“Socio, no sea irresponsable”

“Ahora te hací el loco con el 10%”. Con estas palabras, una vecina de Cerro Navia increpó al Presidente de la República, Gabriel Boric, tildándolo de “amarillo” por su negativa al 5to retiro.

Si bien el hecho dejó a varios molestos, lo que en realidad nos dejó a todos boquiabiertos fue la reacción impulsiva con la que el Mandatario respondió a la señora. Tratarla de “socia” y luego decirle “salga de acá”, son tratos que dejan mucho que desear de un Presidente de la República. Sin embargo, lamentablemente, su actitud poco sorprende.

Tal vez más de alguno lo haya olvidado, pero la situación fue bastante similar a aquella vez en que increpó a un periodista luego de un debate presidencial, por haberlo cuestionado sobre la fecha de realización de un test de drogas. Con el dedo levantado y apuntándolo, caminó desafiantemente hacia el reportero, criticándolo: “Muy irresponsable”.

Bastante poco republicano su excelencia.

Plurinacionales encubiertos

Qué duda cabe de que la nueva Constitución es Plurinacional -esto se refiere a la existencia de distintas naciones en un mismo país-.

Ya llevamos 10 artículos en torno a este concepto y unos cuantos más que lo tratan indirectamente, haciendo alusión a términos como Principio de Buen Vivir, Estado plurilingüe, símbolos y emblemas de las diversas naciones, etc. En simple, se busca que Chile sea un Estado Plurinacional, con pluralismo jurídico y pueblos indígenas autónomos.

Como era de esperarse, muchos convencionales salieron a festejar en sus cuentas de Twitter que se escribía en la propuesta: “Chile es un Estado social y democrático de derecho”. Pero, ¿dónde dejaron a los pueblos?

Curioso que los bombos y platillos que dieron a la nueva “plurinacionalidad” dejaron de sonar cuando el rechazo se asomó. Tal vez el sentido común les hizo ver que esta es una amenaza latente para lo esencial del liberalismo: el combate contra los privilegios.

¿Qué le habrá pasado a aquella izquierda decolonial que ha tratado de escribir a fuego conceptos como el ya mencionado? ¿Será que ad portas de ir cerrando su propuesta, y con un gran número de críticas alzándose en contra de la misma, tratan de invisibilizar aquello por lo que tanto han luchado?

Del dicho al hecho hay un gran número de artículos

Nunca antes visto: esta semana se votaron en el Pleno de la Convención Constitucional 6 informes distintos. Con ya más de 239 artículos aprobados, superamos con creces el número de los que tiene la Constitución vigente -la cual se compone de poco más de 140 artículos-.

Esto hace pensar que a este ritmo llegaremos fácilmente a más del doble de los artículos, sin contar las disposiciones transitorias, las cuales estarían siendo creadas por una comisión adicional y exclusiva que tendrá que presentar las propuestas de estas al Pleno.

Lo que se está conformando es un “bonito” reflejo de las constituciones latinoamericanas; esas donde lo que sale funciona perfecto como un libro de cuentos, pero son una hecatombe cuando se ponen en práctica. No podemos obviar el hecho de que cantidad nunca ha estado asociado necesariamente a la calidad.

Con la paz y la guerra

Antes de ser electo, el actual Presidente ya dejaba ver que quien encabezaría el Ministerio de Hacienda sería el expresidente del Banco Central, Mario Marcel. Esto entregó bastante tranquilidad a muchos, pues se daba a entender que el Gobierno reafirmaba en cierta medida un compromiso con la responsabilidad fiscal y la estabilidad del sistema financiero, lo que era coherente con el “Boric de segunda vuelta”.

Sin embargo, algo pasó. A pesar de que Marcel y Briones fueron en su minuto los más fieles adversarios de los retiros de pensiones, recientemente vimos como el primero terminó por ceder a una propuesta con la que inicialmente no conversaba. Tal vez fue que, considerando que ya no juega solo y que necesita coordinarse con la SEGPRES para hacer cumplir el programa -cuidar a los votantes-, comprendió que lo correcto no siempre es amigo de lo popular.

A lo anterior, se sumó la falta de convicción de los miembros de sus filas, especialmente del PC, incluyendo la del propio jefe de la coalición oficialista, Boric. Así, no fueron capaces de sopesar lo que es correcto con lo que es deseable, por el mero fin de escapar de una eventual derrota.

Aunque suene increíble, actualmente hay 4 proyectos de un sexto retiro presentado. Esto conversa perfectamente con lo que hace mucho tiempo advertía el Primer Ministro inglés, Winston Churchill: “El que se arrodilla para conseguir la paz, se queda con la paz y con la guerra”.

A pesar de que el Ministro Jackson saliera a tildar de “apresurada” la medida, me temo que de igual forma esta derrota de Marcel ya es también una derrota al valioso contrapeso al populismo radical que ha asechado por tanto tiempo a nuestro país.