Punto de partida
La startup que ayuda a la UC a prevenir lesiones
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Daniel Darras, kinesiólogo de la selección chilena desde hace más de diez años, ha visto lo mejor de la generación dorada desde muy cerca, quizás más que nadie. Ha sido testigo de la ola de buen fútbol que marcó a todo un país y trajo las primeras copas internacionales a territorio nacional.
Hoy, es otra la ola a la que se quiere subir: la de la innovación.
Darras veía cómo las selecciones sudamericanas carecían de tecnología en la recopilación de datos, mismo problema que miraba en la Clínica Meds, donde también trabajaba. Por eso, en 2019 le escribió a su amigo de colegio Nicolás Rossetti, cientista político que estaba incursionando en el área de la ciencia de datos, y le propuso crear un software. Le planteó a Rossetti el problema con la captura de información, lo difícil que es leerla y cómo no existen estadísticas médicas en tiempo real.
Con la idea un poco más trabajada, llamaron a Alberto Bisañez -también compañero de colegio- para sumar una cabeza más comercial y financiera. Dibujaron los números y en octubre de 2020 crearon Triceps MDA.
La primera prueba, Francis Cagigao
A principios de 2021 empezó el desarrollo de la plataforma. Rossetti contrató un equipo de ingenieros para construir un primer piloto y salir a probar. Cuatro meses después Darras se contactó con el entonces director de selecciones de Chile, Francis Cagigao, para mostrarle el producto. “Estaba bien inseguro, tiene una trayectoria muy reconocida y fue partícipe de la implementación de tecnología en los mejores años del Arsenal de Inglaterra”, recuerda. Al ex futbolista le gustó la idea.
Por ese tiempo se jugaba la Copa América, y fue en este evento en que el equipo médico de la selección probó el software. Sirvió para generar nuevas ideas, saber qué necesitan los equipos y probar las funcionalidades.
Sus fundadores explican que es un “SaaS modular” que permite a las instituciones deportivas generar una enriquecedora base de datos con la historia médica y física del deportista. “Con esto llevamos la trazabilidad en tiempo real y permitimos a los profesionales generar correcciones de cualquier desviación. Además, con nuestro departamento de ciencia de datos, apoyamos mediante inteligencia clínica la toma de decisiones”, afirman.
El salto a primera división
Posterior a eso vinieron los pilotos con equipos del campeonato nacional. El primero fue con Coquimbo Unido a finales de 2021, quien a los pocos meses pasó a ser también el primer cliente de pago. También trabajaron con Audax Italiano, Unión Española, Universidad de Chile y Palestino. A mediados de 2022 empezaron las conversaciones con Universidad Católica. Cuentan que los acompañaron en el uso del software y se generó una buena relación.
Casi un año después vino la prueba de fuego: el jefe médico de la UC, Andrés Villa, citó a Darras a una reunión en un café en la Clínica de San Carlos de Apoquindo. “Tenía solo cinco minutos, tuve que terminar de convencerlo de por qué éramos un aporte y cómo cuidamos la seguridad de los datos de los jugadores”, recuerda.
Esto último, dice, era muy importante porque “son el mayor activo de un equipo”, dice el kinesiólogo. Al terminar, Villa le dijo que le haría una propuesta formal al directorio. “Salí flotando después de escuchar eso, fue un relajo”, recuerda. En noviembre del 2022 pasaron a ser clientes junto con Palestino.
Los socios explican que no vienen a reemplazar a los profesionales médicos, solo a entregar nuevas herramientas y respaldar de manera clara y objetiva las decisiones. Dicen que entregan datos epidemiológicos, enfermedades, lesiones, cirugías, cuántos días ha perdido cada jugador por lesiones, y son claros en decir que “todo eso estaba, no estamos inventando la rueda, pero lo tenían en excels y distintos documentos. Ahora está todo integrado y centralizado”.
Reuniones con River Plate y selecciones sudamericanas
Han tenido conversaciones con las selecciones de Perú, Bolivia, Ecuador y Colombia, además de equipos mexicanos como Monterrey, Chivas y el histórico club argentino River Plate. Dicen que su propuesta existe en el mercado europeo, pero los precios no están a la altura de las ligas sudamericanas. Además, no están adaptados a los datos médicos de acá.
Según Bisañez, en el fútbol, el 19% del plantel -en cualquier punto de la temporada- no se encuentra disponible por lesiones físicas, y casi dos tercios de éstas se deben a molestias en los isquiotibiales. Para eso, desarrollaron un sistema que previene y alerta esta lesión. Generaron un modelo en el que suenan alarmas cuando un jugador se está excediendo sobre la norma en cuánto a distancia recorrida, que se cruza con la edad y lesiones anteriores. Con esto, pretenden no solo prevenir las lesiones, sino también que los clubes ahorren gastos en recuperación y puedan sacarle el mayor rendimiento a sus jugadores.
Esperan estar probando el primer trimestre del 2024 el software en una clínica privada y facturar $ 70 millones este año. Los números aún son bajos, actualmente bordean los $ 4 millones mensuales y se han adjudicado fondos de Corfo. Son parte del portafolio de UDD Ventures, Digevo Ventures y de la segunda generación de Zsports Lab, una aceleradora de startups enfocadas en el deporte, donde son mentores el coordinador de eventos de la FIFA Michael Boys, el gerente comercial de Cruzados y dirigentes internacionales, como el jefe de innovación del Atlético Mineiro, el CEO del Sporting de Cristal y un ejecutivo para Latinoamérica del Bayern Munich.
Hoy, estos tres compañeros de colegio buscan llegar a todo el continente, algo que nunca se plantearon al egresar. Darras quería ser futbolista y jugó en Unión Española, pero las lesiones le jugaron una mala pasada, Rossetti quería ser cientista político y Bisañez tenía un bicho emprendedor, pero hoy trabaja en una salmonera.
El mismo fútbol que los unió en los patios de su colegio, hoy esperan que sea un negocio rentable en el futuro.