Por dentro
La reservada negociación con la banca que dio nueva vida a las Empresas Bauzá
-
Cuéntale a tus contactos
-
Recomiéndalo en tu red profesional
-
Cuéntale a todos
-
Cuéntale a tus amigos
-
envíalo por email
Empresas Bauzá es un centenario grupo chileno, que se mantiene en manos de la misma familia. Instalados en Ovalle, sus orígenes se remontan al inmigrante proveniente de Mallorca Lorenzo Bauzá Juan, quien llegó a Chile en 1906.
Tras dedicarse al negocio de los frutos secos, Bauzá Juan logró juntar un capital que le permitió comprar tierras en la Cuarta Región y establecer en 1925 la firma Agroproductos Bauzá y Cia., desarrollando la producción pisquera. Le siguió en el negocio Lorenzo Bauzá Álvarez, fallecido en 2018, por lo que hoy la firma está en manos de la tercera generación, que la componen en total cinco hermanos Bauzá Fernández. De ellos, tres -Lorenzo, José Miguel y Rodrigo- trabajan en la compañía (ver recuadro).
Tras dedicarse al negocio de los frutos secos, Bauzá Juan logró juntar un capital que le permitió comprar tierras en la Cuarta Región y establecer en 1925 la firma Agroproductos Bauzá y Cia., desarrollando la producción pisquera. Le siguió en el negocio Lorenzo Bauzá Álvarez, fallecido en 2018, por lo que hoy la firma está en manos de la tercera generación, que la componen en total cinco hermanos Bauzá Fernández. De ellos, tres -Lorenzo, José Miguel y Rodrigo- trabajan en la compañía (ver recuadro).
Pero con una sequía galopante por años que afectó a la empresa, como a muchos negocios agrícolas, pandemia que cerró mercados y alza de tasas de interés mediante, y la irrupción agresiva de Perú como competidor frutícola, a las empresas Bauzá se les produjo una tormenta perfecta, que desembocó en un problema de liquidez, pero del que hace unas semanas comenzó reservadamente a salir.
El Rabo y Víctor Valech
La voz de alerta se desató cuando en marzo pasado, RaboFinance Chile, unidad ligada al Rabobank Group, de Países Bajos, introdujo en la justicia chilena una solicitud de liquidación forzosa a la unidad exportadora de la firma chilena, Bauzá Export, por un pagaré de US$ 495 mil, pero dando la señal de que algo más profundo ocurría en las compañías del grupo chileno.
A esas alturas y puertas adentro, los hermanos a cargo de los negocios operativos, ya habían tomado cartas en el asunto y habían emprendido un proceso de cambio en el gobierno corporativo. Esto se tradujo en la llegada de Víctor Valech Yarur a la firma.
Con 48 años, ex marino, ingeniero civil industrial de la PUC y emprendedor -en 2007 había formado una compañía de servicios a la minería-, Valech es además pariente de Salvador Said, pues la abuela de Valech fue hermana del también fallecido José Said.
Con 48 años, ex marino, ingeniero civil industrial de la PUC y emprendedor -en 2007 había formado una compañía de servicios a la minería-, Valech es además pariente de Salvador Said, pues la abuela de Valech fue hermana del también fallecido José Said.
Valech había llegado en diciembre de 2023 a asesorar a los Bauzá como consejero, tras un acercamiento de Isabel Fernández -la madre de los actuales gestores de la compañía-, pues Valech también era cercano a los Bauzá: había sido compañero de colegio de Rodrigo Bauzá, en el Tabancura.
Dada su experiencia como director de empresas -Valech es director de compañías cerradas como Flesan Minería y Fundo Zapallar, entre varias-, pronto esto derivó en que con el cambio de año lo ungieran como director ejecutivo de Empresas Bauzá, tras la partida del anterior gerente general, en un nuevo gobierno corporativo, en el que está acompañado de la matriarca Isabel Fernández como presidenta y los cinco hijos Bauzá Fernández.
Y así Valech quedó al frente de llevar a cabo una negociación con la banca para dar una solución integral a las empresas del grupo, que vivían una delicada situación financiera que se manejó de manera privada, fuera de los tribunales, sin Reorganización ni Liquidación Judicial.
Estas tratativas dieron sus frutos. El pasado 16 de octubre RaboFinance Chile refrendó ante los tribunales chilenos su desistimiento de la acción de liquidación que había activado. Y esto, porque ya antes, el 28 de agosto -revelan personas que conocieron de las tratativas-, Empresas Bauzá selló un acuerdo más amplio, un Memorandum Of Understanding (Mou), que involucró a ocho bancos.
Además del Rabo, participaron Banco de Chile, Bice, Santander, BCI, Itaú, Scotiabank, y BancoEstado, que eran acreedores de las tres compañías del grupo. Y en lo medular, dicen estos conocedores, culminó con una renegociación de una deuda de unos US$ 30 millones entre todas las compañías, con un calendario de pagos a cinco años, en cada diciembre.
“Hubo una negociación de buena fe. Juntaron a los bancos y ellos vieron que a nadie le convenía ir a un proceso en tribunales”, dicen cercanos a los Bauzá, quienes detallan que además este es un muy buen año para las compañías en términos económicos, con precios altos de la uva, buenas lluvias y reserva de agua en nieve acumulada y, por tanto, consiguiendo un Ebitda positivo.
Además del Rabo, participaron Banco de Chile, Bice, Santander, BCI, Itaú, Scotiabank, y BancoEstado, que eran acreedores de las tres compañías del grupo. Y en lo medular, dicen estos conocedores, culminó con una renegociación de una deuda de unos US$ 30 millones entre todas las compañías, con un calendario de pagos a cinco años, en cada diciembre.
“Hubo una negociación de buena fe. Juntaron a los bancos y ellos vieron que a nadie le convenía ir a un proceso en tribunales”, dicen cercanos a los Bauzá, quienes detallan que además este es un muy buen año para las compañías en términos económicos, con precios altos de la uva, buenas lluvias y reserva de agua en nieve acumulada y, por tanto, consiguiendo un Ebitda positivo.
Venta de activos en Polpaico
Con un patrimonio de unas 90 mil hectáreas totales repartidas por distintos valles y cordillera de Chile -unos US$ 80 millones en tierras-, las empresas Bauzá tiene más activos que sus pasivos, pero su problema fue de liquidez. Por ello, este acuerdo involucra que la compañía venderá activos prescindibles, en su mayoría campos que por la sequía ya no tienen la vocación frutícola de antaño y sí, en cambio, hoy son el escenario ideal para un negocio inmobiliario orientado a la instalación de paneles solares, en un modelo de negocios que la compañía ya ha activado en arriendo en algunos de sus campos. Por ejemplo, en la zona de Polpaico, Bauzá es la dueña de los campos donde se emplaza el complejo Parque Santiago Solar, en un arriendo a 30 años.
Ahora, en modo venta, testigos indican que la firma ya tiene promesas firmadas o está en vías de cerrar acuerdos para traspasar algunos predios que tienen similar vocación para complejos de energías renovables, en la zona norte de Santiago, en Polpaico, que goza de gran radiación solar y cercano al mayor centro de consumo del país, la RM. De hecho, al frente de aquel campo donde está Santiago Solar, hacia el oriente, Bauzá posee otro campo de 1.500 hectáreas -500 de ellas planas-, que pueden ser utilizadas con similares fines fotovoltaicos.
En lo inmediato, en un campo en la zona de Polpaico, la firma ya tiene promesado un predio de 30 hectáreas a la firma francesa CVE. Hay otro de cítricos en la zona de El Palqui, Huatulame, en las cercanías de Ovalle, unas 20 hectáreas, en tratativas con otro productor de cítricos de la zona.
También instalaciones de packing, frigorífico y bodegas ubicadas en Polpaico, más otras 100 hectáreas en la sumatoria de distintas parcelaciones de propiedad de la compañía en la misma zona norte de Santiago.
Y también hay otro activo que, si bien lo tiene en producción, podría caber dentro de la venta de terrenos, pues se trata de un predio en la Tercera Región, en el valle Pulido, en Tierra Amarilla, de nombre Iglesia Colorada, de unas 40 hectáreas plantadas, donde producen uvas tempranas, pero que se aleja geográficamente del foco central de la compañía, cuyos campos productivos en su mayoría están emplazados en la zona de Ovalle, De hecho, ahí están sus activos imprescindibles: Hacienda Cogotí, en Combarbalá, y Hacienda Valdivia, en la zona de Monte Patria.
Consultado Lorenzo Bauzá, uno de los directores del grupo de Empresa Bauzá y quien está a cargo de la exportadora, sólo dijo a DF MAS: “Como familia estamos muy tranquilos y unidos. Gracias al nuevo gobierno corporativo liderado por Víctor Valech y a una reciente temporada récord en 30 años en precios, hemos logrado ordenar las finanzas”.
Los tres hermanos en los negocios
Tres son los hermanos Bauzá Fernández que participan ejecutivamente en los negocios: José Miguel, a cargo de Agrícola Bauzá, que es la firma productiva frutícola, dedicada básicamente a uva de mesa de exportación, si bien también producen algo de olivos, paltas y mandarinas. Lorenzo, a cargo de la exportadora de fruta fresca, Bauzá Export; y Rodrigo, a cargo de Casa Bauzá -también conocida como Agroproductos Bauzá-, que ubicada en la zona de Rapel, Monte Patria, aglutina el icónico negocio pisquero que ha hecho famoso al apellido Bauzá y que como parte de los cambios también está sumando al vitivinícola, negocio en que la firma ha ganado premios como Mejor Carmenere, entre otros.
Otros dos hijos no participan directamente en la gestión de los negocios, pues Pilar está a cargo de la Fundación Lorenzo Bauzá y Francisco lleva años radicado en NY trabajando en banca de inversión. Antes estuvo en Goldman Sachs y hoy está en Citibank.
Aunque la firma es famosa a nivel masivo por sus piscos de homónimo nombre, lo cierto es que si se midiera en facturación el grupo de empresas debe el 90% de su negocio a la exportación de uva de mesa premium, que destina íntegramente a mercados externos, donde Estados Unidos se lleva el 50% como destino, seguido de China, con el 35%, y el restante se divide entre mercados como Corea, Brasil, Canadá o Vietnam, entre otros.
El otro 10% del negocio, se lo llevan los agronegocios, agrupados en Casa Bauzá (vino y pisco), que en torno al 70% es mercado local.
En total, el grupo de empresas tiene hoy en producción, plantadas, unas 600 hectáreas.