Click acá para ir directamente al contenido

Glocal

¿Cómo se vive en Texas? El testimonio de una chilena tras la tragedia en Uvalde

¿Cómo se vive en Texas? El testimonio de una chilena tras la tragedia en Uvalde

Esta semana el mundo puso los ojos en el estado emplazado al sur de EEUU luego de que en una escuela en la localidad de Uvalde murieran 19 niños y 2 adultos tras ser víctimas de un tiroteo. Josefina Vargas, chilena que reside en el país del norte hace 25 años -trabaja como intérprete en el rodeo y en un colegio- cuenta cómo es la vida ahí.

Por: DF MAS | Publicado: Sábado 28 de mayo de 2022 a las 04:00
  • T+
  • T-
"Llevo la mitad de mi vida en EEUU. Salí de Chile a los 27 años, ahora tengo 50. Nos casamos con mi marido (Eduardo García) y su empresa -una compañía de ingeniería y construcción- nos movió. Nos dijeron que veníamos por dos años, y acá estamos. 

Viví en Ohio (Cincinnati), que está en el midwest, el corazón de EEUU. Ahí nacieron dos de mis cuatro hijos, y hace 15 años nos instalamos aquí, en Texas. 

Llegamos a vivir primero a Austin, capital del Estado: me fascinó desde el primer día (acá nació mi tercera hija). La gente es mucho más abierta, comunicativa. Me sentí acogida, respetada, querida. El apoyo entre la comunidad es enorme: hemos tenido huracanes, tornados, hay un problema grande de calor...pero acá hay mucha plata y la gente es tremendamente generosa.

Es una ciudad muy entretenida, más liberal que Houston, que Dallas y que San Antonio, porque tiene tremendas universidades: la Universidad de Texas es la más grande del Estado y vienen personas del mundo a estudiar ahí. En Austin hay mucho movimiento artístico, tecnológico y creatividad de negocios.

Algunos ejemplos: WholeFoods; Tesla, de Elon Musk; el festival musical Austin City Limits; el actor Matthew McConaughey -oriundo de Uvalde, la misma ciudad del tiroteo- invirtió en el equipo de soccer Austin FC...por todo esto, los jóvenes quieren vivir ahí. 

A los cinco años nos movimos a Houston (ahí nació mi cuarto hijo). Vivimos en Sienna, mis hijos van al colegio público.
 
***
Lo que ocurrió en Uvalde es una tragedia (ahí, a 130 kilómetros de San Antonio, murieron 21 personas el martes 24 de mayo cuando un hombre de 18 años recién cumplidos compró un arma para luego disparar en un colegio). Los texanos estamos muy afectados. El tema de las armas es un gran tema aquí.

Personalmente no estoy a favor de la tenencia, nosotros no tenemos, pero es una decisión personal, uno no anda preguntando ‘¿quién tiene?’ Y no cuestiono a quienes deciden hacerlo.

Efectivamente mucha gente anda trayendo sus armas en los autos, en sus casas. La mayoría que compra lo hace como defensa personal. También porque hay mucha cacería. 

El asunto de fondo son los problemas mentales. Hay áreas de Texas muy descontentas y con mucha depresión. Pero probablemente el debate se va a politizar por ser este un Estado conservador que aprueba las armas. Ojo, las ciudades donde están prohibidas, se las ingenian igual, estas tragedias ocurren. 

Este caso es horroroso, no le estoy quitando la importancia, pero para el nivel de armas que circulan, no es que la gente acá se ande disparando. 

Y el arma no necesariamente es una pistola, la persona que ataca y quiere causar daño, puede hacerlo de cualquier forma: un arma fatal puede ser un cuchillo, un auto. Lo vimos en una parade hace un par de semanas.

No conozco a nadie del colegio del tiroteo. He ido a San Antonio montones de veces, tiene un ambiente latino, es muy bonita la ciudad. Pero trabajo en el preescolar de la iglesia, estoy a cargo del grupo de niños de 3 años, y que pase algo así, me afecta personalmente. Uno pone tanto esfuerzo en la educación de un niño, aunque claro, no es responsabilidad exclusiva del profesor, hay mucho en la educacion de los padres.

Una amiga profesora posteó un mensaje en las redes sociales que se viralizó por el mundo. En general todas las profesoras están muy choqueadas, porque afecta como comunidad, imagen. Emocionalmente es fuerte. 
 
***
Texas es como un país. De hecho lo fue entre 1836 -cuando se independizó de México- hasta 1845, año en que se anexó a Estados Unidos. Acá todos asumen que los que hablan español son mexicanos, porque estamos en la frontera. Así como en Florida está el latino -cubano, portorriqueño-, acá tenemos la comunidad mexicana más grande de EEUU.

El texano es muy trabajador, absolutamente conservador, muy cristiano. La base moral de Texas es bastante fuerte, la gente se pelea harto por los valores, y se reza mucho, hay hartas iglesias. 

Las personas se imaginan que acá todos andan a caballo vestidos de cowboy. Sí, hay ranchos y todo, pero Houston es una ciudad súper grande, como del tamaño de Santiago, pero mucho más extendida, donde la principal fuente de trabajo es la industria química y petrolera y la medicina: acá está uno de los centros médicos más grandes del mundo, donde se hacen todos los tratamientos experimentales.

Y está la NASA y todas las universidades, que son muy grandes. Yo trabajo en el rodeo de Houston como intérprete del comité internacional: todos trabajan como voluntarios en el rodeo, la plata que se recauda va a educación y hospitales. 

Es un estado donde la gente se siente muy proud, por lo que esto tan terrible que pasó afecta profundamente. 
 
***
La gente se está viniendo a vivir a Texas, primero por oportunidad de trabajo, segundo por calidad de vida, todo es más barato. Las compañías grandes se están viniendo, y eso al gobernador (Gregory Wayne Abbott) le gusta, le gusta que se contrate gente local. Pero a los texanos no les está gustando que se llene de gente. Hay un dicho que lo explica: “Don’t California my Texas”.

La división política ha aumentado: aquí la gente está muy descontenta con Biden. Este es un estado rojo, sienten que Biden es un fraude. Acá hay una división muy grande entre republicanos y demócratas, el republicano antiguo era un tipo más de centro, y lo mismo pasaba con el demócrata, ahora se ha extremado posiciones.

El demócrata actual no es el de la época de Kennedy, es mucho más radical, más liberal, por lo tanto estrujan estas situaciones que pasan para crear pánico y hablar mal de un estado conservador.

El gobernador de Texas ha llevado al estado a un buen nivel. Pero tiene contradicciones, porque él es un defensor provida, antiaborto, pero en Texas hay acceso a las armas. También en Texas hay pena de muerte, entonces es un Estado difícil, de ahí viene el slogan “Don’t mess with Texas” (no te metas con Texas).

Mucha gente no se atreve a venir a hacer delitos acá porque saben que la gente está armada: corres el riesgo que te disparen en defensa propia. Chicago, que no tiene los permisos de Texas en cuanto a tenencia de armas, está pasando por un momento muy complicado: no está permitido defenderse de esa forma y muere gente todos los días, sobre todo en los barrios negros.

Texas es un Estado enorme y hay grandes comunidades multiculturales y hay refugiados políticos de varios países: vientamitas -refudiados de la guerra-, chinos, hindú y latinos (principalmente mexicanos). Acá hay comunidades afrodescendiente. George Floyd, por ejemplo, era de Houston.

De todas las ciudades, Houston es la más diversa de todas. Como las fronteras están abiertas, en Texas la inmigración no está controlada y, así como entran personas buscando oportunidades, también llegan aquellos que padecen enfermedades mentales, narcos... 
 
***
He viajado por cada rincón de esta nación, solo me queda conocer Hawaii, Alaska y North Carolina.

Soy súper orgullosa de vivir acá. Nunca, siendo latina y chilena, me he sentido discriminada. En Chile suelen hablar de “Gringolandia”, y tienen una visión de EEUU bastante equivocada: la gente viaja a Miami, y no representa a EEUU; viajan a NY, que tampoco representa al país; California tal vez en algunas áreas, pero no a las ciudades donde van los turistas, como San Francisco y Los Angeles.

El racismo que tratan de decir que existe, no es así. Las veces que han venido amigos y familiares a visitarme, todos han quedado bien impactados: se van con otra visión a la que venían.

No tengo planes de moverme: mis hijos están haciendo su vida aquí. Pero sí me gustaría ir a Chile por temporadas, tengo familia ahí, quiero mi país y voto para todas las elecciones.

En Chile estudié comunicaciones y marketing, trabajaba en el Bice, era asistente de relaciones públicas, estaba encargada de organizar eventos y la revista interna.

Cuando llegas a EEUU, no eres nadie. Todos tus méritos personales ya no valen, tampoco a qué colegio fuiste ni tus contactos. Partes de cero. Y tus amistades valoran tu persona, no tu clase social ni tu plata. Las amistades vienen de la iglesia a la que vas, el barrio, y el colegio de tus hijos”. 
SIGUIENTE »
« ANTERIOR