Desde esta semana, cuando se busca la dirección http://X.com el usuario es conducido a Twitter. La defunción del famoso pajarito insignia de Twitter es sólo una anécdota dentro de los planes de Elon Musk. En medio de especulaciones sobre qué viene para la red social, el historiador Walter Issacson recordó esta semana que X.com o simplemente “X” es un viejo sueño del empresario.

Isaacson, autor de la biografía más aplaudida sobre Steve Jobs, pasó dos años siguiendo a Musk, entrevistándolo, hablando con su familia, colegas, y hasta sus adversarios. “Elon Musk”, la biografía que publicará en septiembre busca responder la pregunta: ¿Son los demonios que impulsan a Musk también lo que se necesita para impulsar la innovación y el progreso?

Esos demonios incluyen bullying constante durante su infancia en Sudáfrica y una mente en “modo de crisis” desde entonces.

Cuando Musk anunció el cambio de Twitter a “X”, Isaacson recordó a los usuarios de la red social del origen de la fascinación del empresario por esta letra, que data de principios de 1999, con un fragmento de su libro:

“En marzo de 1999 fundó http://X.com. Su idea de http://X.com era grandiosa. Sería una ventanilla única para todas las necesidades financieras: banca, compras digitales, cheques, tarjetas de crédito, inversiones y préstamos. Las transacciones se realizarían al instante, sin tener que esperar a que los pagos se liquidaran. Su idea era que el dinero no es más que una entrada en una base de datos, y quería idear una forma de que todas las transacciones se registraran de forma segura en tiempo real. 'Si solucionas todas las razones por las que un consumidor sacaría dinero del sistema, entonces será el lugar donde esté todo el dinero, y eso la convertiría en una empresa multimillonaria', dice”.

Con el apoyo de Michael Moritz, jefe de Sequoia Capital, Musk selló un acuerdo con Barclay’s y una sociedad con un pequeño banco en Colorado. La maniobra permitió a X.com la facilidad de emitir tarjetas y ofrecer fondos de inversión.

Lo que siguió un fue un trabajo frenético para lanzar la empresa en el Día de Acción de Gracias de ese año. Jornadas de trabajo eternas, en las que -según Isaacson- Musk durmió bajo su escritorio la mayoría de las noches, dieron sus frutos y en el plazo impuesto por Musk las primeras tarjetas de débito comenzaron a funcionar.

Pero el interés de Musk no era operar como un banco tradicional. Aparece entonces la posibilidad de enviar dinero por correo electrónico, especialmente con el crecimiento de plataformas de comercio electrónico como eBay.

X.com se fusionó con PayPal, de Peter Thiel y Max Levchin. Isaacson recuerda: “Musk insistió en que el nombre de la empresa debía ser http://X.com, con PayPal como una mera marca subsidiaria. Incluso intentó cambiar el nombre del sistema de pago a X-PayPal. Hubo mucha oposición, sobre todo por parte de Levchin". PayPal se había convertido en una marca de confianza. Los focus groups mostraron que el nombre http://X.com, por el contrario, evocaba imágenes de un sitio. Pero Musk se mantuvo firme y sigue siéndolo. "Si sólo quieres ser un sistema de pago de nicho, PayPal es mejor", dijo. "Pero si quieres apoderarte del sistema financiero mundial, entonces X es el mejor nombre".

El relato de Isaacson continúa con el detalle de las crecientes diferencias sobre el manejo de PayPal, especialmente entre Levchin y Musk. Por ejemplo, sobre el sistema operativo principal. Musk quería usar Windows NT y Levchin prefería Solaris y Linux.

"Simplemente no va a funcionar en Microsoft", afirmaba Levchin. “En 1999, Linux aún estaba en sus inicios, mientras que Windows contaba con toda una comunidad de desarrolladores de videojuegos a la que recurrir. En años posteriores, con SpaceX y Tesla, obviamente me decanté por Linux. Además, Max (Levchin) se equivocó rotundamente al decir que el sitio no funcionaría con Windows. Literalmente funcionó”, escribió Musk en respuesta al fragmento publicado por Isaacson en TwitterX sobre la anécdota.

La  respuesta de Musk, que consignó como una “nota técnica”, da más respaldo a lo que Isaacson presenta como una mirada en la mente del empresario.

“Musk me dijo, incluso antes de tomar el control de Twitter, que planeaba cambiarle el nombre a http://X.com e intentar convertirla en una plataforma que cumpliera su visión original de 1999”, dice Isaacson. A finales de octubre 2022, Musk le escribió a las 3.30 am diciendo: “Estoy muy entusiasmado con la idea de implantar por fin http://X.com tal y como debería haberse hecho, utilizando Twitter como acelerador… Y, con suerte, ayudando a la democracia y al discurso civil mientras lo hago”.

“Musk me dijo, incluso antes de tomar el control de Twitter, que planeaba cambiarle el nombre a http://X.com e intentar convertirla en una plataforma que cumpliera su visión original de 1999”, dice Isaacson.

No es secreto que Musk aspira a construir una “mega aplicación”. Esta idea ya surgió tras el apoyo de Musk a Dogecoin y las criptomonedas. “Twitter fue adquirida por X Corp tanto para garantizar la libertad de expresión como para acelerar X, la aplicación para todo. No se trata simplemente de una empresa que cambia de nombre… En los próximos meses, añadiremos (a X) comunicaciones integrales y la posibilidad de dirigir todo tu mundo financiero”, escribió.

Red social y plataforma de pagos y quizás compras. Hasta ahí, lo que describe Musk se parece a lo que hacen ya gigantes chinos como Alipay o Wechat. Pero según Linda Yacarino, CEO de Twitter/X, la visión de “X Corp” va más allá: “X es el estado futuro de interactividad ilimitada -centrada en audio, vídeo, mensajería, pagos/banca- que creará un mercado global de ideas, bienes, servicios y oportunidades. Impulsado por la Inteligencia Artificial, X nos conectará a todos de formas que apenas empezamos a imaginar”.

Puede que Musk haya sido despedido como CEO de PayPal, pero queda claro que nunca abandonó sus planes. Veinticuatro años después “X” está dando sus primeros pasos.