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Alejandra Cortázar, tras el rechazo del Senado: “Postulé para que nunca se olvidaran de los párvulos”

Alejandra Cortázar, tras el rechazo del Senado: “Postulé para que nunca se olvidaran de los párvulos”

Piñera propuso nombrar como consejeras del Consejo Nacional de Educación (CNED) a Cortázar y a Sylvia Eyzaguirre. "Pese a que se planteó que era de derecha, no lo soy", dice Cortázar.

Por: DF MAS | Publicado: Domingo 27 de junio de 2021 a las 04:00
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El 22 de junio el Senado rechazó la doble propuesta del Presidente Piñera de nombrar como consejeras del Consejo Nacional de Educación (CNED) a Alejandra Cortázar y a Sylvia Eyzaguirre. Tuvieron 18 votos a favor, 21 en contra, y 1 abstención. La decisión provocó molestia en expertos del sector, calificándolo de “vergonzoso y lamentable”, dado el nivel técnico y calidad de las profesionales.

A partir del rechazo, Cortázar, quien es psicóloga de la U. de Chile y doctora en Educación con mención en Políticas Públicas en Educación Inicial de Columbia, habla aquí de su perspectiva en materia de educación parvularia y desafíos que mira en la educación.

“Pese a que se planteó que era de derecha, no lo soy. Trabajé en el segundo gobierno de Michelle Bachelet, estoy asesorando la campaña de Paula Narváez. De todas formas, nunca he participado en la política como tal, siempre desde el área técnica, que es donde me desempeño”, aclara Alejandra (42), quien desde hace cinco años es consejera de la Agencia de la Calidad de la Educación, consultora del Banco Mundial y fundadora del Centro de Estudios de Primera Infancia.

-¿Por qué postulaste al Consejo? ¿Cuál era tu proyecto ahí?
-Mi percepción es que la agencia, donde yo colaboro, es una institución a la que le falta autonomía. Entonces me dieron ganas de seguir participando, pero con otro rol. Y apareció esta oportunidad de postular a este rol, que es un consejo que toma decisiones que son vinculantes en el CNED (presidido desde este año, por designación presidencial, por Luz María Budge). ¿Por qué postulo en este tipo de cargos y no me he metido en gobiernos? Porque me gusta tener libertad en tomar decisiones técnicas. Eso significa que puedo poner al centro lo que veo que es mejor para niños, niñas y escuelas, sin color político, ni presiones de por medio. Y eso era súper importante para mí que se pudiera hacer en el consejo. Por eso postulé. Y porque creo que hay grandes desafíos.

El proceso de postulación y del concurso, cuenta la psicóloga, duró un año en total, postularon más de 60 personas y concluyó -tras pasar por la Alta Dirección Pública- con ella en la terna de educación parvularia y Sylvia Eyzaguirre en la de educación escolar. “Siempre funciona así: con un representante oficialista y otro de oposición. Pero se rechazaron ambas, pues era un solo decreto para ambos cargos”, señala la profesional que pese a no militar en un partido, simpatiza desde hace años con el PS.

-¿Cuáles eran sus prioridades como consejera?
-Cuando postulé había ocurrido hace poco el estallido social y la pandemia estaba partiendo. Y ahora claro que es un tema que el consejo debe considerar. El consejo actual debe de considerar estos factores y también preparar a los estudiantes para el siglo XXI. Como consejo tiene que responder a las necesidades y características del país que tenemos ahora, que es muy distinto a cuando partió el proceso de aseguramiento hace 10 años.

-¿En concreto?
- La pandemia es un súper desafío. El consejo deberá tomar decisiones y pensar qué hacer con todo este vacío de aprendizaje que está quedando; y especialmente la educación parvularia, que siempre ha quedado súper relegada. Yo siempre he pensado que vende bien, para hacer propaganda y campaña de candidatos todos lo mencionan, pero después como país se le da menos prioridad, se invierte menos. En la pandemia, desde el ministerio, por ejemplo, no se habilitó ningún software para niños chicos, pero sí para los más grandes se les habilitó Google Classroom. No se invirtió en una plataforma que hubiera podido cambiar el aprendizaje de niños menores de 8 años durante la pandemia. En cuanto al estallido, es importante ver cómo los estándares, curriculos y programas representan e integran todas las voces y cómo se establecen mecanismos de participación también de los niños, niñas y jóvenes. El mundo está cambiando a nivel tecnólogico y la educación también debiese cambiar, es algo que no podemos postergar más.
¿Qué es lo que me motivó a mí a participar? Abogar por el espacio de la educación parvularia. Mi rol en la agencia fue que nunca se nos olvidaran los párvulos. Pero era un rol donde yo tenía poca libertad, porque los consejeros de la agencia tienen un ámbito de acción muy limitado, por eso pensé que desde el consejo podría seguir participando en las tareas que están pendientes. Además me interesa poder aportar en otros temas que no están asociados al consejo ni la agencia, como cambiar el sistema de financiamiento de la educación parvularia. No puede ser que en cualquier barrio, dos jardines infantiles financiados por el Estado tengan hasta un 50% de diferencia de financiamiento dependiendo de quien los administra. Eso debiera terminar. Son temas pendientes.

-Hace unos años escribiste una carta a un medio señalando que la educación parvularia era como un fósforo. Por lo que te escucho, sigues pensando así.
-Es un poco la sensación que tengo: que es un tema que se prende, todos hablan, y después se apaga sin mucho efecto y no se habla más. Durante la pandemia lo que vimos es que todos estaban preocupados de los estudiantes escolares, pero costó harto que se hablara sobre lo que pasaba en jardines. Tenemos mucha más tolerancia, incluso en las familias, a tener a niños y niñas chicas en la casa sin estudiar, que los grandes. Si hay que elegir, se prioriza a uno de quinto, y se deja al de kinder sin conectarse. Cuando estos son años súper importantes, y los efectos y diferencias que benefician a los que sí fueron se notan hasta la universidad. No es lo mismo faltar en un primero básico que otro año, son más críticos algunos cursos.

-En ese sentido, ¿cómo ves el movimiento de ciudadanos que pide abrir las escuelas, incluso en fase 1?
-Yo creo que el sistema, el país, debiera de tomar todas las medidas necesarias para abrir las escuelas de forma segura. Las escuelas y jardines debieran ser lo último en cerrar y lo primero en abrir, y las familias tener la libertad de mandarlos o no. Esto no significa que sea en cualquier condición. Es una vergüenza que el mall, Fantasilandia estén abiertos, pero que los niños no pueden ir al colegio. Las estimaciones del Banco Mundial en la pérdida de conocimiento son brutales, tiene un costo que es muy grande. Llevamos 40 semanas sin colegio, esto es muy serio.

-¿Qué tema en concreto estás viendo en la candidatura de Narváez?
-Apostar a una educación parvularia más flexible, más pertinente, con mejores condiciones para los profesores y con un cambio de sistema de financiamiento a uno más justo. No es fácil. Sería el tercer gobierno que intenta este cambio de financiamiento, los primeros dos no lográndolo: uno de Bachelet y este de Piñera.

-¿Te gustaría trabajar activamente en política?
-No me interesa por ahora. Pero tengo 42 años, nunca digo nunca.

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