A principios de esta semana el fundador de Twitter Jack Dorsey anunció su renuncia como CEO de la red social, tras 16 años a la cabeza de esta. Ese día la acción abrió en US$ 51,88 y cerró la jornada en US$ 45,78.

En la carta enviada a sus colaboradores, el también creador de la fintech norteamericana Square, afirmó que “no hay muchos fundadores que eligen su compañía sobre su propio ego”. Además, aprovechó de anunciar al nuevo CEO, Parag Agrawal, quien lleva más de 10 años en Twitter y desde el 2017 era CTO.

El miércoles, Square, también creada por Dorsey, anunció que pasará a llamarse Block, y su fundador, que ya era CEO, ahora estará full time ahí.

En aquella firma -que presta servicios financieros y de pagos digitales- trabajan al menos cuatro chilenos, Alejandro Salinas, Francisco Rojas, Fernando Larrañaga y Antonia Baeza. Revelan que fueron notificados del cambio de nombre y llegaba del fundador mediante Slack, startup de comunicación interna .

Salinas, ingeniero civil de la Universidad de Chile y MBA en la Universidad de Melbourne, cuenta que llegó ahí hace cinco años por head hunting, trabaja en el aréa de conectividad y se enfoca en globalizar la firma y permitir que “nuestros ingenieros se conecten y puedan hacer su trabajo donde quiera que estén en el mundo”.

Rojas, por su parte, es ingeniero civil de la Universidad de Talca y desde hace casi cinco años se desempeña como ingeniero de software en la compañía con sede en San Francisco, mismo rol que cumple Larrañaga.

Un punto en común entre los tres es que todos trabajaron antes en Groupon. A diferencia de ellos, Antonia Baeza es ingeniero comercial de la UC, luego hizo un MBA en Standford y desde hace seis meses es product marketing manager en la compañía.

Hoy, con una valorización bursátil de US$ 87,7 mil millones, la fintech fundada en 2009 tiene una capitalización de más del doble que la red social del pajarito: vale cerca de US$ 53,1 mil millones más que Twitter, fundada tres años antes.