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Andrónico Luksic traslada rama de su family office a Nueva York
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En el edificio Rockefeller Plaza, en pleno Manhattan, están los headquarters de Aysen Corp. Ahí, en el piso 22, están trabajando desde hace algunos meses los chilenos Ignacio Barría, ex CEO de Inversiones Arizona -brazo estratégico del family office de Andrónico Luksic-; Ricardo Recaval, ex head of equity investments de Arizona; y Andrés Braun, ex associate portfolio manager de Inversiones Alabama (parte también del family office).
Hoy los tres ocupan los mismos cargos en Aysen Corp. El grupo lo completa la estadounidense Valerie Carlise, quien se desempeña como office manager de la firma.
El equipo aterrizó entre enero y junio en EEUU, y tiene como objetivo echar a andar la recién creada compañía que se hace cargo de las inversiones globales personales del empresario en acciones, bonos y private equity.
La movida se ha manejado con discreción por parte del entorno de Luksic, dueño de Quiñenco, Banco de Chile y Canal 13. Sin embargo, es comentario repetido en el mundo financiero local. Muchos han interpretado la jugada como un primer paso para trasladar las inversiones al extranjero.
En la web, la empresa norteamericana se describe de la siguiente manera: “Aysen busca brindar a los inversionistas no estadounidenses información y asesoramiento de calidad y en tiempo real para el despliegue de sus inversiones globales. Dicho asesoramiento incluye recomendaciones sobre valores y selección de fondos, tanto en los mercados públicos como privados”.
En estricto rigor Aysen Corp reemplazará a Inversiones Alabama.
“Actualmente, Aysen asesora en inversiones a dos fondos fuera de los Estados Unidos y no acepta ningún otro cliente”, agrega el sitio web.
Esto, señalan personas que están al tanto de la iniciativa, es el proyecto de algo que está recién comenzando, porque en estricto rigor Aysen Corp reemplazará a Inversiones Alabama, la sociedad del family office dedicada a las inversiones globales líquidas, es decir, todo menos real estate.
“El portafolio es el mismo, la única diferencia es que el equipo se trasladó físicamente a Nueva York porque hace más sentido estar en la capital del mundo financiero, cuando todas tus inversiones están fuera del país”, añade otra persona que conoce la iniciativa.
El origen
En 2018 comenzaron los primeros estudios para crear en Manhattan una nueva oficina dedicada exclusivamente al manejo de las inversiones en bonos, acciones, derivados y en menor medida, private equity internacional.
Ese año, EY (ex Ernst & Young) inició una serie de análisis de factibilidad y planificación que se comenzaron a implementar recién a partir de septiembre de 2020. “Mover esa área a Nueva York es algo que siempre estuvo sobre la mesa, solo que se aceleró en el último tiempo”, comenta una persona que estuvo al tanto de la operación.
Años antes, en 2013, Transacciones e Inversiones Arizona, que a su vez forma parte de Inversiones Consolidadas (como se llama el family office), se separó en dos: Arizona se quedó con las inversiones en Chile y las internacionales directas (como real estate), y se creó Alabama para gestionar los activos financieros globales líquidos.
En el camino, explica una persona que conoce bien el funcionamiento interno, se han ido creando distintas sociedades o vehículos de inversión. “Pero más allá de los nombres, el family office se divide en estos tres grandes grupos, que son los focos de inversión”, añade.
A medida que el área de la inversión líquida internacional fue creciendo -maneja del orden de US$200 millones- y adquiriendo masa crítica, fue tomando forma la idea de llevar la sede al centro financiero. Esa área estaba a cargo de Barría en Chile, secundado por Recaval, Braun y Javier Solano. Este último sigue trabajando en Santiago.
Quién es quién
Rodrigo Terré, histórico hombre de confianza del vicepresidente de Banco de Chile, es el presidente de Inversiones Consolidadas y el gerente general es Rodrigo Swett. Ambos además son directores de la estación televisiva que comanda Maximiliano Luksic, uno de los cinco hijos del empresario.
La dupla Terré y Swett, si bien está a cargo de todo el family office, se enfoca sobre todo en las inversiones en Chile y en las globales directas. Algunos de los que trabajan en ese grupo son Juan José Bulnes, como investment manager, principalmente en el sector inmobiliario internacional; Santiago Honorato, como analista del mismo sector; José Antonio Jara, portfolio manager también en renta fija en el extranjero y en Chile.
En el equipo global que lidera Barría ahora desde NY, Solano -quien ocupa el puesto de Chief Investment Officer (CIO) de Arizona- está a cargo de la renta fija internacional. “Lo probable sería que él también se traslade”, comentan en la industria.
En total, son cerca de 30 personas las que trabajan en las inversiones personales del empresario. En Chile, la sede está en Enrique Foster Sur, Las Condes.
“Diversificado al máximo”
¿Por qué el traslado se hizo ahora? Es la pregunta que ronda en Sanhattan. ¿Cuánto de esto tiene que ver con la coyuntura política y cuánto con una estrategia de negocio?
Se dice que Arizona maneja del orden de US$ 500 millones, pero depende de cómo se midan las inversiones: cabe recordar que a través de su family office Luksic invierte, por ejemplo, en Quiñenco. Y no se conoce con exactitud qué porcentaje está invertido afuera, pero sí que está “diversificado al máximo”.
Habrá que ver si la jugada responde a un cambio de estrategia en el mandato de inversión, o se trata solo de una movida geográfica, como aseguran en el entorno de Andrónico Luksic.