La semana pasada murió el actor canadiense que encarnó grandes roles secundarios e interpretó a villanos que marcaron decenas de películas con su presencia y potente voz.

Este martes el Museo de la Memoria sorprendió con una publicación en Instagram donde contaban que en los años ‘90 el propio Sutherland fue narrador del documental Threads of hope (Hilos de esperanza), que narra la historia de tres mujeres de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y su lucha incansable por saber la verdad de la desaparición de sus familiares, a través del desarrollo del arte de las arpilleras.

En el posteo también se veía una imagen del actor junto a su hijo Rossif y al director de fotografía de dicho documental, el chileno radicado en Canadá hace 50 años, Hernán Morris. Contactado por DFMAS el realizador cuenta que en 2010 coincidió con Sutherland y su hijo mientras registraba el behind the scenes de la película The Con Artist.

“Es una película que no tuvo mayor trascendencia en su carrera. Cuando llegué al set me advirtieron que por ningún motivo levantara la imagen de Donald Sutherland. Pero cuando fui a buscar un café me encontré sorpresivamente con él haciendo fila para servirse su propio café, sin asistente. Me preguntó con su voz de Donald Sutherland quién era yo y que hacía ahí. Le expliqué que estaba grabando el behind the scenes y le conté que él había narrado un documental en que yo había hecho fotografía y cámara. Curioso y sonriendo me preguntó cuál. Al responderle Threads of Hope se le iluminó la cara. Recordaba con mucha claridad, y yo diría cariño, las historias del documental. Hablaba con pasión, como si el documental lo hubiera narrado el día anterior. Contaba a los demás lo valiente que eran esas mujeres que desafiaron a la dictadura. Después de cada ensayo o toma durante la filmación se acercaba a conversar y preguntarme sobre Chile”, cuenta Morris haciendo hincapié el compromiso y vínculo emocional del actor con la historia de nuestro país.