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La misión de Olena Zelenska, la primera Dama de Ucrania
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Alicia, de Okhtyrka. Podría haber cumplido 8 años. Sin embargo, murió en el bombardeo con su abuelo, quien la estaba protegiendo.
Polina, de Kiev. Murió durante el bombardeo en las calles de nuestra capital, junto con sus padres y su hermano. Su hermana se encuentra en estado crítico.
Sofía, 6 años. Ella, junto con su hermano de un mes y medio, madre, abuela y abuelo, fueron asesinados a tiros en su automóvil. La familia trató de dejar Nova Kakhovka.
Esas historias, entre muchas otras, y acompañadas de imágenes desoladoras, publicó la primera dama ucraniana a principios de esta semana en su cuenta de Instagram como una manera de evidenciar la muerte de civiles en su país, a pesar de la versión rusa.
“Di esta terrible verdad: los invasores rusos están matando a niños ucranianos. Cuéntaselo a las madres rusas: hazles saber qué están haciendo exactamente sus hijos aquí. Muestre estas fotos a las mujeres rusas: ¡sus esposos, hermanos, compatriotas, están matando niños ucranianos!”, afirma el mensaje de Olena Zelenska, que cuenta con más de 2 millones de seguidores.
Se trata de un mensaje desesperado de la mujer que, después de su marido, está catalogada como el “objetivo número 2”. Cuando Rusia comenzó con los ataques, Zelensky recibió una oferta para salir del país, y su respuesta fue rotunda: “Necesito municiones, no transporte”. Olena y sus hijos decidieron acompañarlo, a él y a su país.
Desde su lugar de refugio, la primera dama no solo visibiliza los horrores de esta guerra, también se ha dedicado a levantar ayuda humanitaria en conjunto con representantes de otros países.
Con Polonia y Francia están coordinando el traslado de pacientes jóvenes que requieran atención médica, como es el caso de niños con cáncer. Con Turquía se gestiona la posibilidad de buscar hogares para menores que hayan perdido a sus padres y en Lituania se desarrolla la idea de crear centros educacionales que puedan acoger a niños ucranianos.
En sus posteos, que publica en varias lenguas -ucraniano, alemán, inglés y francés-, agradece directamente la ayuda de las primeras damas de estos países: Bridget Macron, Francia; Diana Nausedene, Lituania; Emine Erdogan, Turquía; y Agatha Duda, Polonia.
“Nuestros hijos se recuperarán, física y emocionalmente, para vivir una vida feliz en una Ucrania pacífica. Pero es importante saber que no estamos solos ahora que los ucranianos están luchando en nombre del mundo entero”, enfatiza.
Zelenska es su apellido de casada. Nacida en la localidad de Krivói Rog en 1978, Olena Kiyashko asistió a la misma escuela de Volodímir Zelenski. Pero en realidad se conocieron años después, cuando ella estudiaba Arquitectura en la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional de Krivói Rog, y él Derecho en el Instituto de Economía de Krivói Rog.
Olena no ejerció como arquitecta ni Zelenski como abogado; sus caminos se cruzaron en torno a la comedia y al espectáculo. Juntos crearon la productora Kvartal 95 Studio, una de las más exitosas de Ucrania, donde él se desempeñó como actor y director, y ella como guionista. Difícil imaginar entonces que años después serían socios a la cabeza de un país envuelto en un conflicto bélico de gran escala.
Cuando todavía era adolescente, el actual mandatario incursionó en la televisión como participante del concurso de comedia KVN. Por esos años conoció a Olena y fundaron Kvartal 95. Tras ocho años de relación, en 2003, contrajeron matrimonio.
Ese mismo año la productora comenzó a realizar programas para el canal de televisión ucraniano 1+1. Dos años después, tras algunas diferencias con esa estación, se trasladaron al canal Inter. Los Zelenski y su equipo crearon Liga Smichu, un programa famoso en Ucrania en el que varios comediantes hombres compiten por ver quién hace el mejor monólogo. Olena produjo luego una versión femenina llamada Mujeres de Kvartal.
Como ya se ha contado, tras años de éxito televisivo, la popularidad de Zelenski fue creciendo pero el salto definitivo que lo catapultó a la política llegó en 1995 con Servidor del pueblo, serie satírica en la que el actor interpretaba a un profesor de historia que se transforma en presidente de Ucrania para combatir la corrupción. La realidad supera a la ficción, dicen.
En 2018 el equipo de Kyartal inscribió un partido político con el mismo nombre de la serie. Y aunque Olena suele decir que se enteró de la candidatura presidencial de su marido por las redes sociales, todo indica que se trata de un chiste interno porque la pareja funciona como dupla, familiar y profesionalmente. Tienen dos hijos, Aleksandra y Kiril.
Feminismo, nutrición escolar e idioma
En 2019, y con más del 73% de los votos en segunda vuelta, Zelenski se impuso por sobre el expresidente Petró Poroshenko. Aunque su esposa siempre lo ha apoyado, reconoció que al principio el triunfo no le fue completamente feliz por el cambio radical de vida que representaba para ella y su familia.
Pero al poco andar se dio cuenta de que el cargo de primera dama le permitiría impulsar causas humanitarias y sociales con las que venía abogando en su carrera profesional, como la igualdad de género. Además, hasta antes de que estallara la guerra, siguió participando de Kvartal 95 como socia y guionista.
Algunas de las principales banderas de Zelenska han sido el feminismo -inició la adhesión de Ucrania a la iniciativa internacional del G7 sobre igualdad de género, y promovió el Congreso de Mujeres de Ucrania- y el diseño de políticas públicas para mejorar la nutrición escolar y conservar el idioma ucraniano.
También creó una plataforma internacional para promover el diálogo sobre causas humanitarias entre las parejas de líderes mundiales, la Kyiv Summit of First Ladies and Gentlemen.
En noviembre de 2019 Olena apareció en la portada de la edición ucraniana de la revista Vogue y un mes después fue incluida en la lista de los 100 ucranianos más influyentes según la revista Focus. La primera dama se ha transformado en un ícono de la moda y se ha encargado de promocionar a diseñadores ucranianos, especialmente en sus actividades en el extranjero.
El martes, y tras la “abrumadora cantidad de medios de comunicación internacionales solicitándole entrevistas”, escribió Zelenska en Instagram, decidió publicar una declaración oficial.
“Lo que sucedió hace poco más de una semana era imposible de creer. Nuestro país era pacífico; nuestras ciudades, pueblos y aldeas estaban llenos de vida. El 24 de febrero todos nos despertamos con el anuncio de una invasión rusa. Los tanques cruzaron la frontera con Ucrania, los aviones entraron en nuestro espacio aéreo, los lanzadores de misiles rodearon nuestras ciudades”, arranca Olena en el texto.
Luego vuelve a referirse a las cuantiosas y dolorosas muertes de civiles ucranianos durante esta primera semana de ataques en su país.
“Nuestras mujeres y niños ahora viven en refugios antibombas y sótanos. Lo más probable es que todos hayan visto estas imágenes de las estaciones de metro de Kyiv y Kharkiv, donde las personas yacen en el suelo con sus hijos y mascotas, atrapadas debajo.
Estas son solo consecuencias de la guerra para algunos, para los ucranianos ahora es una realidad horrible”, y prosigue describiendo los horrores de este conflicto armado que sobrecoge al mundo y trae a la memoria las peores imágenes de guerras pasadas.