Click acá para ir directamente al contenido

Por dentro

El Alto, el proyecto minero que Barrick quiere desarrollar en reemplazo de Pascua Lama

El Alto, el proyecto minero que Barrick quiere desarrollar en reemplazo de Pascua Lama

Barrick ya lo intentó una vez, con desastrosos resultados: Pascua Lama fue clausurado tras graves daños ambientales y reputacionales. 20 años después quieren intentarlo de nuevo, pero mejor. El proyecto de prospección se llama El Alto, y busca, con nueva tecnología, ver qué tanto potencial hay en la zona para explotar.

Por: Nicolás Durante | Publicado: Sábado 12 de abril de 2025 a las 21:00
  • T+
  • T-
Eduardo Frei y Carlos Menem firmando un histórico acuerdo minero Chile-Argentina en los años ‘90. Aguas ácidas vertidas a un río usado para ganadería y consumo humano. Glaciares en medio de la Cordillera de Los Andes afectados hasta en un 90%, derrames por el lado argentino. Accionistas minoritarios y bancos en Canadá enfurecidos por los daños que se habían hecho en la exploración. Un proyecto minero de oro, plata y cobre clausurado y con una multa de $ 7.000 millones a sus dueños: Barrick Gold. 

Toda esa historia de más de 20 años quiere dejar atrás la minera canadiense, ahora simplemente conocida como Barrick, en el proyecto que se conoció en todo el mundo, pero sobre todo en los altos del Huasco, en Atacama, como Pascua Lama.

El 19 de marzo de este año, Barrick ingresó al Servicio de Evaluación Ambiental el proyecto denominado “Prospección Minera El Alto”, y que busca volver a explorar la zona, con nuevas tecnologías y medidas de cuidado, para ver cuánto mineral hay.

La empresa, lo ha dicho por todos lados, no es la misma que hace 20 años, y hace tiempo que vienen conversando con cuanta junta de vecinos y organización quiera hablar para explicarle lo que quieren hacer, algo que confirman en la zona. “Fuimos arrogantes”, “lo queremos hacer distinto”, ha dicho la empresa. 

“La prospección ‘El Alto’ tiene como objetivo contar con conocimiento geológico y metalúrgico fundamental para reevaluar alternativas para una futura inversión de la compañía que genere beneficios en Alto del Carmen, la región de Atacama y el país”, aclara de entrada, en un cuestionario contestado por correo, Marcelo Álvarez, director ejecutivo de Asuntos Gubernamentales de Barrick Sudamérica.

El abogado argentino cuenta con una vasta trayectoria en gestión de proyectos y trato con autoridades. Antes de llegar a Barrick en 2018, pasó por la gigantesca cervecera SABMiller, Goldcorp, fue presidente de la Cámara Argentina de Empresas Mineras, y entre 2008 y 2012 trabajó en la OEA como jefe de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia y representante del Secretario General.

Marcelo Álvarez, director ejecutivo de Asuntos Gubernamentales de Barrick Sudamérica.
“Esta prospección, además, nos permitiría realizar ensayos metalúrgicos para estudiar formas de procesar el mineral para evaluar esa potencial futura inversión. Hoy hay nueva tecnología y los sondajes anteriores que tiene la compañía son de 20 años atrás, por lo tanto, han perdido sus propiedades para realizar los ensayos con precisión”, recalca.

Pero donde más han hecho hincapié es en el nuevo trato con las comunidades, las mismas que protestaron por décadas para que se fueran en el anterior proyecto.

“A lo largo de los últimos años, hemos enfocado nuestros esfuerzos en generar una relación transparente con la comunidad. De manera colaborativa, hemos sido parte de un proceso de reconstrucción de confianzas que ha dado frutos. Este es el momento. A modo de ejemplo, hace pocos días, conocimos que un grupo de vecinos de la comuna se organizó para recolectar firmas y entregarle a las autoridades una carta en la que se hace un llamado de atención urgente a la búsqueda de soluciones a los problemas que los afectan, con una solicitud clara: que lleguen nuevas alternativas de inversión en la comuna para su bienestar y desarrollo”.

La carta y la división

Efectivamente, en la comuna de Alto del Carmen, ubicada a 45 kilómetros de Vallenar, en la región de Atacama, y donde viven poco más de 5 mil personas, el proyecto ha dado que hablar. 

En una carta firmada por un centenar de vecinos -el documento totaliza 75 páginas sólo de firmas de vecinos que se presentan como crianceros, almaceneros, pirquineros, pequeños mineros, comerciantes, agricultores, profesionales, microempresarios, artesanos y emprendedores-, dicen que “en Alto del Carmen no sobra nadie ni nada. Somos conscientes de nuestras fortalezas y aspiraciones, y sabemos lo que debemos preservar. Nuestra tierra, rica y generosa, debe ser protegida y su riqueza compartida de manera equitativa. Si un proyecto minero o cualquier otra iniciativa económica desea desarrollarse en nuestra comuna, será bajo una condición indispensable: que cuide el medio ambiente, y que exista un compromiso real de contratación de mano de obra local, junto con un plan de capacitación en los diferentes puestos de manera que permita ir mejorando la calidad de vida de cada uno de nuestros habitantes, así veremos que sus beneficios serán tangibles para toda la comunidad, tanto para quienes vivimos aquí hoy, como para nuestras futuras generaciones”.

Y puntualizan en que “algunos grupos minoritarios han pretendido frenar todo tipo de desarrollo, hablando en nombre de toda la comunidad, sin consultarnos, sin dar espacio al diálogo y sin transparencia”.

Marcelo Álvarez, quien se ha convertido en vocero del nuevo proyecto de Barrick, sabe de conflictos. Por ejemplo, el abogado argentino entre 2008 y 2012 trabajó en la OEA como jefe de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia y representante del Secretario General.
Justo sobre ese punto se hace cargo Sebastián Cruz, presidente de la comunidad diaguita Patay Co, una de las organizaciones que se opone al proyecto. “Lo que la empresa está haciendo es dividir a la comunidad interviniéndola, los están apoyando con dinero para emprender y a cambio de eso salen estas firmas que nadie sabe cómo se recolectaron para apoyar un proyecto que va a seguir destruyendo nuestro río y nuestros glaciares”, apunta el dirigente, quien recuerda que esta estrategia es muy similar a lo que ocurre en La Higuera con el proyecto minero y portuario Dominga de Andes Iron. 

“La afectación hídrica y de glaciares es evidente. Lo más grave es que están dando dinero a la gente cuando están en medio de un proceso de cierre forzado de Pascua Lama decretado por la Corte Suprema y empezando otro proceso de evaluación para El Alto”, recalca Cruz. 

Es más, se han contactado con comunidades argentinas porque la afectación al otro lado de la cordillera con el proyecto Veladero, de Barrick y la empresa china Shandong Gold Mining, también estaría impactando los glaciares por el lado chileno. 

“Aquí viven crianceros, comunidades, pueblos indígenas que recolectan flora de la zona y usan los glaciares con fines espirituales. Todo eso quiere destruir, de nuevo, Barrick, con este cambio de nombre de Pascua Lama a El Alto”, recalca Cruz. 
 

No es lo mismo 

Sobre esos apoyos económicos a la comunidad, Marcelo Álvarez responde. “Llevamos muchos años recorriendo el territorio y trabajando mano a mano con las comunidades; y no sólo para ‘El Alto’. Por ejemplo, luego de la pandemia, Barrick desarrolló un programa de apoyo a emprendedores locales llamado ‘Emprende Alto’. Luego de cuatro versiones, ya son cerca de 500 vecinos los que han sido beneficiados con apoyo directo, capacitación y asesoramiento para postular a fondos públicos”, responde.

En particular para la iniciativa de prospección “El Alto”, empezaron el diálogo previo a presentar la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de marzo. 

“Realizamos reuniones con más de 120 líderes de organizaciones sociales de la comuna. Ello se complementó con jornadas informativas en sedes sociales abiertas en distintas localidades de la comuna. Además, creamos y distribuimos información detallada sobre ‘El Alto’ que fueron entregadas a los vecinos (...) Asimismo, hemos informado oportunamente a todas las autoridades locales y nacionales competentes, y valoramos positivamente la recepción que ha tenido la iniciativa. Creemos firmemente que esta propuesta coincide con la mirada que impulsa el país en la búsqueda de nuevas oportunidades, nuevos proyectos y fortalecer la generación de empleo de calidad que puede aportar la industria minera”.

Aunque el recuerdo de Pascua Lama es fresco aún, y los sondajes, de ser aprobados, se harían en concesiones mineras vigentes, el ejecutivo descarta que esto se trate de un Pascua Lama 2.0.

“Es importante dejar muy claro que ‘El Alto’ es una iniciativa de prospección, lo que corresponde a una etapa inicial-preliminar de un desarrollo minero, que no generará ningún impacto al medio ambiente ni a glaciares y que no tiene ninguna vinculación con el proyecto Pascua que se encuentra en cierre. Entendemos que haya miradas distintas. Llevamos varios años conversando y escuchando a las comunidades, quienes nos han reiterado su deseo de que lleguen a la zona nuevas oportunidades de trabajo, desarrollo y bienestar. Reitero, el cierre del proyecto Pascua es un proceso independiente a ‘El Alto’. La evaluación de la DIA para ‘El Alto’ no tiene ninguna relación con dicho cierre”. 

Recalca también que “somos hoy una empresa diferente, como he dicho, hemos aprendido del pasado y tenemos nuevas y mejores formas de hacer las cosas. Tenemos un equipo en terreno que ha llevado a cabo un trabajo de muchos años con las comunidades y sin duda alguna, lo seguiremos haciendo”. 

Y si este será un proyecto binacional nuevamente, Álvarez recuerda que “El Alto” les permitirá evaluar la viabilidad de una potencial futura inversión, pero hasta que no desarrollen la exploración y realicen los ensayos, no tienen información necesaria para hablar de un proyecto minero.

“Barrick ha manifestado esta prospección con miras a reevaluar alternativas para una potencial futura inversión de la compañía, que podría contemplar ser binacional. Nosotros seguimos explorando también oportunidades en Argentina, por ejemplo, alrededor de la mina Veladero; pero frente a ‘El Alto’, como lo expresé, estamos en una etapa preliminar”. 

Lo que viene ahora será enfrentar el proceso de Declaración Ambiental que no se vislumbra sencillo, pero la canadiense apuesta a darlo vuelta. Llevan años esperando este momento. 

El proyecto de Barrick y Antofagasta Minerals
que el SEA frenó
Barrick no sólo está trabajando en “El Alto”. En la misma comuna se asoció con Antofagasta Minerals, de la familia Luksic -Andrónico tiene una casa en Pisco Elqui, una comunidad cercana a Alto del Carmen- para desarrollar una prospección minera llamada “El Encierro”.

Con una inversión de US$ 95 millones, buscan habilitar 60 plataformas de sondaje, para lo cual se estima la ejecución de un máximo de 80 sondajes de tipo diamantina y con un plazo de duración de cinco años.

El proyecto, bajo el mandato de la Sociedad Contractual Minera El Encierro, gestionada por Antofagasta Minerals, ingresó la Declaración de Impacto Ambiental en enero de este año. Sin embargo, el 16 de febrero, el Servicio de Evaluación Ambiental dio por terminado anticipadamente el proceso de evaluación.

“En virtud de los antecedentes y argumentos expuestos, corresponde poner término anticipado al procedimiento de evaluación de impacto ambiental del Proyecto por cuanto falta información esencial, situación que hace imposible proseguir con la evaluación ambiental, siendo tal situación no susceptible de ser subsanada a través de Adenda que dé respuesta a una solicitud de aclaraciones, rectificaciones o ampliaciones, toda vez que al no ser presentada en la DIA, no es posible de aclarar, rectificar ni ampliar”, dice la resolución. Hasta ahora la empresa no ha vuelto a ingresar el proyecto.

Blumar, bitácora de una inesperada crisis puertas adentro

En momentos en que a nivel de negocios los aranceles de Trump y el proyecto de fraccionamiento copaban la agenda del sector acuícola y pesquero, una tragedia tocó la puerta en Blumar. Una embarcación de la firma se vio envuelta en las pesquisas del naufragio de la nave Bruma, en Biobío, y un trabajador de la propia firma fue hallado muerto esta semana, enlutando a la firma de las familias Sarquis y Vinagre, entre otros socios. La compañía activó una serie de acciones para controlar la crisis, como tomar la asesoría del penalista Alejandro Espinoza.

Despidos, reordenamiento y el retorno de Fernando Fischmann: el cambio de corrientes en Crystal Lagoons

La compañía chilena conocida por su tecnología de lagunas artificiales, acaba de ejecutar una reestructuración interna que implicó la salida de cerca del 10% de su equipo global. El ajuste coincide con un giro estratégico: por primera vez, la firma ingresará al negocio inmobiliario a través de joint ventures con desarrolladores, lo que viene a modificar su tradicional modelo basado en licencias.

La vuelta al mercado de Grupo Patio

Patio emitió bonos en Chile y por primera vez en Perú. Y obtuvo la semana pasada un crédito sindicado. Jaime Munita, su nuevo CEO, tuvo una veintena de reuniones para convencer a sus pares de que los nuevos dueños y ejecutivos eran una muestra de confianza.

SIGUIENTE »
« ANTERIOR