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David Cay Johnston, el biógrafo de Donald Trump

David Cay Johnston, el biógrafo de Donald Trump

El periodista que prepara su tercer libro sobre la administración Trump, desmenuza los próximos desafíos del expresidente de los Estados Unidos.

Por: Mateo Navas García | Publicado: Sábado 31 de julio de 2021 a las 21:00
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Hoy por hoy el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no pasa por su mejor momento. Sus días se dividen entre reuniones con sus escuderos más cercanos, su penthouse en la Trump Tower, su mansión de Nueva Jersey y diversos campos de golf. Pero detrás de eso, también enfrenta una batahola legal que, según entendidos, lo preocupa cada vez más.

El viernes 2 de julio, a menos de 24 horas de la histórica acusación de la Organización Trump, el periodista David Cay Johnston saltó de canal en canal para analizar los flancos abiertos que enfrenta el exmandatario. Y en medio de sus entrevistas con CNN y MSNBC, contestó el llamado de DF MAS para entregar las claves para entender lo último en la vida del empresario.

Y es que no hay periodista que conozca más de Donald Trump que David Cay Johnston. Su relación se remonta a 1988, cuando lo siguió hasta Atlantic City para investigar sus primeros negocios en la industria de los casinos. “Con eso escribí mi primer libro”, recuerda.

Y desde ahí, Johnston -ganador de un Premio Pulitzer por su cobertura global sobre impuestos en el The New York Times- no ha dejado de seguir los pasos del empresario. Tanto es así que ha sido el único que ha logrado filtrar parte de su declaración impositiva. Eso fue en 2017 y afirma que esos documentos los recibió un día en su jardín de una fuente aún desconocida. Todo esto generó una ola de suposiciones y polémicas en torno al expresidente.

Y ahora, cuando la justicia norteamericana lo tiene bajo su lupa, Johnston está más atento que nunca. De hecho, está por publicar el último libro (The Big Cheat) de su trilogía sobre la gestión presidencial del empresario. “Este tomo trata sobre cómo Trump y su familia lograron enriquecerse con su presidencia. Ivanka y Jared (Kushner) ganaron mucho dinero durante los cuatro años de Trump en la Casa Blanca. Fueron por lo menos US$ 172 millones, por lo tanto, más de 40 millones al año”, advierte.  

¿Pero qué viene ahora en la vida del empresario? Acá Johnston desmenuza la situación del exmandatario.

“Apuesto por arresto domiciliario en la Trump Tower”

La preocupación de Donald Trump, según Johnston, tiene nombre y apellido: Allen Weisselberg, uno de los hombres más cercanos al empresario y el director de finanzas de la Organización Trump por más de 40 años. “Él es el quien sabe dónde está cada dólar, quién obtuvo qué”, dice. Y agrega: “Es de los pocos que entiende la mente criminal del expresidente”.

A inicios de julio Weisselberg llegó hasta los tribunales de Manhattan para declararse inocente de 15 delitos fiscales en su contra. El ejecutivo es acusado de recibir beneficios y ventajas complementarias (como bienes raíces y automóviles), los cuales no fueron informados en su declaración de impuestos. ¿Y por qué todavía no colabora con la justicia? Porque, por ahora, Weisselberg no arriesga tiempo efectivo de cárcel. Y mientras eso ocurra, dice Cay Johnston, no trabajará con las autoridades.

“Si lo declaran culpable, bien podría obtener libertad condicional. Es posible que esto no lo haga cambiar, pero puede aumentar la presión”, cuenta. Y agrega: “Si lees la acusación no hay posibilidad de que Donald Trump no supiera que esto estaba sucediendo”.

-¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta Donald Trump?

-Estará involucrado en litigios penales y civiles por el resto de su vida. Uno de los desafíos que va a tener es pagar a sus abogados. En enero declaró públicamente que no iba a pagarle a Rudy Giuliani, que ganaba US$ 20.000 al día, porque no logró anular el resultado de las elecciones. Además, la Organización Trump está acusada, y eso va a consumir una enorme cantidad de dinero.

-¿Y la posibilidad de ser condenado realmente existe?

-Tiene demandas civiles en su contra por todas partes. Es probable que enfrente cargos criminales adicionales en Washington DC, Georgia y Nueva York. Probablemente termine con una condena penal y la pregunta entonces será: “¿Recibirá arresto domiciliario o cárcel efectiva?”. Yo apuesto por arresto domiciliario en la Trump Tower, pero no en su mansión de Mar-A-Lago, en Florida.

Además, su círculo cercano está cada vez más complicado judicialmente. “Su director de campaña Paul Manafort, el subdirector de campaña Rick Gates y el mismo Allan Weisselberg han sido acusados. El general Michael Flynn y el estratega político Steve Bannon fueron condenados”, dice. Y la lista suma y sigue.

“No volverá a ser Presidente”

En 2015, cuando la mayoría de los periodistas norteamericanos empezaron a cubrir la campaña presidencial de Donald Trump, David Cay Johnston fue de los pocos que dijo que el republicano iba en serio. “En 2011 había presentado su candidatura, pero la retiró rápidamente. Eso hizo que cuatro años después nadie le creyera”, cuenta.

Pero ahora, eso sí, el periodista se atreve a hacer otra predicción: “Donald Trump nunca volverá a ser presidente de Estados Unidos. No es posible. Incluso si nunca le presentan cargos, nunca se convertirá de nuevo en mandatario. Sé que es una gran declaración, pero es una declaración de riesgo cero”.

-¿Y por qué estás tan seguro?

-Donald Trump nunca tuvo un índice de aprobación del 50%, fluctuó entre los 30% y 40% durante toda su presidencia. Joe Biden no ha caído por debajo del 50% todavía. Además, Trump no tiene el suficiente apoyo para ser elegido. Los republicanos no pueden ganar con el 40% de las preferencias. Biden obtuvo 7 millones de votos más que él y Clinton 3 millones más. Su partido no está actuando como si pensaran que él va a ser el próximo candidato.

-¿Pero por lo menos lo está pensando? Hace unas semanas apareció en mítines políticos en Ohio…

-Donald necesita la adulación pública. Está desesperado por ello y necesita dinero. Sus negocios están pasando por un mal momento.

-¿Y qué pasa con el apoyo del Partido Republicano?

-Ahora mismo no existe el Partido Republicano, solo el partido de Donald Trump. Si hablas mal de él, él puede conseguir suficientes seguidores para que voten en contra de ti en las primarias. Ese es su poder.

-Y de hecho lo apoyaron en el proceso de destitución…

-Los republicanos tuvieron la oportunidad de deshacerse de Donald Trump el 6 de enero. Recordemos que él enfureció a la multitud y les dijo que fueran al Capitolio, donde trató de organizar un motín. El sistema estadounidense de juicio político no funciona para los presidentes. Hay que reformarlo.

Midterms, Twitter y la memoria

Como es tradición, la gestión presidencial de Joe Biden -pero también la popularidad de Donald Trump- se medirán en las mid-term elections (elecciones de medio mandato) del próximo año. Y si bien estos comicios tienden a favorecer a la oposición, la administración demócrata tiene la posibilidad de mantener el control en ambas cámaras. Si lo logran, sería un hito en la política norteamericana reciente.

“Esta será una de las mayores pruebas que jamás hayamos visto en Estados Unidos. El Partido Republicano es un partido controlado solo por gente blanca y latinos, por lo que es muy difícil que personas diferentes se sientan representadas. Entonces no sé qué va a pasar.

Justamente por esto, dice, es clave este año para Joe Biden. “Él está tratando de que el país vuelva a la normalidad. Es un político del establishment que le ha hecho muchos favores a la industria de los bancos, por ejemplo. Pero está tratando de actualizar a Estados Unidos para el siglo XXI. Nos estamos quedando atrás del resto del mundo en longevidad, ingresos y sistema de salud, porque estamos atrapados en leyes que fueron adoptadas hace un siglo”.

Mientras Joe Biden goza de su buen momento, dice David Cay Johnston, Donald Trump está solo. Melania (su mujer) está en la mansión de Mar-A-Lago (en Florida) y el empresario fluctúa entre Nueva Jersey y Manhattan. “Su hija Ivanka, la persona más cercana a él, está tratando de distanciarse, ya que ella está mucho mejor económicamente. Pero no será algo fácil de hacer”, cuenta el periodista.

Y con su cuenta de Twitter suspendida la estrategia de Trump de volver al ruedo es incluso más difícil. “Con esto su poder disminuye sustancialmente. Era la plataforma que él utilizaba para lograr sus objetivos”, dice. Pero ahora, agrega, está ayudando a su exportavoz Jason Miller a desarrollar una red social alternativa llamada Gettr. Mike Pompeo, Steve Banon y Marjorie Taylor Greene son algunos de sus usuarios.

“Pero incluso si levantan la cuenta, su figura está a la baja. Políticos prominentes de ambos partidos dicen que con el tiempo su influencia se desvanecerá. Después de todo, ¿cuánto peso tienen Bill Clinton, Jimmy Carter, George W. Bush o incluso Barack Obama?”, reflexiona 

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