El proyecto de ley para enfrentar la crisis de las isapres estaría casi listo. 

Solo falta afinar detalles y socializarlo con parlamentarios. Sin embargo, la idea original del gobierno de fortalecer Fonasa y sumar ciertas características de seguros privados, no sería suficiente para enfrentar la magnitud del problema.

Según cuentan fuentes al tanto, el primer proyecto para fortalecer Fonasa y hacerlo viable para todos aquellos que salgan del sistema isapre consiste en crear un nuevo tramo en el seguro público -que hoy va entre la letra A y la D- y dotarlo además de un seguro complementario para atenciones en recintos privados. 

¿Cómo funcionaría ese seguro complementario? Primero, Fonasa licitaría a empresas privadas dicho seguro, obteniendo con ello un mejor precio y una cobertura para todo el grupo. Lo que se ha trabajado entre el Ministerio de Salud y Fonasa es que dicho seguro complementario se separe a su vez en cinco tramos.

La banda inferior, y por ello con un costo menor, sería para centros de salud más económicos y masivos o ubicados en comunas de grandes bolsones de clase baja y media. 

Así, los tramos irían subiendo hasta llegar al más caro y que daría acceso a los centros de salud más exclusivos. 

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Pero como eso no sería para ayudar a las isapres, sino que por el contrario -las debilitaría- el Gobierno presentaría un segundo proyecto de ley, o una Ley Corta, para ajustar vía legal los precios máximos de los planes de salud de acuerdo a las nuevas tablas de factores  que deben usar, según el fallo de la Corte Suprema del año pasado.

Además, esa alza en los precios amparada por la ley permitiría compensar las devoluciones de cobros en exceso que deben hacer las isapres, y que ordenó el Máximo Tribunal.

Según cuentan en la industria, la contratación de pólizas de seguros de salud ha ido al alza en el último tiempo. Según cifras de la Comisión para el Mercado Financiero, si en diciembre de 2020 había 1.118.404 de pólizas vigentes de seguros de salud individuales y colectivos, a septiembre del año pasado dicha cifra llegó a 3.609.889.

Además, varias aseguradoras están reforzando sus equipos de venta justamente con los ex ejecutivos de las isapres desvinculados por la crisis. 

Esto, además, se relaciona con la caída de los clientes de Isapre. Según cifras de la Superintendencia de Salud a diciembre de 2022, el número total de beneficiarios (titulares más cargas) llegó a 3.076.622, 173.375 menos que los que había en diciembre de 2021, lo que se explicaría en la situación financiera de las familias, pero también en la crisis que atraviesan las aseguradoras privadas, y que muchas personas están optando por emigrar a Fonasa y contratar un seguro adicional para gastos mayores o atenciones en ciertas clínicas privadas.