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Cuatro afiliados del Fondo E narran los efectos de las caídas del selectivo
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Este miércoles 11 de agosto la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados inició la revisión de los siete proyectos de ley presentados por parlamentarios para permitir un cuarto retiro de fondos de pensiones, en propuestas que van desde un 10% hasta el 100%.
El debate se ha agudizado en medio de la fuerte caída que este año anota el Fondo E, considerado uno de refugio para los cotizantes que están prontos a jubilar, debido a que los recursos se invierten principalmente en renta fija. Pero, debido a las fluctuaciones del mercado, el fondo E ha perdido entre enero y julio de este año 11,07% real.
Este retroceso preocupa a las 807.476 personas que hasta mayo pasado cotizaban en este fondo, según datos de la Superintendencia de Pensiones. También a quienes se han pensionado o están por hacerlo ya que desde abril de este año, la caída del fondo E se agudizó.
Eva Ureta (65), Maipú
Es profesora, lleva 43 años trabajando y no tiene lagunas previsionales. Apenas salió del colegio empezó a hacerlo y jamás cesó. En sus primeros años de profesional perteneció a la Caja de Empleados Públicos y en 1986 mientras trabajaba en la Corporación Municipal de Maipú, se cambió a AFP Habitat.
Eva Ureta no pensaba en jubilarse hasta la llegada del Covid-19. “Estaba activa y sin ningún problema. Pero, con el asunto de la pandemia evidentemente decidí que prefiero jubilarme porque no me quiero contagiar, ni morir luego. Me dieron ganas de llorar cuando supe la cantidad de plata que iba a sacar de jubilación, porque de “jubilación” no tiene nada. Recibiré mensualmente $ 370 mil”.
Durante sus inicios laborales, la mujer afirma que tenía un sueldo bajo. Sin embargo luego de invertir y estudiar un postítulo y un magíster, en 1995 su salario subió a $1.700.000 líquidos aproximadamente.
En junio de este año Ureta fue a su AFP y pidió el registro histórico de sus cotizaciones. Recién se enteró que estaba en el fondo E. “Nunca hice un trámite para pensionarme, pero le pregunté a mi ejecutivo y me dijo que toda la gente pronta a jubilarse estaba en el fondo E. Creí que mi monto sería de $800.000”.
Optó por no jubilar porque asegura que no tiene sentido hacerlo. “Perdí $ 9 millones, sin considerar uno de los retiros que hice, que fue el primero y lo hice por un tema de salud. Ahora estoy pensando en sacar todo. Creo que hoy más que nunca se hace fundamental enseñar educación financiera en el país para que los jóvenes no vivan lo que estamos viviendo ahora nosotros, los adultos mayores”.
Carlos Ramírez (63), Maipú
Le quedan dos años para jubilar, pero tenía planeado hacerlo antes. “Quería independizarme y no tener que depender de un jefe. Me aburre estar todas las semanas en reuniones, de que me pongan metas y todo ese tipo cosas”.
No recuerda exactamente cuántos años lleva trabajando, pero sabe que son más de 42. Partió sus labores en cosméticos Avon y estuvo afiliado a la Caja de Empleados Particulares antes de que las AFP fueran impuestas en Chile. Ahora, lleva 30 años como ejecutivo de ventas en empresas de licores. “Mi mejor época fue de 1990 a 1999 en una viña. Mi sueldo era variable y fluctuaba entre $ 1.900.000 y $ 2.250.000. Hoy día mi pago es por comisión y es muy variable, pero aproximadamente gano $ 650.000”, cuenta.
Desde que tiene 53 años está en el fondo E. “Me cambié porque un día un ejecutivo de las AFP nos hizo un seminario a todos en la pega y nos aconsejó que a los que ya pasamos los 50 nos convenía el fondo E porque era más rentable y no se perdía tanto dinero. La mayoría enganchamos y le hicimos caso”.
Producto de la caída del fondo ha perdido aproximadamente $ 7 millones en estos últimos meses. Ahora ya no quiere jubilarse. El problema es que su mujer está en la misma situación.
Eliana Valenzuela (61), San Miguel
Eliana Valenzuela se jubiló el año pasado cuando cumplió 60 años, con un fondo acumulado de $ 120 millones, lo que le alcanzaba para una jubilación de $ 560 mil pesos mensuales. “Mi idea era jubilarme y seguir trabajando uno o dos años más para ver si podía juntar un poquitito más para incrementar la jubilación después de 37 años de trabajo en Educación”.
Su sueldo era de $ 2.000.000. “Siempre estuve en el fondo C. Me lo sugerían porque me daba cierta estabilidad. Pero cuando me jubilé me dijeron que me cambiara al fondo E. Lo hice porque supuestamente era el menos riesgoso y el con mayor estabilidad, sin embargo me cambié y perdí casi $ 20 millones. En este minuto estoy con $ 99 millones y en ese tiempo estaba con $ 120 millones. Me di cuenta de esta baja como hace unos tres meses más o menos. Mi jubilación bajó a $ 460 mil”.
José Mansilla de La Torre (67), Providencia
Mansilla enseña Matemática y Física hace 44 años. También es contador auditor y asegura que maneja muy bien los temas financieros y de inversión.
Pertenece a una AFP desde la instauración del sistema, en mayo de 1981. “Se pintó muy atractivo, y lo es. El problema es que nosotros los chilenos no tenemos conciencia del futuro y de la importancia que es tener recursos para la vejez. Nos falta mucha educación en los temas financieros”, dice.
Antes de sus 60 años, ejerciendo dos profesiones, ganaba $ 2,5 millones y ahora, dedicándose solo a la docencia recibe $ 1,2 millones.
Tenía un poco más de $130 millones para su jubilación. Hasta el momento ha sacado dos retiros y los tiene depositados en cuenta dos, de la misma AFP.
En lo que va del año su jubilación ha bajado casi $ 17 millones. “El primer año recibiré una jubilación de casi $ 800 mil, el segundo bajará a $ 700 y, luego a $ 600 y tanto y ya sé que irá bajando a medida que pasen los años, porque esto se va recalculando”. “Lamentablemente así funciona este sistema”, se lamenta.