“Me llamó hace una semana un amigo que estaba esquiando en Canadá para contarme que vio en la TV local el refugio que tenemos en el centro de esquí de Malalcahuello”, dice el emprendedor Pablo Araya. Aunque afirma que lo tomó por sorpresa, de la firma de arriendos vacacionales ya lo habían contactado.

Fue en julio del 2022 que un equipo de Airbnb lo llamó con la intención de promocionar destinos turísticos en centros de esquí de Chile. Araya comenta que le llamó la atención que buscaran lugares tan poco conocidos, pero le ayudó que sean refugios bien equipados, con diseño y accesibles. Trabajan con los arquitectos Sergio Araneda de SAA arquitectos y Cristóbal Vial.

En septiembre llegó al lugar el equipo de esquí paralímpico de Estados Unidos, acompañados de fotógrafos y cineastas para crear un vídeo -producido por Airbnb- que mostrara las maravillas del lugar y la casa disponible para arrendar en la aplicación. Desde entonces, han llegado rusos, alemanes y franceses.

Araya comenta que cuando empezaron a construir este refugio el plan era un lugar familiar, pero se dieron cuenta de que no habían muchas ofertas de este tipo en la zona y empezaron a arrendarlo. Debido al éxito, decidieron construir más y crear un nuevo negocio: refugios australes.

Actualmente, ofrecen la construcción de refugios en la Patagonia chilena; ellos tienen los terrenos y ofrecen cuatro tipos de casas con posibilidades de agrandarlas. Se hacen cargo del diseño, construcción y la entregan lista para habitar. “La idea es ahorrarte todos los cachos de construir una casa”, dice Araya. Además. ofrecen la posibilidad de comprar acciones de las propiedades para tener acceso a uso durante el año. Actualmente están ejecutando cinco nuevos proyectos en Río Blanco, Aysén.