Esta semana, el secretario de Agricultura de ese país, Tom Vilsack, dijo que el gobierno de Joe Biden está a la espera de un informe de esa entidad para decidir si aprueba o no el proyecto por US$ 1.700 millones, ubicado junto a una reserva de agua dulce y protección ambiental en las cercanías del poblado de Ely, al noreste de ese Estado.

El depósito TMM contiene metales estratégicos como cobre, cobalto y níquel, cuya explotación podría reactivar la economía de la zona, que ha sido afectada con dureza por la pandemia.

Esta es la primera vez que la nueva administración estadounidense se refiere al proyecto de la firma chilena, controlada por la chilena Antofagasta Minerals que entró a la propiedad de TMM en 2010. En 2015, la chilena le compró su parte a Duluth Metals y se quedó con el 100% del proyecto.

La firma sostiene que cuenta con la tecnología y capacidad para no dañar el medioambiente, pese a la oposición de organizaciones ambientalistas.

Vilsack, junto a otros integrantes del gobierno hablaron del tema tras una pregunta del congresista Pete Stauber de Minnesota en una conferencia de prensa sobre el encarecimiento de los alimentos en EEUU.