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Crisis de Andacor suma nuevo capítulo: Anita Leatherbee demanda a presidente de compañía y a sociedad de Piero Solari Donaggio
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“Desde joven me tocó presenciar el cariño y pasión que tenía mi padre (Reinaldo Solari) por este centro de esquí, estando siempre disponible para ayudar a la familia Leatherbee y a la Corporación de Farellones. Heredé de mi padre este amor por la montaña y la preocupación permanente por nuestro querido Centro de Ski El Colorado, y por lo tanto, me preocupa enormemente el devenir del mismo”.
Se trata de un extracto de una carta, firmada por Piero Solari Donaggio, que se envió el 6 de noviembre de 2023. ¿El destinatario? Andacor S.A., la sociedad que controla los centros de esquí El Colorado y Farellones, además de los recintos deportivos en los volcanes Villarrica y Osorno. Dicha misiva proponía apoyar financieramente a la empresa, bajo la forma de un crédito por hasta $ 2.100 millones a tres años. Un mes después se concretó la colaboración, gracias a la firma de un mutuo e hipoteca por $ 1.100 millones.
Hoy, este préstamo está en el centro de un nuevo capítulo de la crisis interna en Andacor, firma que lleva años con débiles resultados y con profundas divisiones entre los principales accionistas: los hermanos Richard y Anita Leatherbee Gazitúa. El más reciente punto de conflicto fue justamente el préstamo de Asesorías e Inversiones Barolo Limitada, sociedad vinculada a Piero Solari Donaggio. El empresario, accionista de Falabella, primero prestó los $ 1.100 millones, para luego, unos meses después, volver a ofrecer colaboración financiera a través de dos préstamos: uno de UF 80.000 (unos $ 2.900 millones) y el otro de UF 94.000 ($ 3.400 millones aproximadamente). El primero buscaba pagar capital de trabajo, mientras que el segundo tenía por objetivo refinanciar pasivos con Inversiones Cururo, el principal accionista de Andacor y sociedad ligada a Richard Leatherbee.
Pero esta segunda ayuda no se concretó. En una junta extraordinaria de accionistas de enero de 2024, Anita Leatherbee, a través de su representante, el abogado Patricio Ulloa, votó en contra de la propuesta. También lo hicieron sus hijos Benjamín, Christian, Denise, Nicole, Pablo y Valentina Haeussler. ¿La razón? Críticas al liderazgo que ha tenido la compañía y las decisiones que se han tomado en los últimos años. Esto generó que la compañía informara a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) que entrarían en un período de cesación de pagos. Al inicio de la semana siguiente, la empresa comenzó los trámites de reorganización judicial por pasivos superiores a los $ 16.000 millones.
Y sobre todo eso, ahora la firma tendrá que enfrentar una nueva demanda, que ya se suma a un proceso arbitral que sigue abierto.
Objetivo: nulidad del contrato
La acción civil, alojada en el 27º Juzgado Civil de Santiago, presentada el 26 de abril y redactada por el abogado Jorge Vial, busca “que se declare la nulidad absoluta del contrato de mutuo e hipoteca suscritos con fecha 15 de diciembre de 2023 entre Andacor y Barolo”. Esta operación fue el primer y único préstamo que realizó Piero Solari. La parte demandante señala que este acuerdo “se suscribió en manifiesta contravención a la Ley de Sociedades Anónimas, Ley del Mercado de Valores, Código Civil, Constitución Política y Estatutos Sociales de Andacor”.
“Sin siquiera informar al directorio de Andacor sobre la intención de firmar el mutuo, don Michael Leatherbee Grant y don Juan Cristóbal Fuentes Barañao (ex gerente general) decidieron, por sí y ante sí, concurrir a la firma de dicho millonario contrato”, reza la demanda. “Agravando la falta, el mutuo incorporaba en sus condiciones una serie de ‘obligaciones de hacer’ y de ‘no hacer’ que resultaban completamente abusivas y gravosas para Andacor y sus accionistas, al punto de llegar a configurar diversos objetos ilícitos”.
En particular, añade la acción, a Andacor se le “obligó, entre otras cosas, a exhibir, a petición de Barolo, todo lo referente a sus finanzas y libros contables (materias confidenciales), así como a no disponer de sus activos ni otorgar garantías reales ni personales sobre los mismos sin la autorización de Barolo, entre otros perjudiciales compromisos. Esto resulta sumamente grave considerando que Andacor es una sociedad anónima abierta, fiscalizada y auditada no por Barolo, sino por la Comisión para el Mercado Financiero y empresas auditoras profesionales, cuya propiedad se transa libremente en la Bolsa de Comercio de Santiago”.
Todo esto, explica la acción, no fue aprobado por los accionistas a través de una junta extraordinaria o directorio.
¿Cuánto valen los inmuebles?
La demanda critica que durante años se han observado “sistemáticas pérdidas, erráticas decisiones comerciales y una nula capacidad de aprovechar los activos de la sociedad”. Justamente por esto, Michael Leatherbee -hijo de Richard- y Juan Cristóbal Fuentes -otrora gerente general- buscaron financiamiento. No obstante, la acción judicial reprocha que se haya acudido a financiamiento no-bancario. “La lógica habría dicho que una sociedad dueña de decenas de miles de millones de pesos en activos inmobiliarios -a lo menos $ 20.000.000.000- habría fácilmente accedido al mercado financiero formal”.
De acuerdo al libelo, esos activos inmobiliarios nunca fueron usados a su favor para conseguir financiamiento, ya que -según los balances comerciales de la entidad- los inmuebles valían $ 850.000.000. “Nótese la desproporción: inmuebles que abarcan más de 1.000 hectáreas en un exclusivo sector de la capital y que en el proceso de reorganización han sido tasados en aproximadamente $ 20.000.000.000, aparecían registrados contablemente con un avalúo de tan sólo $ 850.000.000”.
Esto, según la demanda, “se trata de una ineptitud comercial grosera o, esperemos así no sea, de una intención vedada con otro tipo de objetivos”.
Siguiendo la tónica del conflicto, el proceso de reorganización también ha sido tenso, especialmente entre la parte mayoritaria y minoritaria. Esto, porque parte importante de los pasivos que forzaron a Andacor a acudir a un proceso judicial para evitar la quiebra vienen de créditos con partes relacionadas.
Por eso, personas entendidas en los últimos trámites de la reorganización, afirman que todavía no hay un consenso de cara al acuerdo de reorganización. Las claves, explican entendidos, están en la auditoría que está preparando Deloitte. “Si no se resuelve el tema de la capitalización de los créditos relacionados y si no se crea una administración profesional, veo difícil que se logre un acuerdo”, señala un representante de uno de los accionistas minoritarios.
Mientras esto pasa, la nieve en la cordillera sigue cayendo y auspicia un año muy lucrativo para los centros de esquí de la capital.