Son dos los abogados que hicieron el recambio en el equipo legal de Daniel y Ariel Sauer, los hermanos que están en el ojo del huracán de una batalla judicial por Factop y STF Capital. 

El frente penal lo está liderando el abogado Octavio Sufán, quien pasó 18 años en la Defensoría Penal Pública, y que desde este año se privatizó y armó un estudio legal especializado en delitos complejos y manejo de crisis.

Dentro de las causas que ha defendido está una de inversionistas minoritarios contra Oliver Flogel, por supuesta administración desleal en la empresa de telecomunicacines Simple. Además es querellante en una causa por loteos irregulares en una empresa de Vittorio Corbo Urzúa, hijo del expresidente del Banco Central en Colina.

 También ha estado en causas mediáticas, como la querella por injurias que presentó el conductor de tv, Iván Núñez, contra Cecilia Gutiérrez, en la que Sufán asumió la defensa de Gutiérrez. 

Esta semana, fue este abogado quien acompañó a Daniel Sauer a declarar a la Fiscalía como víctima en la querella que presentó contra Leonarda Villalobos por grabar su conversación y difundirla. En la declaración no se trataron los otros temas de la causa, como eventual delitos de sobornos. 

El también nuevo integrante de la defensa legal de Sauer es el abogado tributario Pablo Araya. 
El reconocido jurista partió su carrera a los 20 años cuando ingresó al estudio Asesoría e inversiones Luis Hermosilla, Andrés Chadwick y Álvaro Morales, “que se transformaría en su gran escuela”, según dijo La Segunda en un artículo en 2021. Araya fue administrador electoral de la campaña presidencial de Yasna Provoste. 

El tributarista pasó también por el Servicio de Impuestos Internos entre 2008 y 2012, y entre las causas que vio estuvo Inverlink. En el mundo privado también ha tenido pasos por la defensa de Sebastián Dávalos; en el caso SQM representó a la excontadora de la campaña de Frei, Clara Bensan; también presentó denuncias sobre propiedad intelectual por los grupos musicales Los Ángeles Negros y Los Charros de Lumaco.

La estrategia 
Entre ambos están llevando adelante la estrategia de defensa de los Sauer. Una de ellas tiene que ver con demostrar que Leonarda Villalobos es una pieza importante de todo el problema, y que prestaba servicios tanto para los Sauer como para Rodrigo Topelberg, el otro socio del grupo financiero. Por eso la querella por haber grabado y difundido la reunión. 

Además, están embarcados en demostrar que Topelberg y su familia son tanto o igual de responsables que los Sauer en las deudas de la la empresa y buscan dejar claro que las deudas deben pagarlas en la proporción que les corresponde a la propiedad de la firma. 75% de los Sauer, 25% de Topelberg, y descartar con eso que el accionista minoritario sea víctima en todo el problema.

 De hecho, según una fuente, Sauer ya tiene avanzadas negociaciones con parte de los acreedores para pagar las deudas, pero él ha dicho que va a cubrir sólo su porcentaje de las deudas y no lo que le corresponde a Topelberg.