Sam Bankman-Fried ha sido puesto bajo custodia después de que un juez federal determinara que el fundador de FTX probablemente intentó manipular testigos en dos ocasiones mientras esperaba el juicio por cargos de fraude derivados del colapso del intercambio de criptodivisas.

En una breve orden escrita tras una vista celebrada el viernes en un tribunal federal de Manhattan, el juez Lewis Kaplan afirmó que “no existe ninguna condición o combinación de condiciones de puesta en libertad que garantice que el acusado no supondrá un peligro para otras personas o para la seguridad de la comunidad”.

Los fiscales habían pedido a Kaplan que revocara la libertad bajo fianza de Bankman-Fried después de que The New York Times publicara extractos de los diarios privados de Caroline Ellison, ex directora del fondo de cobertura Alameda Research, afiliado a la bolsa de criptomonedas. Ellison se ha declarado culpable de cargos penales y está cooperando con la fiscalía.

Bankman-Fried fue identificado posteriormente por los fiscales como la fuente del material, que abarcaba un periodo en el que mantuvo una relación sentimental con Ellison. El material del diario era “algo que alguien que mantiene una relación probablemente no compartiría con nadie, y menos aún con The New York Times, salvo... para asustar” al autor, dijo Kaplan.

El incidente se produjo tras una serie de quejas de los fiscales sobre la conducta de Bankman-Fried a la espera de un juicio fijado para octubre. El fundador de FTX está acusado de apropiarse indebidamente de miles de millones de dólares que los clientes depositaron en su bolsa de criptomonedas.

En otro incidente que suscitó las críticas de los fiscales, Bankman-Fried se puso en contacto con un antiguo colega que podría ser testigo en el caso para “ver si había alguna forma de que mantuviéramos una relación constructiva, de que nos utilizáramos mutuamente como recursos cuando fuera posible, o al menos de que examináramos las cosas entre nosotros”, según los mensajes citados en los documentos judiciales.

Kaplan dijo durante la vista del viernes que el mensaje era probablemente un esfuerzo para asegurarse de que los dos hombres pudieran “cantar del mismo himnario en beneficio mutuo”.
Bankman-Fried fue detenido en las Bahamas en diciembre y aceptó ser extraditado a Estados Unidos para enfrentarse a una serie de cargos penales tras el dramático colapso de FTX. Se declaró inocente.

Pero los fiscales le acusaron de eludir algunas de esas condiciones, entre otras cosas utilizando una red privada virtual que obstruía la vigilancia de parte de su actividad en Internet. Bankman-Fried dijo que había intentado ver el fútbol.

Sus padres asistieron a la vista del viernes. Su madre, la profesora de derecho de Stanford Barbara Fried, se tomó la cabeza entre las manos mientras Kaplan describía cómo su hijo mostró los diarios de Ellison a un periodista en su casa de Palo Alto en lugar de utilizar una aplicación de mensajería que crearía un rastro electrónico.

Un abogado de Bankman-Fried dijo que recurriría la decisión de revocar la libertad bajo fianza de su cliente. Pero Kaplan ordenó su detención inmediata, afirmando que era probable que fracasara el intento de anular su fallo.

Bankman-Fried se quitó apresuradamente la corbata cuando los US marshals avanzaron con las esposas. Su madre intentó acercarse, pero se la llevaron.

Bankman-Fried quedó en libertad bajo fianza de US$ 250 millones, garantizada en parte por la casa de sus padres en California. Las condiciones de la fianza también le obligaban a llevar una pulsera en el tobillo y a permanecer en casa de sus padres.