“Nosotros somos pro regulación, pero que sea una regulación sana, sin conflictos de interés, ni de familiares, ni ejecutivos”. Gino Lorenzini en CNN Chile, 4 de junio de 2020.

“Están desesperados, los tenemos tras las cuerdas. Nosotros vamos a seguir avanzando, tranquilos, y cuando menos se lo esperen, seguiremos avanzando en las distintas estrategias”. El mismo Lorenzini, 2 de diciembre de 2020, en su Facebook.

“Llegamos al Everest en un camino de 10 años, ahora hay que tener la humildad y la capacidad de descender el Monte Everest”. Fueron las palabras al cierre del fundador de Felices y Forrados el 2 de marzo en YouTube, horas después de que el Congreso aprobara un proyecto de regulación de los asesores financieros previsionales.

Eso no fue todo. Fiel a su estilo, el ingeniero comercial les dio un consejo a los emprendedores. “Les recomiendo que lo hagan en Lituania, en otros países, no pierdan el tiempo en Chile”. Esto, porque según Lorenzini y sus seguidores, la ley aprobada -que bautizaron como “ley mordaza”-, es personal contra él y su emprendimiento que suma a 200 mil adeptos.

La decisión de Lorenzini y su equipo la venían analizando desde hace tiempo. Junto con su familia y sus más cercanos colaboradores definieron que de aprobarse el proyecto que obliga a dejar una garantía y a transparentar sus ingresos, así como eventuales conflictos de interés, se hacía imposible seguir operando bajo el modelo actual.

Con el proyecto de ley, sumado a otro que viene en camino para limitar los cambios de fondos de AFP, y que el Banco Central había encendido las alertas por los daños que provocaban los cambios masivos en el mercado en general, las cosas no venían bien para Felices y Forrados. Por eso, dicen conocedores, era cuestión de tiempo para que Lorenzini bajara la cortina.

Pero además, en el ámbito personal, Lorenzini cree que la persecución “del gobierno, los grupos económicos y los medios” es con nombre y apellido. Y eso llevó a que no lo dejaran ser candidato a convencional constituyente por el distrito 10. Aunque tanto el Servel como el Tricel rechazaron las listas por estar vinculadas a una empresa privada.

También se evaluó seguir prestando sus servicios como empresa desde el extranjero, pero Lorenzini explicó que lo descartaron. “No pensamos dar el servicio desde el extranjero. No está en nuestra funcionalidad”, dijo. Eso, a pesar que Lorenzini lleva varios años viviendo en Londres, desde donde justamente dirige su empresa.

Donde sí estaría mirando para incursionar es Perú. Pero todo en proyectos muy iniciales aún.

En el video colgado en YouTube, con música triste de fondo, un compungido Lorenzini dio a conocer detalles inéditos de su negocio. No pudieron ser contrastados porque no respondió a DF MAS.

“Este año vamos a pagar una fortuna en impuestos. (Somos) una empresa que respeta todas las leyes laborales, que trabajamos en equipo. Que estamos pagando grandes sumas de impuestos”, afirmó.  

“Habíamos invertido millones de dólares para una aplicación en que la gente pudiera cambiarse de fondo con un dedo. Era una tecnología única a nivel mundial. Esa empresa, de una valorización de más menos US$ 100 millones, la acaba de destruir el gobierno”.

También anunció y recomendó dejar las AFP involucradas en la “triangulación de Piñera”. Dijo que sacaría sus fondos de Habitat y Capital, y los llevaría a AFP UNO. 

Te puede interesar: Felices y Forrados: La historia no contada de cómo Lorenzini construyó a Gino

En el mercado han pasado por varios estados de ánimo respecto a Lorenzini. Al principio les llamó la atención el extrovertido personaje, pero evaluaron que era alguien que apoyaba el sistema de capitalización individual y atraía a la gente joven. Incluso se entrevistó con varios ejecutivos de la industria previsional para conocerse.

Pero después, todo se desbordó y Lorenzini tomó una táctica distinta. Aprovechaba el sistema, pero al mismo tiempo lo atacaba. El punto álgido llegó cuando denunció supuestas triangulaciones entre fondos de pensiones, el Presidente Piñera y Habitat. Todo descartado no una, sino dos veces por la Superintendencia de Pensiones. Y aunque en la Cámara de Diputados se anunciaron dos comisiones investigadoras, una se cayó y la otra nunca se confirmó.

En su momento, Habitat y Volcom evaluaron seriamente querellarse contra Lorenzini, pero hubo dos argumentos que dieron sus abogados internos que los convencieron de no hacerlo: querellarse era darle más espacio como víctima del sistema. Y Lorenzini no reside en Chile, por lo que hacer un exhorto al extranjero sería demasiado engorroso.

El Sernac también está encima. Entre enero y diciembre del año pasado, el organismo había recibido 19 reclamos contra la empresa. Actualizada a febrero de este año, la cifra llega a 33. Todos en investigación. Ahí podría iniciarse un juicio formal contra la fórmula FyF.

Hasta el cierre de esta edición, según el registro de Comercio no había disuelto ninguna de sus empresas: ni Felices y Forrados, ni la matriz Happy and Loaded, ni la empresa de seguridad y de capacitación que suma en su holding, ni una empresa de encuestas.

Al interior de sus empresas también hubo cambios. En diciembre renunció repentinamente el gerente general de Felices y Forrados, Carlos Díaz, un ex importante ejecutivo de Forus. En su reemplazo, asumió el padre de Gino, Héctor Lorenzini Basso, como gerente general.

Fuentes bancarias dicen que están esperando y tienen a sus equipos de riesgo analizando los movimientos que pueda hacer Lorenzini o una de sus empresas. Eso, porque si registran alguna irregularidad la deben reportar cuanto antes a la autoridad.

Lorenzini, aunque espera cerrar la empresa formalmente en mayo o a más tardar en agosto, dio un último consejo, sin contar sus supuestos de proyección. 

“Es lamentable. Vamos a vivir una gran crisis económica, el fondo E va a perder mucho, el fondo A va a perder mucho, y la gente no va a tener disponible información, ya no depende de nosotros. Dimos lo mejor”, dijo mientras la música triste seguía de fondo.