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Del Gabinete a Peñalolén: el camino de la primera ministra de Cultura de Gabriel Boric
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La antropóloga Julieta Brodsky asumió como ministra de Cultura en marzo de 2022, designada por el entonces entrante Presidente Gabriel Boric. Duró un año: dejó el cargo en marzo de 2023, luego de recibir varias críticas desde el propio mundo cultural. Luego, prácticamente no se supo de ella.
Pero no se detuvo. Fuera del ministerio, Brodsky se dedicó a dar charlas y clases en diplomados de instituciones como la Universidad de Valparaíso. Además reactivó su rol en la Corporación Cultural Tramados, de la cual había participado en su fundación (2017), y en agosto de 2023 se unió como investigadora al Instituto Internacional de Filosofía y Estudios Sociales. En todo eso estuvo hasta febrero pasado, cuando Peñalolén se cruzó en el camino.
En enero había empezado a asesorar en temas culturales a la municipalidad de esa comuna, y un mes después fue nombrada directora ejecutiva de la Corporación Cultural de Peñalolén, cargo de confianza de la alcaldesa Carolina Leitao. “Tuvimos cercanía con ella cuando yo era ministra, con actividades en conjunto. Y tratamos de echar a andar programas de recuperación de espacios públicos en la comuna a través de la cultura”, cuenta Brodsky, quien este viernes convocó a la inauguración de la sala de artes Gabriela Pizarro en el Centro Cultural Chinkowe, que depende la Corporación.
Cada sábado, hasta noviembre, habrá en esa sala programación cultural gratuita, que incluye desde cine hasta música. Parte el sábado 15 de junio con la obra de teatro Historia de amor para un alma vieja, con los actores Eduardo Barril y Luz Jiménez.
“Es mi primera vez como gestora cultural. He estado antes más en investigación y en la proposición de políticas culturales. Ahora pongo eso en práctica. Desarrollar actividades, eventos, talleres, con más cercanía a las comunidades. Es distinto a ser ministra, donde no llegas a ese nivel operativo”, comenta Brodsky.
¿Hay nostagia de su año como ministra? “El ministerio es etapa superada -comenta-. Siempre es un desafío grande, pero no sé si es un espacio que uno añora. Estoy muy cómoda ahora donde estoy”.