar las condiciones de la promesa, para ver qué flexibilidad ofrece la inmobiliaria que está a cargo de la gestión de la venta del proyecto, como seguros en caso de cesantía o enfermedad”, plantea Letelier.
Asimismo, el CEO de Inversión Fácil, Cristián Lecaros, explica que si una persona se arrepintió de comprar una propiedad en blanco, tendrá que presentarle el motivo a la inmobiliaria.
“Normalmente, las cláusulas de salida son enfermedad grave o pérdida laboral, y para eso tiene que demostrar de manera física que realmente tiene un problema grave y hablar con la inmobiliaria para poder pedir la restitución del dinero. No siempre esto es posible, va a depender mucho de la promesa y de la voluntad de esa inmobiliaria”, agrega.
En este sentido, hay responsabilidades para ambas partes, ya que si el proyecto no se realiza, la inmobiliaria también tendrá que hacerse responsable y devolver el dinero invertido, según un seguro asociado a las promesas de compraventa.
Con esto claro, todo se reduce a elegir una inmobiliaria de confianza, investigar lo más posible sobre sus requisitos, limitaciones y flexibilidades, para invertir correctamente en una propiedad en blanco, y no salir perdiendo tras una larga espera.