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Libros, radio y la preparación de la defensa: los primeros días de los Sauer y Topelberg en la cárcel
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Hasta tres horas para ingresar al anexo cárcel Capitán Yáber han tenido que esperar familiares, amigos y abogados de Rodrigo Topelberg, quien se unió el sábado pasado a sus ex socios Ariel y Daniel Sauer en prisión preventiva.
Como el acceso es el mismo que a la Cárcel de Alta Seguridad, la revisión es mucho más exhaustiva que una cárcel común, a pesar de que quienes están en Yáber son investigados o condenados de baja peligrosidad. Por ahí han pasado recientemente Raúl Torrealba o Francisco Frei.
En el acceso deben pasar por tres controles, dejar fuera hasta las llaves del auto y pasar por un escáner corporal completo, antes de reunirse con los Sauer y con Topelberg.
Quienes han asistido al centro penitenciario dicen que entre ellos ya han conversado, aunque no han retomado ni de cerca la amistad que tenían por décadas. Asimismo, los hermanos Sauer están durmiendo en la misma habitación, y Topelberg en una cercana.
Las familias de ambos se conocen, por lo que en las visitas también se han saludado, además de compartir amigos en común desde el colegio.
Escuchan Radio Bío-Bío, leen libros que les han llevado sus familiares y sobre todo, trabajan en su estrategia de defensa y preparando presentaciones para la causa penal y los siguientes pasos de la investigación, así como las aristas civiles.
También, junto con los otros reos, deben turnarse para hacer aseo a las instalaciones.
Cuentan que Topelberg hizo su ingreso a Capitán Yáber tremendamente afectado por la decisión de la Corte de Apelaciones de revocar el arresto domiciliario que había ordenado el tribunal de primera instancia y cambiarlo por prisión preventiva. A pesar de ello, con el pasar de los días estaría más tranquilo.
Las condiciones en Capitán Yáber son mucho mejores que en una cárcel tradicional. Tienen más horas para estar fuera de sus celdas-habitaciones y pueden escuchar música y noticias por la radio. Además, la población no supera las 10 personas, entre los cuales hay un magistrado investigado por corrupción, un gendarme y un acusado de feminicidio.