Alto, la empresa de Jorge Nazer, trabaja con la aerolínea Avianca como apoyo en el manejo y control de pasajeros disruptivos. Se trata de aquellos que no respetan las normas de conducta en los aeropuertos o aeronaves o que no siguen las instrucciones del personal o de miembros de la tripulación, pudiendo afectar la seguridad del vuelo, incomodar a los pasajeros y entorno, y provocar alteraciones en los itinerarios.

Los casos más comunes suelen ser no acatar las instrucciones normales de la tripulación, tales como ajustarse los cinturones, no fumar, o no usar equipos electrónicos en despegue y aterrizaje. También son aquellos viajeros que no cumplen con las medidas sanitarias, como la utilización de mascarillas.

Pero hay también una larga lista de conductas “disruptivas” en que Alto ayuda a Avianca, por ejemplo, cuando los pasajeros tienen comportamientos inadecuados derivados del consumo de alcohol, drogas, medicamentos o combinación de alguno de ellos, generando abusos o amenazas a pasajeros y tripulantes. O cuando realizan acciones que podrían afectar la seguridad de vuelo, como intentar abrir puertas o ventanillas de emergencias, o tratar de dañar la aeronave o los equipos de emergencias o incluso atentan contra su propia integridad física.

El apoyo de Alto a Avianca se extiende a otros aspectos, por ejemplo, ayuda en casos como la presentación de documentación falsa.

El foco de Alto es prevenir pérdidas y proteger los activos y recursos de sus clientes, en todos sus procesos. Y en el caso de Avianca, la compañía presta servicios para aumentar la seguridad en sus operaciones, señalaron desde la compañía.