Punto de partida
El emprendimiento de dos abogadas que tramitan visas e inversiones en Europa
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Las dos abogadas chilenas se conocieron estudiando un máster en derecho digital y nuevas tecnologías en la Universidad de Salamanca, en España, entre 2020 y 2021. Producto de la pandemia éste adquirió un carácter híbrido con clases online, y cuando las condiciones sanitarias lo permitieron, sesiones presenciales. Feliza vive actualmente en Valencia, pero Trinidad viajó desde Chile con su familia a completar la última parte del curso.
Hicieron buenas migas y se propusieron crear un emprendimiento que tuviera que ver con derecho. “Queríamos armar algo que buscara responder a una necesidad dada por el mercado, pero nos encanta pensar que somos una startup o que para allá vamos. Estamos incluyendo de a poco las herramientas para en un futuro entregar un servicio más tecnologizado a los clientes”, cuentan las socias por Zoom, una en Chile y la otra en España.
Explican que Visa and Go nació después de investigar lo que ofrecía la web, sitios oficiales y consulados, para migrar y para invertir afuera. “La información está, pero muy disgregada y poco clara. Es difícil acceder a ella para alguien que quiere planificar un cambio de vida que a veces involucra también a su familia. Nosotros entregamos una asesoría completa a los clientes”, afirman.
Comentan que es más fácil acceder a información para estudiantes, por eso decidieron enfocarse en dar un servicio integral para personas naturales y/o empresas que buscan constituir sociedades, invertir o simplemente vivir un tiempo fuera de Chile.
“Hay estudios jurídicos que se enfocan en resolver lo tributario, pero cuando se trata de vivir afuera queda coja la parte familiar; buscar propiedades, elegir un barrio, optar por un colegio. En general los chilenos no somos buenos para migrar, pero distintas circunstancias han hecho que ahora estemos mirando para afuera”, comenta Trinidad.
El alza de esta demanda -en los últimos seis meses han tramitado 243 visados- tiene que ver con diferentes factores. Por un lado está la posibilidad del trabajo remoto que abrió la pandemia y también el escenario político -desde el proceso constituyente hasta la nueva reforma tributaria- que para algunos representa incertidumbre. El tema de la seguridad pública es una inquietud recurrente entre sus clientes, señalan las socias.
Arrancaron a fines de 2021, primero con un modelo básico. “Al poco andar nos dimos cuenta que iba a ser más grande y decidimos crecer asociándonos con expertos en temas específicos, hacer joint venture”, dicen. Aunque tienen clientes que quieren vivir en distintos lugares de Europa, ellas prefieren enfocarse en España y Portugal, “países que entregan enormes beneficios a los chilenos y sus empresas”.
Sus partners son estudios jurídicos locales, oficinas de corretaje, además de seguros asociados. También abogados de familia para casos que requieren de trámites especiales.
“La ansiedad es muy común cuando uno se embarca en el proyecto de establecerse en otro lugar, desde lo más relevante o lo más doméstico. Uno no sabe cómo funcionan los barrios ni la administración pública. Entonces ayudamos a nuestros clientes administrativa y legalmente, pero también les brindamos apoyo integral y hacemos que el proceso sea más amigable para así reducir el estrés y la frustración que produce lo nuevo. Tenemos una relación muy personalizada y estrecha con los clientes”, sostiene Feliza. “Es una tremenda responsabilidad por eso parte de nuestras funciones es aterrizar las expectativas”, agrega Trinidad. www.visandgo.com