“En el contexto de la información publicada en los medios de prensa, sobre el requerimiento de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) a CCU”, dice la breve comunicación que envió este jueves Patricio Jottar, gerente general, a los trabajadores de la firma de bebidas, luego de que el organismo antimonopolio los acusara el martes de prácticas anticompetitivas y pidiera una multa de 6.700 Unidades Tributarias Anuales (UTA), lo que equivale a unos US$ 5,8 millones.

“Como compañía queremos insistir que en nuestra gestión siempre hemos promovido y respetado la libre competencia en todas las categorías y mercados en los que participamos, y reiteramos nuestro compromiso de seguir actuando con esa misma convicción, de acuerdo a nuestros Principios de SER CCU”, cierra la misiva.

El martes, el organismo dirigido por Jorge Grunberg, acusó que CCU “en sus relaciones con los establecimientos comerciales que venden cerveza para ser consumida en los mismos, ejecutó hechos, actos o convenciones que, de facto, generaron exclusividades de venta, restringieron o entorpecieron la venta y/o exhibición de cerveza, o produjeron iguales o similares efectos”.

La FNE apuntó a que “existe evidencia clara y concluyente que revela que CCU incumplió los términos del Avenimiento” con la multinacional belga AB InBev en 2008, restringiendo la venta de otras marcas e incluso prohibiendo la inclusión de competidores en las cartas menú de algunos locales. Además, la acusó de realizar la conducta con “sigilo y precaución” aparentando un cumplimiento que no era real.