En abril de 2015, Patricio de Solminihac llegó al mayor puesto de su carrera como ejecutivo: fue nombrado gerente general de SQM. Lo que vino después fueron los tres años más intensos de su carrera profesional, al hacerse cargo de una empresa cuestionada y perseguida por la justicia por los aportes a políticos de todo el espectro.

Enfrentó comisiones parlamentarias, declaró por largas horas en Fiscalía, vivió profundos cambios de accionistas, se sentó a negociar con Eduardo Bitran para explotar el Salar de Atacama y se encargó de rehacer la empresa sin Julio Ponce ni Patricio Contesse González.

Tras ordenar la casa y traspasar el cargo a su muy cercano colaborador Ricardo Ramos, un 7 de enero de 2019, De Solminihac salió de las oficinas de SQM en Las Condes y nunca más volvió.

Los directorios, las visitas al Salar de Atacama, innumerables viajes al extranjero, y las intensas reuniones en medio de la tormenta, las cambió de un día para otro por la tranquilidad del sur. Se instaló casi a tiempo completo en el campo que los hermanos De Solminihac tienen en Los Muermos, cerca de Puerto Montt.

Ahí se decidió quedar por un tiempo indeterminado, aunque viajaba constantemente a Santiago. Le compró el campo a sus hermanos, empezó a hacer reformas y se enfocó en el negocio lechero porque tienen una importante población de vacas. Quienes hablaron con él en este tiempo destacan que, en completa oposición a sus días en Soqui, De Solminihac irradiaba paz.

Sin embargo, esta semana su nombre volvió al ruedo. El ingeniero industrial de la UC fue nominado como candidato a director en Empresas CMPC, de la familia Matte. El jueves al mediodía, con él presente, su nombre fue aceptado por la junta de accionistas, lo que significó el retorno del ex SQM a una empresa del IPSA.

En todo caso, recalcan quienes saben de su vida, De Solminihac pasó dos o tres años, entre ellos los de la pandemia, mucho tiempo en el sur, pero en los últimos años ya había empezado, de a poco, a acercarse de nuevo al mundo corporativo. Aunque ha dejado en claro que volver a ser ejecutivo no está en sus planes, CMPC hace tres años lo había contratado como asesor externo del directorio; además había sido nombrado director en Cementos Melón, Vidrios Dellorto, Viñedos Terranoble y la minera peruana Minsur.

Aunque ahora va a estar más presente en la capital, De Solminihac no va a dejar el campo en el sur, aunque sea un par de días al mes.