Click acá para ir directamente al contenido

Por dentro

¿Cómo impacta a Enap la privatización de YPF en Argentina?

¿Cómo impacta a Enap la privatización de YPF en Argentina?

Están pasando cosas al otro lado de la cordillera. El gobierno de Javier Milei dijo que buscan privatizar YPF. Una de las socias por 30 años de esa firma, que ha pasado por dueños privados y el Estado, es la chilena Enap. Tienen varios proyectos conjuntos y esperan seguir trabajando. ¿Cómo? Eso está por verse.

Por: Nicolás Durante | Publicado: Sábado 6 de enero de 2024 a las 21:00
  • T+
  • T-

La relación comenzó a inicios de los ‘90. La estatal petrolera de Chile, Enap, decidió incursionar en negocios con su par argentina YPF, en ese entonces controlada por privados. Desde ahí, han pasado por buenos y malos momentos, conflictos y ganancias. Pero ahora, las aguas se vuelven a agitar luego de que el Presidente trasandino Javier Milei anunciara la privatización de YPF en medio de una orden de embargo decretada por la justicia de Estados Unidos. 

Aunque en Chile el tema se ha analizado en conversaciones informales, en Enap siguen atentos el devenir de su socio argentino. Allá explotan en varios bloques: en la Cuenca Austral, son operadores y poseen el 50% de participación del “Área Magallanes”, siendo YPF quien posee el 50% restante. Cuentan con cinco plataformas productoras de petróleo y gas, construidas e instaladas por la chilena, frente a la boca oriental del Estrecho de Magallanes. Esas plataformas convierten a ENAP Argentina en el principal operador off shore del país. 

Además, son titulares del 100% de Octans Pegaso, una concesión de exploración de 880 kilómetros cuadrados de superficie, ubicada a orillas de la zona sur de la provincia de Santa Cruz.

Y por último, son socios no operadores con el 50% de participación en el Yacimiento Campamento Central – Cañadón Perdido, ubicado en Comodoro Rivadavia y que es operado por YPF.

Según las memorias y estados financieros de Enap Sipetrol, la filial de Enap que tiene sus operaciones en Magallanes, Argentina, Ecuador y Egipto, sólo entre 2017 y 2022 han producido en Argentina 11.665 mbls (miles de barriles de petróleo) y 91.439 mboe (miles de barriles equivalente de petróleo). 

En Enap Argentina trabajan 180 personas, siendo la operación más numerosa fuera de Chile, y tienen oficina en Buenos Aires y Río Gallegos. Además, la chilena es miembro de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos, del Club del Petróleo, de la Comisión Directiva del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas y de la Society of Petroleum Engineers – Argentina.

“Hay una clara decisión de liberalizar el mercado del petróleo y el gas por parte del nuevo Gobierno. Y eso ya comenzó, subieron 50% el precio de los combustibles porque ahora es el mercado el que fija los precios, no el Gobierno. Y el próximo paso es liberalizar YPF, una empresa sólida, pero repleta de políticos sin preparación técnica”, explica al otro lado del teléfono José Luis Sureda, ex secretario de Hidrocarburos de Argentina y consultor en el mercado de petróleo y gas.

Sobre Enap, el experto dice que “la chilena tiene una oportunidad única, ya son socios, se conocen, y han trabajado bien. Es una buena oportunidad para que sigan trabajando juntos. Además, Milei ya dijo que se van a respetar todos los contratos vigentes”. 

Enap ha sido socio de privados y del Estado en YPF, es “agnóstica” sobre quién es el dueño, dice un exdirector de la estatal. 

Las negociaciones, en caso de haber, tomarán ribetes más consulares que sólo de negocios. Aunque Enap tiene un gobierno corporativo, para el Gobierno chileno será importante involucrarse en las negociaciones que vengan. Nadie ha tomado ninguna decisión, señalan en el Ejecutivo, porque aún es muy prematuro, y primero hay que ver si avanza el proceso de privatización y en qué pie quedará Enap. 

“Van a haber turbulencias en el corto plazo, pero una vez que se normalice la situación, se podrá despejar bien el futuro de YPF. La empresa va a entrar en una fuerte etapa de ganancia de productividad, hay un staff de excelencia de profesionales que ahora van a empezar a trabajar”, dice el exfuncionario público.

El yacimiento Vaca Muerta, por ejemplo, donde Argentina tiene puesta buena parte de sus expectativas de sacar petróleo, espera estar produciendo 26 millones de barriles al día. Además, YPF tiene un acuerdo con Enap para exportarlo a través de Chile y enviarlo a los mercados asiáticos. 

Sobre la idea de privatizarlo, Sureda dice que no está del todo de acuerdo, principalmente porque si se vende a una empresa, se está entregando el 50% del mercado del combustible en Argentina. “Es vender un monopolio, que luego va a ser imposible desarmar”, dice. Lo que sí hay que hacer, recomienda, es empezar a vender todo lo que no sea rentable ni haga sentido al negocio.

Hay muchas zonas de explotación que sacan menos de 100 litros al día, eso no tiene sentido explotarlo, debieran venderlo o devolverlo a las provincias. Y ahí empresas como Enap u otras más pequeñas podrían tomar esas oportunidades de negocio”. Hay que depurar el portafolio, apunta. 

Contactado Enap, no estuvo disponible para este reportaje. 

La indemnización pendiente

En 2012, cuando la entonces presidenta Cristina Fernández anunció la estatización de YPF, controlada por la española Repsol, las alarmas diplomáticas se encendieron en Santiago. Fue el mismo Presidente Sebastián Piñera quien salió a decir que iban a defender los intereses de la estatal chilena. 

Quien era embajador en Argentina en ese entonces era Adolfo Zaldivar, quien dijo a la prensa que “este es un conflicto entre una empresa española y el gobierno argentino, no es un conflicto con una empresa chilena. Enap tiene sus contratos con YPF.

Lo que corresponde es que quien suceda a Repsol en sus derechos, como lo plantea el gobierno argentino, vía expropiación, respete los contratos que Enap tiene”. Y agregó que “a mí personalmente el ministro Julio De Vido me ha confirmado y ratificado lo que he dicho. Él es quien está a cargo del asunto. Hay que ver cómo eso se materializa, pero eso es lo que hay”. 

Y así fue, porque los contratos se respetaron y Enap siguió trabajando con el Estado argentino y las provincias como socios. 

Hoy, dicen fuentes diplomáticas chilenas, debería ocurrir lo mismo cuando se liberalice la propiedad de YPF. Lo que sí podría pasar es que se requieran más recursos para inversiones en diferentes yacimientos y entonces la empresa chilena deberá concurrir con su parte de las acciones. Sin embargo, la salud financiera de Enap Sipetrol es sólida.

“El año pasado el resultado antes de impuestos fue de US$ 189 millones, el más alto de 12 años", explicó Denisse Abudinén, la gerenta general de esa filial a DF MAS en una entrevista en junio de este año. Todas las inversiones que ha hecho la empresa se han autofinanciado, sin pedirle nada extra a la matriz, agregó. 

Justamente de ese proceso de estatización de YPF iniciado en la era K, aún quedan esquirlas. Y una grande: una indemnización por US$ 16 mil millones que exige el estudio de abogados Buford -quienes compraron los derechos de litigación de accionistas minoritarios- y que tras años de litigación con el Estado argentino ganaron la demanda el año pasado. 

El próximo miércoles 10 de enero podría comenzar un embargo de los bienes y dineros de YPF fuera de Argentina, que podría complicar más las cosas para la estatal trasandina. Sin embargo, el Presidente Milei ha dado señales de que sí van a pagar, y para hacerlo podría emitir un bono perpetuo, incluir una tasa impositiva sólo para este efecto. Y claro, privatizar YPF. 

A septiembre de este año, YPF registró un beneficio bruto de US$ 3.000 millones y la suma de recursos y reservas de la empresa, tanto de petróleo como de gas, asciende a US$ 310.500 millones.

“Aquí hay un problema porque la plata no la tenemos. Sí tenemos la voluntad de pagar. Vamos a crear la tasa Kicillof, pagarle a Burford con un bono perpetuo. Los argentinos tendremos que pagar todos los años una determinada cantidad de dólares gracias al error monstruoso de Kicillof”, dijo Milei, fiel a su estilo, enfocando la responsabilidad directa en Axel Kicillof, quien estuvo a cargo de la estatización bajo el gobierno de Cristina Fernández. 

El hombre de la privatización 

Quien liderará toda la operación YPF será Horacio Marín, nombrado como presidente y CEO de la estatal. Ingeniero químico de la Universidad Nacional de La Plata, tiene una maestría en Ingeniería en Petróleo de la Universidad de Texas. Llevaba 35 años ligado a la petrolera privada Tecpetrol, con operaciones en varios países del mundo. Desde esa firma lideró justamente el proyecto Vaca Muerta, una de las razones que tuvo Argentina para estatizar YPF. 

De hecho, ese será uno de sus grandes proyectos a empujar a cargo de YPF. En una reciente entrevista con La Nación Argentina, dijo: “La cantidad posible de petróleo y gas es tan grande que pueden ser, en gas, 70 años o más del consumo de la Argentina, y en petróleo lo mismo. En Vaca Muerta podés tener picos de producción hasta el año 2047, entonces, posicionás a la Argentina como un exportador de gas y petróleo, y un país que va a tener superávit total, porque no va a necesitar importar nada de hidrocarburos. Esa es la gran posibilidad que tiene Vaca Muerta”.

“Es respetado por todo el mundo, sabe de lo que habla y es brillante, hay mucha esperanza en él”, dice José Luis Sureda. 

En Chile siguen de cerca los pasos que tome Marín, quien es el nuevo interlocutor y socio de Enap.

La fórmula de la Red para intentar revertir sus pérdidas

Lleva sumida en una crisis por lo menos hace dos años cuando detuvieron los programas propios en vivo y se llenaron de demandas civiles y laborales. Hoy están de a poco recuperándose y a junio reportaron una modesta utilidad, gracias al arriendo de sus instalaciones y sin gastos de producción propia.

SIGUIENTE »
« ANTERIOR