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La nueva casa de Enel: Detalles del traslado desde Santa Rosa al MUT
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Tras 55 años en su histórico edificio en Santa Rosa 76, en el centro de Santiago, Enel aterriza este lunes de forma oficial en su nueva morada. Esto, luego de que en febrero del año pasado la firma del grupo italiano y Territoria Apoquindo llegaran a un acuerdo comercial para cambiar su sede corporativa a la torre 2 del complejo MUT (Mercado Urbano Tobalaba), ubicado en Roger de Flor Nº2725, en Las Condes.
El jueves 28 fue el último día de los trabajadores en Santa Rosa y este lunes empiezan a llegar al MUT por grupos. La migración abarca a Enel Chile y todas sus filiales. Fuentes comentan que se busca un proceso gradual y fluido.
Según detallan desde Enel, las instalaciones de la eléctrica en el nuevo edificio contemplan 19 pisos y las plantas de oficinas cumplen con altos estándares internacionales. Entre otros atributos, tienen implementadas medidas de eficiencia energética, un sistema para reciclaje, uso de energía 100% renovable y aguas recicladas para el riego de áreas verdes. A eso se suman puntos de carga para autos eléctricos.
El cambio de casa motivó una sentida carta de siete párrafos del presidente de Enel Chile, Herman Chadwick, que fue enviada a los trabajadores. Bajo el título “Adiós a Santa Rosa 76”, recuerda que varias generaciones de empleados vivieron en el edificio la evolución de la empresa, desde la estatal Corfo a la privada Enersis, luego la internacional Endesa España hasta llegar a manos italianas y pasar a denominarse Enel Chile en 2019, “nombre que unificó a la marca y comenzó un camino hacia la energía renovable y la sostenibilidad”.
“Hoy es momento de partir. Los tiempos han cambiado, así como la forma de trabajar y los lugares en que se ejercen las labores. Se terminan las grandes oficinas y los pasillos que como laberintos llevan a la reunión con el compañero, para dar paso a las áreas de trabajo común, los espacios flexibles y la luz natural, que promueven la interacción entre los colaboradores en un ambiente más dinámico”, señala parte de la misiva.
También, asegura: “Los sentimientos al partir son encontrados, así es el paso a la modernidad, que deja muchas cosas atrás para abrirse a nuevas y distintas experiencias. Santa Rosa quedará en la memoria de generaciones de trabajadores; las historias vividas en sus pasillos, oficinas y salas de junta no se borrarán, pero la construcción dará paso a un nuevo espacio para viviendas y comercio, donde estoy seguro que muchas familias vivirán grandes momentos”.