Opinión
La columna de J.J.Jinks: Se busca
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Ante la evidente falta de candidato para representar las ideas centro izquierda e izquierda a secas en la próxima elección presidencial se han esbozado algunos paliativos frente a la gravedad de la situación para sus representados. A gente ilustrada en los avatares de la política le gusta señalar que en estas mismas fechas en la elección pasada el Presidente Boric prácticamente no marcaba en las encuestas. Si bien eso es cierto, la comparación no es muy feliz, especialmente, en boca de expertos (si es que eso existe en este rubro).
Las encuestas de la izquierda las lideraba con mucha holgura el candidato comunista Daniel Jadue. No había que tener un doctorado en el tema para darse cuenta que si bien Jadue tenía un capital político importante había un espacio para que fuese desafiado dentro de su sector. Ser comunista tiene un techo electoral -gracias a Dios- y en este caso se hizo evidente con claridad. Boric encarnó a la TOCOJA (todes contra Jadue) y más encima tuvo la fortuna de enfrentar a Kast (a propósito de techos) en segunda vuelta, carambola y aquí estamos disfrutando.
La situación hoy es totalmente diferente, las encuestas son lideradas con comodidad por las figuras de la tripleta alemana (Matthei, Kaiser, Kast) y los días pasan y nada hace presumir que surja de la nada un candidato de izquierda que rompa el molde. Por lejos quien está mejor aspectada y sigue siendo competitiva es Michelle Bachelet, pero la ex Presidenta no ha dado señales en el último tiempo de estar disponible para acometer una tercera carrera presidencial, más aún cuesta arriba.
El timing tampoco es el mejor para ella pues se ha ido instalando el consenso de que su último gobierno tiene alta responsabilidad en los males que vive Chile hoy. Poco sabio sería someter su legado a una especie de plebiscito con pocas posibilidades de ganar. Además, hay elementos emocionales, eventualmente perder contra Evelyn debe ser algo que por historia Michelle preferiría que no fuese su último acto en política. Demasiado símbolo involucrado.
El joven maravilla, Tomás Vodanovic, que emergió como el gran ganador de las municipales, se ha ido quedando en las encuestas y marca un tímido 3 a 4%. Él se ha encargado de decir a quien lo quiera escuchar que no tiene la experiencia para el cargo y que no dejará botada a la gente de Maipú. Sería bien extraño que se viese forzado a aceptar el reto cuando claramente no le conviene y estar arropado haciendo obras municipales no le viene nada de mal para posicionarse en la próxima batalla donde seguro estará en los puestos de avanzada.
La más seria candidata del sector debiese ser Carolina Tohá, pero se junta el que nunca ha sido una buena sacadora de votos con una plataforma malita para una elección popular como son las responsabilidades del Ministerio del Interior. De yapa tiene los coletazos del caso Monsalve, por lo que tendría que tener muchas ganas para ir a dar una pelea muy complicada. Sería bueno para el país que la izquierda fuese representada por una candidata sensata y competente, pero se ve bien difícil el panorama.
Ante este panorama sombrío aparece la creatividad. La presidenta del Partido Socialista dado que nadie la nombraba decidió autoproclamarse, el senador Fidel Espinoza propuso a Jaime Pizarro (el otro Kaiser), desde el Frente Amplio de tanto en tanto surge el diputado Winter (entretención asegurada), el amigo de sus amigos Pato Navia propuso al verborreico kirchnerista ME-O, todo esto en una semana. Bonito juego apostar a quién finalmente va a ser, pues realmente nadie tiene idea.