La semana pasada el reconocido ilustrador chileno Malaimagen, cuyo nombre es Guillermo Galindo Kuscevic, denunció en su cuenta de Instagram que la plataforma Patreon, donde el dibujante contaba con una comunidad de suscriptores que pagan hasta $ 20 dólares mensuales por acceder a su trabajo, había cancelado su cuenta sin mayor explicación.

“Eliminar a un creador siempre es una decisión difícil y una acción que sólo tomamos después de una cuidadosa consideración. No hemos tomado esta decisión a la ligera y no podremos considerar ninguna apelación. Además, no podemos comentar sobre los detalles específicos relacionados con nuestro proceso de eliminación de cuenta”, le respondió Patreon a Malaimagen a través de un correo, según el propio ilustrador publicó en sus redes.

Galindo agregó que sospechaba se trataba de un acto de censura hacia su contenido de carácter político que constituiría un golpe a la libertad de expresión. Sus más de 200 mil seguidores en Instagram no tardaron en reaccionar y fueron a reclamar directamente a Patreon dejando en sus comentarios cientos de recetas chilenas, acción que se ha hecho común como método de protesta en Internet desde que el cantante Adam Levine de Maroon 5 hizo una crítica a nuestro país después de presentarse en el Festival de Viña del Mar en 2020.

Entonces el músico estadounidense recibió una avalancha de recetas en sus redes sociales. Esta iniciativa espontánea de los chilenos en redes sociales se ha repetido en otras oportunidades y ahora fue el turno de la plataforma de mecenazgo.

Al parecer la táctica habría funcionado, porque a mediados de esta semana Patreon decidió reabrir la cuenta de Malaimagen. “Les agradezco de sobremanera todo el apoyo que me dieron en este mal rato, estoy seguro que sin los reclamos y la presión que ejercieron (y las recetas de cocina) la plataforma no habría reevaluado el caso”, escribió el dibujante a sus seguidores.