Salida de camiones

El paro de algunas asociaciones de camioneros no tuvo mayor respaldo, con la excepción, nada sorprendente, de diputados y dirigentes del partido Republicano. Fuera de ellos, la condena fue transversal, incluyendo a sus pares de otros gremios empresariales. 

Lo único interesante que está dejando el paro es una mayor conciencia de la necesidad de discutir el carácter estratégico del transporte para el país y para el Estado y la importancia de reconstruir la red ferroviaria desmantelada por la dictadura. El poder que concentra el gremio -con todas sus divisiones- y su capacidad desestabilizadora es un peligro para la democracia, pero más allá de esto, la pandemia, la crisis climática y la guerra han puesto de relieve el rol gravitante de la logística, el transporte y la energía para sortear las incertidumbres del mundo contemporáneo. 

“Más trenes, menos camiones” es una sabia consigna que reflota en cada paro de camioneros. El proyecto “Trenes para Chile” que impulsa el gobierno por fin nos coloca en esa dirección. 

Alerta amarilla

Un órgano redactor compuesto en su totalidad por miembros designados por el Congreso: a esa propuesta llegamos después de la elección con mayor participación electoral de las últimas décadas, de un plebiscito de entrada que no dejó duda alguna respecto de la opinión de la ciudadanía sobre la presencia de parlamentarios en la Convención y de un proceso constituyente que, hasta acá, ha puesto en manos del pueblo las decisiones fundamentales.

Creer que un grupo de designados por una de las instituciones políticas con mayores niveles de desaprobación, más allá de sus atribuciones para realizar reformas constitucionales, vaya a gozar de legitimidad democrática es, por decir poco, arriesgado. 

Quienes plantean esta alternativa parecen no caer en la cuenta de la hondura de la crisis que el país atraviesa y de la que será difícil salir si no se llega a un pacto social legítimo en su origen y que dote a la sociedad de una dirección para transitar las próximas décadas. Por lo mismo, el carácter cien por ciento electo del órgano constituyente es un mínimo democrático.

Lamentable la propuesta de Amarillos por Chile, que con esta iniciativa se coloca a la derecha de ChileVamos y que ha encontrado adhesión en otras tiendas. La alerta de retrocesos en democracia está encendida y los partidos con representación parlamentaria, y en particular la alianza de gobierno, tienen en esto una prueba de fuego. 

Ruedas cuadradas 

“¿Para qué vamos a inventar la rueda cuadrada si tenemos la redonda y está funcionando bien?” sostuvo Vittorio Corbo, expresidente del Banco Central, para criticar los cambios que introduce la reforma previsional presentada por el gobierno.

Sin embargo, los resultados del sistema en materia de pensiones, ampliamente conocidos y que son una tragedia para miles de pensionados y, sobre todo, de pensionadas, dan para preguntarse qué entiende el señor Corbo por “funcionar bien”.

Las AFP están defendiendo su lucrativo negocio. Es entendible. 

La derecha, atrincherada en la capitalización individual, no ha puesto sobre la mesa una alternativa para elevar las pensiones en los tiempos y magnitudes que el gobierno ha propuesto por la vía de un seguro social. En su discurso, la derecha insiste en que la solidaridad debe hacerse vía impuestos, pero al mismo tiempo amenaza con rechazar la reforma tributaria que permitirá elevar la PGU. Así con la rueda redonda. 

Esperemos que la oposición salga de la trinchera y esté disponible para hablar de seguridad social y para elevar, en el más breve plazo, las pensiones de los actuales jubilados.

Los fiscales ad hoc

La nominación de José Morales a fiscal nacional volvió a despertar la discusión sobre la opacidad del proceso de selección de quien debe comandar el Ministerio Público. Todavía están frescas las imágenes de Abbott asistiendo a cenas privadas y reuniones con políticos involucrados en casos de financiamiento ilegal. También está fresco el listado que deja su gestión: las clases de ética, el sobreseimiento de Moreira y el intento de acuerdo con la jerarquía de la Iglesia Católica, por nombrar algunos hitos. 

Mientras tanto, la ciudadanía desconfía de la justicia y acumula indignación con los perdonazos para las élites económicas y políticas. Buena parte del malestar que estalló en octubre de 2019 tiene su origen en emblemáticos casos de corrupción sin castigo.  

Por la salud de la justicia chilena, y por los enormes desafíos que debe enfrentar el Ministerio Público en este momento, se vuelve necesario abrir la discusión sobre el mecanismo de selección del Fiscal Nacional, de modo que no se preste, como ahora, para las transacciones políticas y los pactos de impunidad.