Esta semana se confirmó que Alexis Sánchez compró la Viña Alberice, emplazada en una finca de 25 hectáreas en las colinas orientales de Friuli, Italia. Se trata de una viña que no está activa, es decir, que no embotella vinos con etiquetas o marcas propias. Sin embargo, el plan del “Niño Maravilla” es renovarla y producir vinos boutique.

El delantero del Inter de Milán fue en seis ocasiones a Alberice antes de concretar la compra. Estuvo acompañado de amigos y de su abogado Rubén Inostroza, quien se puso en contacto con distintas oficinas legales europeas para que revisaran los documentos de la operación.

También contaron con el asesoramiento de ingenieros agrónomos y enólogos que analizaron el terroir de Alberice. La transacción se concretó en septiembre y el vendedor fue Antonio Favero, un conocido médico veneciano.

De su entorno cuentan que Alexis Sánchez es un apasionado por el mundo del vino desde su paso por Inglaterra. A diferencia de lo que se ha informado, el delantero nacional no consumía alcohol antes de su paso por el Arsenal. “Pero conoció esta industria y se enamoró de todo ese mundo, de la producción y trabajo que hay detrás de las parras”, dice una fuente cercana.

De hecho, quienes lo conocen revelan que uno de sus primeros requerimientos que solicitó para su casa en Lo Curro -que está en construcción- fue una gran cava de vinos. Además, cada vez que viene a Chile visita viñas. ¿Su favorita? Montes, en el Valle de Colchagua, cuentan.

Pero lo de Italia fue solo el comienzo. Alexis Sánchez está listo para pasar a la ofensiva en la industria vitivinícola.

El delantero, durante la pandemia, comenzó a buscar lugares y recorrer viñas en Chile y Argentina. Fue así como llegó a tres terrenos: uno en la Región Metropolitana, un segundo en el Maule y otro en Mendoza. Y los compró todos. “Tienen varias hectáreas y los encontró a un muy buen precio. Con la crisis sanitaria bajaron mucho”, cuenta un conocedor de este negocio.

En el caso del paño mendocino, el deal se cerró esta semana. Y, tal como en Italia, el ariete de La Roja consultó a diversas oficinas especializadas y contó con el asesoramiento de Rubén Inostroza, a quien conoce hace 20 años.

La idea de Alexis es invertir en distintos terrenos con diversidad de cepas. Una vez que se retire del fútbol profesional, cuentan fuentes cercanas, se dedicará a tiempo completo a este negocio. “Para eso falta, pero es inquieto y empezó a ocuparse desde antes”, relata un amigo.

Eso sí, el plan del ex jugador del Manchester United es producir vinos premium y que su familia esté involucrada en el negocio. Hasta ahora, no ha sumado ningún socio. “Será algo pequeño”, se escucha en sus círculos.

A pesar de eso, grandes viñas y distribuidores chilenos ya empezaron a sondear el negocio vitivinícola de Sánchez. Buscan exportar sus botellas a Estados Unidos y otros mercados.

Pero el “Niño Maravilla” no es el único futbolista interesado en la industria del vino. Su amigo y ex compañero del Barcelona, Andrés Iniesta, creó Bodegas Iniesta, una viña española de exportación con una fuerte actividad en Asia. De hecho, el ariete nacional visitó el terreno del ex jugador español e incluso recibió un catálogo de sus botellas.

Aparte de las viñas, Alexis Sánchez tiene otras inversiones inmobiliarias. En 2020 compró un departamento en Miami por US$ 2,5 millones.

En Chile, los activos de Alexis Sánchez son administrados por Marjiorie Elisa Delaigue Sánchez, su hermana. En 2017 ambos constituyeron la sociedad Inversiones AS Limitada, la cual tiene dos propósitos: celebrar contratos referentes a derechos deportivos y publicitarios, y concretar inversiones en “todo tipo de bienes raíces, muebles, o derechos corporales e incorporales”. También tiene un mandato general con su hermano Humberto.