A las 11 de la mañana del miércoles 15 el Centro de Estudios Públicos (CEP) entregó los resultados de la encuesta CEP, realizada entre el 25 de julio y 1 de septiembre de 2021, cuyos datos más destacados los días posteriores tienen que ver con los porcentajes de los presidenciables: los candidatos Gabriel Boric, de Apruebo Dignidad, y Sebastián Sichel, de Chile Podemos Más, obtuvieron un 13% y 11%, respectivamente, mientras que Yasna Provoste, de Nuevo Pacto Social, un 6%.

La otra conclusión destacada por los medios es que a solo dos meses de las elecciones del 21 de noviembre, la mitad de los consultados (50%) no sabe quién le gustaría que fuera la o el próximo presidente, o no responde.

“Un factor importante es que la carrera presidencial partió tarde: el debate político estuvo centrado en la elección de convencionales y en los últimos meses, con elecciones primarias separadas, partió en serio”, explica Carmen Le Foulon, coordinadora del área de Opinión Pública del CEP.

Pero, señala la investigadora, hay otro tema que merece mayor análisis: la confianza.

“Los chilenos somos sumamente desconfiados (85% creen que siempre o casi siempre se debe ser cuidadoso en el trato con la gente, mientras que un 15% considera que casi siempre sí se puede confiar en las personas), y ahí hay que hacer zoom, porque eso también influye en la decisión de ir a votar y es un factor que los equipos políticos deberán considerar: no solo convencer de que votes por x candidatos, sino que animarlos a ir a votar”, indica.

En todo caso, añade, pese a la desconfianza, ha habido un aumento en la confianza en las instituciones. Y lo que es interesante, es que hay instituciones que cuentan con buena valoración “tanto entre las personas que son ´desconfiadas en general´, como por aquellos que tienen más confianza en las demás personas”.

En ese campo destaca a las radios y universidades. Por su parte un 34% de las personas que sí confían en instituciones y personas, también confía en la Convención; mientras que un 22% del grupo que en general cree que no se puede confiar en las personas, apoya la Convención. “Eso indica que la valoración de la Convención no es negativa, y eso incluye tanto a los que confían como los que desconfían de las demás personas”, concluye.