El jueves en la tarde, la vocera de gobierno Camila Vallejo anunció en sus redes sociales que está embarazada.

“Estamos muy felices porque una nueva personita se integrará a la familia. Han sido 3 meses de intensos síntomas, pero también de mucha emoción por este nuevo y maravilloso paso en nuestras vidas”, escribió en su Instagram.

En menos de 24 horas, su mensaje recibió más 112 mil likes y cerca de 200 mensajes, incluido el del Presidente Gabriel Boric: “Compañera querida! Qué alegría más grande. Les mando un abrazo gigante a ti y al Abel”.

Vallejo no ha sido la única. La primera vez que una ministra en ejercicio se embarazó fue en 2013, durante el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera. Fue Patricia Pérez, entonces titular de Justicia -antes había sido dos años subsecretaria-, quien marcó así el primer precedente del tema en la historia chilena.

En artículos de prensa de la época, la abogada Patricia Pérez contaba que su embarazo fue sorpresivo, después de años de tratamiento contra la infertilidad. Agregaba que tras contárselo a su marido, debió comunicárselo al Presidente Piñera, su jefe.

“Él se puso muy contento y me felicitó. Me dijo que era la mejor noticia que le podría haber dado, mejor que cualquier proyecto de ley, mejor que cualquier cosa. Fue muy cariñoso”, detalló a un reportaje de La Tercera. Días después, el mandatario le regaló un libro sobre maternidad.

“Una ministra embarazada no debería ser algo raro en el futuro”, decía entonces Pérez, en alusión a que veía más incorporación de mujeres jóvenes a los gabinetes, “lo que habla también de un cambio social”.

Patricia Pérez tuvo gemelas, Esperanza y Libertad, que nacieron en enero de 2014. Luego, debido a un lupus que sufría desde años antes, Pérez tuvo una serie de complicaciones que requirieron larga rehabilitación. Hoy, la abogada se desempeña como jueza de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (electa para el periodo 2022-2027).