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Punto de partida

Ian Lee, en la semana que despidió a 30% de Examedi: “No tenemos problemas de caja”

Ian Lee, en la semana que despidió a 30% de Examedi: “No tenemos problemas de caja”

La startup de servicios médicos a domicilio levantó una serie A de US$ 17 millones a principios del 2022. Desde ahí -aseguran- no han parado de crecer, Sin embargo, detectaron ineficiencias en sus procesos y esta semana despidieron a unas 35 personas.

Por: Juan Pablo Silva | Publicado: Sábado 15 de abril de 2023 a las 21:00
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“Nos quedaban dos años de vida, y ahora nos quedan tres”, dice enfáticamente Ian Lee desde el lobby de un hotel en Miami el miércoles 12 por la mañana, minutos después de haber anunciado la salida de cerca del 30% del equipo de Examedi, la startup que fundó en 2021.

Hace meses tenía agendado un viaje por la beca de Peter Thiel (fundador de PayPal) para conectar con -entre otros- los fundadores de Figma, la firma recientemente adquirida por Adobe.

Esta semana Examedi despidió a cerca del 30% de su personal (eran 130 personas) y decidió cortar las operaciones b2c en México y el marketing digital para enfocarse en la alianza con uno de los laboratorios más grandes del país, que los tiene creciendo a grandes números y con 400 sedes.

La decisión -asegura Lee- no fue antojadiza. Repite, “no tenemos problemas de caja”. Desde noviembre pasado vienen pensando en cómo mejorar los procesos. Para eso, contrataron a Isidora Andrade (ex jefa de operaciones de Houm en México) como country manager en Chile, con el objetivo de que los cofundadores puedan enfocarse 100% en las operaciones en el país norteamericano. Al mismo tiempo, sumaron como vicepresidente de producto a Fahed Essa, MBA y MPH de la Universidad de California. “Mi especialidad está en la tecnología y producto, no hacer gestión de números, entonces necesitábamos apoyo ahí”, explica el CEO.

Fue precisamente a finales del año pasado cuando empezaron a buscar nuevas estrategias. “Hemos ido pinchando a ver qué funciona y qué no, y nos dimos cuenta de que este era el camino para ser más eficientes y acercarnos a la rentabilidad”, comenta el fundador de Examedi. Hace un mes tomaron la decisión de desvincular parte del equipo y se juntaron con personas que habían pasado por procesos similares para buscar el mejor camino. Entre ellos, líderes de recursos humanos y ex trabajadores de Airbnb y Chipax.

Replicaron el método utilizado por Airbnb. El lunes a las 15 anunciaron a todo el equipo que debían conectarse a una llamada a las 17. Ahí apareció Lee, y dijo que tenía que comunicar optimismo y pesimismo. “Optimismo porque las cosas están funcionando súper bien, pero pesimismo porque eso no implica que lo que no funciona, hay que cortarlo. Se habló de las metas, la historia de la empresa, y dijimos que el negocio está sólido, pero para solidificarlo más, necesitamos una reestructuración”, recuerda el emprendedor de 22 años.

Al llegar al final de la llamada, el CEO le señaló a sus colaboradores que todos tendrían reuniones privadas con sus jefes directos al día siguiente en las que explicaría a cada uno qué implica la reestructuración. “Mi coach, Carin Jacobs, me recomendó que había que partir cada conversación diciendo si la persona se quedaba o no”, asegura. Y agrega: “Tengo la convicción de que nos aseguramos de que el proceso sea muy humano”. Varios de los desvinculados ya están en conversaciones con fundadores amigos, dice Lee.

La autocrítica: “No haber pensado en la automatización”

Una de las razones que explica el emprendedor para llegar a este punto es que crecieron muy rápido y se quedaron en las operaciones diarias.

"Fue más que nada para solidificar el negocio, optimizar y tener un camino más claro a la rentabilidad”, dice el fundador al referirse a la razón de los despidos.

“Hicimos cosas que no escalan, aunque lo haría exactamente igual si hago otra startup. Estamos creciendo tan rápido que las cosas no se automatizan, no nos dimos cuenta de deficiencias porque estamos muy en el día a dia. Quizás la autocrítica es no habernos extraído antes un poco y pensar en automatización. El negocio está creciendo, la satisfacción de los clientes está subiendo (su NPS, indicador que mide lealtad de los clientes, es de 92 puntos) y el producto está mejorando mucho, entonces hay mucho que hacer. Creo que más que mala gestión hay un camino a la rentabilidad al que nos queremos aferrar y sacar provecho”, asegura Lee.

A los desvinculados se les ofreció el computador de regalo, descuentos permanentes para ellos y sus familias en los servicios de Examedi y beneficios de salud mental. Las compensaciones las vieron caso a caso. “Es muy distinta la situación de alguien con una familia y tres hijos, que un joven de 23 años”, cree Lee.

“Generalmente los procesos de despidos son porque se quedaron sin caja, pero a nosotros nos quedaban dos años y ahora nos quedan tres. Fue más que nada para solidificar el negocio, optimizar y tener un camino más claro a la rentabilidad”, insiste el fundador.

Principalmente los despidos se concretaron en las áreas de operaciones y marketing. En los últimos meses dos de los fundadores se mudaron a México para seguir de cerca la expansión y decidieron poner las fichas en las alianzas con empresas, por eso despidieron a más del 50% equipo allá, entre ellos de servicio al cliente, enfermeras, y marketing. Además, han automatizado procesos que antes requerían a cinco personas y hoy los opera un software.

El turbulento recorrido de Shipit

La startup pasó de emplear 110 personas, vender US$ 13 millones anuales y tener un acuerdo firmado con inversionistas por una ronda de US$ 10 millones, a tener 20 empleados, facturar la mitad y que el directorio recomendara la quiebra. Tras dos años de ese “valle de la muerte”, su CEO Allan Guiloff dice que la empresa tiene Ebitda positivo y acuerdos con acreedores para repactar el 85% de la deuda.

La ruta de Imagine: de aceleradora a fondo de venture capital de US$ 4 millones

Tras un viaje a Silicon Valley con el exPresidente Piñera surgió una idea de Microsoft de hacer un centro de innovación en Chile. Al mismo tiempo, cuatro empresarios buscaban crear una incubadora de negocios fuera del mundo académico. Los caminos se cruzaron y en 2014 nació Imagine Lab, que ha financiado 120 startups en la región. En abril de este año iniciaron una nueva etapa y ya están invirtiendo como fondo de capital de riesgo.

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