“Nos dirigimos a usted para informarle sobre una importante decisión respecto a nuestras operaciones en Chile. Debido a cambios significativos en el entorno empresarial en Chile, hemos tomado la difícil decisión de cerrar nuestras operaciones en el país y, por lo tanto, pondremos fin a las ventas relacionadas a su cuenta a partir del próximo día 17 de Febrero (Lunes)”, fue el mail que le llegó a los vendedores que tienen productos en el ecommerce Dafiti en Chile.

“Aprovechamos para confirmar que todos los pagos por ventas realizadas hasta la fecha antes indicada serán realizados según nuestros acuerdos comerciales vigentes. Apreciamos profundamente su colaboración y comprensión durante este período de transición”, decía también el mensaje.

A Chile llegó en 2011 y a Latinoamérica llegó un año antes, específicamente a Brasil. El marketplace de moda fue uno de los primeros de la región, sus fundadores se inspiraron en modelos como Zappos y Zalando,  y alcanzó a ser el ecommerce de moda más grande de la región.

En 2021 sus fundadores, Philipp Povel y Malte Huffmann dejaron la empresa, en ese momento dijeron “ahora sentimos que es momento de concentrarnos en otras prioridades, particularmente en nuestras familias”. En su historia Dafiti ha levantado US$ 275 millones de dólares con  inversionistas como Rocket Internet, JP Morgan, Ontario Teachers Pension Plan.

Conocedores del negocio dicen que desde el fin de la pandemia las ventas empezaron a caer y se vieron despidos en los equipos. En Chile llegaron a tener 400 personas y contaban con un moderno centro de distribución de 13 mil metros cuadrados en Pudahuel.

Consultados por DF MAS, desde Dafiti afirmaron: "Para mantener la sostenibilidad de nuestro negocio y continuar creciendo como el destino líder de moda y estilo de vida online en Latinoamérica, Dafiti revisa y reajusta periódicamente los costos en todo nuestro negocio. Lamentablemente, estos cambios han afectado recientemente nuestro negocio en Chile, y confirmamos el inicio de un cierre ordenado de Dafiti Chile".

Y agregaron: "Las empresas chilenas han enfrentado desafíos importantes en el período posterior al COVID, incluido un entorno operativo desafiante y una mayor presión de la competencia local. Estos factores han hecho que sea cada vez más difícil para la empresa competir eficazmente, lo que ha dado como resultado una disminución sustancial de su escala y participación de mercado."