Un equipo de trabajo con representantes de diversas áreas del Banco Central de Chile, liderados por el consejero Alberto Naudon, el más joven del equipo directivo de Mario Marcel, llevaban hasta hace unos días más de un año silenciosamente trabajando en analizar cómo el instituto emisor reaccionará ante las transformaciones de los mercados de pago.

La agenda se transparentó con detalles en una cita de la comisión de Hacienda del Senado, el lunes pasado, cuando el presidente Marcel derechamente mostró la hoja de ruta de los pasos a seguir por el instituto emisor ante los cambios en el mercado de pagos. Entre los elementos salta por su audacia la idea de evaluar incluso una moneda digital chilena. El CLP peso le dicen formalmente, el cóndor digital más en broma.

Los bancos centrales del mundo se pusieron en alerta ante el anuncio de Facebook de crear una moneda digital sin fronteras -se llamó libra originalmente y luego se cambió a diem-, lo que suponía un debilitamiento de las políticas monetarias de los países.

A esto se suma que en algunos países, como Suecia, el efectivo está desapareciendo rápidamente y será necesario reemplazarlo en los próximos años.

El resultado del informe Naudon estará listo el primer trimestre de 2022, pero más que la decisión de los pasos a tomar se evaluarán los pros y contras de las regulaciones, la moneda digital y otros caminos para enfrentar los nuevos escenarios de pago.