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Esta plataforma usa inteligencia artificial para “elegir” influencers
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Una quiebra empresarial y una deuda de $ 100 millones. Dos elementos que, juntos, no auguran un buen negocio. En 2017 Pablo Gross (ingeniero civil metalúrgico, surfista, 30 años) fundó Anatida Coffee, estaciones de café sustentables en el norte de Chile. “Llegamos a tener nueve sucursales, pero el estallido social y la pandemia nos terminaron de golpear”, recuerda el emprendedor.
En ese contexto nuevamente emprendió: fundó Anatida Media, una agencia digital enfocada en redes sociales. Hoy, ya son 30 personas, trabajan con 80 clientes y tienen negocios en Chile, Bolivia, Guatemala, México y Estados Unidos. Este año proyectan ventas por sobre el US$ 1 millón.
Justamente por la agencia se dieron cuenta de un fenómeno que se repetía: sus clientes querían colaborar con creadores de contenido, pero éstos salían muy caros y muchas veces los resultados no eran positivos. “Una empresa que había traído 350 sillas gamer contrató a un macro influencer y no vendió ninguna”, recuerda Gross.
Por lo tanto, fundó una startup para analizar los números detrás de los creadores de contenido. Para el nombre no se dio muchas vueltas: Influenzer.
En particular, desarrolló un algoritmo que hace una radiografía a cualquier cuenta de Instagram, TikTok o YouTube a través de plataformas como Google Analytics, Semrush, ChatGPT y Google AI. La idea, comenta Gross, es conocer todos los indicadores del creador de contenido. “Nos hemos dado cuenta de que existen influencers con 1 millón de seguidores pero que el 40% de ellos son falsos”, confiesa.
Luego de esta radiografía la firma entrega una propuesta con tres creadores de contenido con distintos perfiles. “Esto le da flexibilidad a las compañías, porque antes tenían que cerrar contrato con solamente un influencer. Este modelo te permite ir variando semana a semana”, complementa.
Actualmente tienen dos líneas de negocio: suscripción donde los clientes pueden tener distintas colaboraciones en un mes (desde $ 530 mil mensuales) y otra producción profesional, con contenido de estudio. Este año proyectan facturar más de US$ 250 mil y, en el futuro, la idea es desarrollar un marketplace de creadores de contenido para hacer más eficiente el vínculo entre empresas e influencers.