Click acá para ir directamente al contenido

Por dentro

El “modelo Niu” que cautivó a los Ibáñez Atkinson

El “modelo Niu” que cautivó a los Ibáñez Atkinson

A inicios de semana DF MAS reveló que el conglomerado gastronómico está tramitando en la FNE la entrada de un quinto socio. Si todo sale bien, los Ibáñez Atkinson podrán colaborar en el aterrizaje de Niu Sushi a México y potenciar la expansión de Guacamole en Chile. A pesar de que todavía no quieren celebrar los avances, las partes esperan que se confirme pronto.

Por: Mateo Navas y Juan Pablo Silva | Publicado: Sábado 17 de septiembre de 2022 a las 21:00
  • T+
  • T-

“El peor miedo de nuestras vidas lo pasamos con la pandemia”. A mediados de septiembre de 2020, hace exactos dos años, Alan Schoihet -en un webinar cerrado del Círculo Israelita de Santiago- se sinceró sobre el estado de su empresa, la cual había fundado 11 años antes junto con su hermano Jack y su amigo Uri Cohen. “No pudimos abrir 30 locales en 45 días, estábamos súper asustados, pero poco a poco se fueron disipando los miedos”, agregó.

A pesar de los embates de la crisis sanitaria, dicen fuentes conocedoras, “salieron más fortalecidos”. De hecho, ese mismo año crearon un holding gastronómico con marcas asociadas, como Kaothai, Pollo Taquilla, Guacamole y Luigi’s, y empezaron a planear el aterrizaje de Niu Sushi al mercado mexicano. Hoy, son considerados uno de los conglomerados culinarios más importantes del país.

A inicios de esta semana DF MAS reveló que están negociando la entrada de un quinto socio. El 29 de julio Inversiones Gran Araucaria Dos Limitada -sociedad ligada a la familia Ibáñez Atkinson- y Alan Schoihet, Jack Schoihet, Uri Cohen y Paul Kisiliuk (los dueños de Niu Sushi) notificaron a la Fiscalía Nacional Económica (FNE) una operación de concentración en la que planean sumar a dicha familia como inversionistas no controladores. El acuerdo todavía está en revisión por parte del organismo público.

A pesar de eso, a raíz del artículo de DF MAS, los dueños recibieron múltiples felicitaciones por teléfono de amigos y conocidos. Pero ellos prefieren poner paños fríos hasta que la agencia nacional entregue la luz verde. 

Los principales objetivos del holding, con la potencial llegada de los Ibáñez Atkinson, son dos: preparar el aterrizaje en México de Niu Sushi e impulsar la marca Guacamole, un local de tex-mex que ya tiene tres sucursales en Santiago.

El modelo Amazon y el rol de Endeavor

Un crédito de $ 50 millones y un pequeño local en Diego de Velásquez, Providencia, representan los comienzos de Niu Sushi, la cadena de comida japonesa más grande del país y que nació de la mano de un grupo de chilenos con el objetivo de crear un producto “best value”, es decir, un sushi de calidad a un bajo precio. 

Los fundadores originales fueron tres: los hermanos Alan y Jack Schoihet y Uri Cohen. Crecieron de forma orgánica y empezaron a abrir cada vez más locales. En 2012 se sumó el cuarto socio, Paul Kisiliuk, un ejecutivo corporativo que trabajó en Boston Consulting Group (BCG) y Banco Falabella, y quien los ayudó a armar una oficina central, a escalar el negocio y ordenar la operación interna. Hasta ese minuto tenían cinco locales.

Dos años después entraron a Endeavor y en 2015 constituyeron una empresa paralela, Restomarket, distribuidora de insumos para restaurantes. Para ese negocio se basaron en el modelo de Amazon Web Services, que le vende sus servicios a su competencia. Ellos hicieron lo mismo: construyeron una firma que transaba con otros locales de sushi para generar más ingresos y conocimiento en el rubro.

En 2016 fue la primera vez que pensaron en armar un holding gastronómico. Crearon dos propuestas: CocoThai y ChinaDelivery. La apuesta funcionó inicialmente, pero con el tiempo desecharon las marcas.

A mediados del 2017 decidieron buscar a un socio capitalista para que los ayudara a escalar el negocio. No lo encontraron y decidieron seguir por su propia cuenta, pidiendo créditos bancarios. Pero en la pandemia esa opción se reactivó y decidieron concretarla.

Uno de los actores clave en su estrategia de expansión fue Endeavor. Ellos fueron, comenta un conocedor, los que empujaron la internacionalización del negocio y entregaron contactos clave para materializar los primeros pasos. Christoph Schiess, Max Vicuña, Matías Wolff y Cristián Montero han pasado por el advisory board de la firma gastronómica y, comentan entendidos, su influencia ha sido “gravitante” en la firma.

La principal dificultad: ellos mismos

El rol de los cuatro socios ha sido clave para el crecimiento de la firma. Quienes conocen a los cuatro dueños dicen que son “muy distintos” y que logran complementarse bien.

Alan Schoihet está a cargo de los números y ocupa la gerencia general; Jack Schoihet se dedica a la parte comercial, también a la propuesta gastronómica y tener contacto con los proveedores; a Uri Cohen le gusta estar en terreno para mantener la operación a flote; y a Paul Kisiliuk le interesa el desarrollo tecnológico y la inteligencia de negocios. “Es el hombre de los datos”, dicen cercanos.

Sin embargo, en distintas instancias, los fundadores de Niu han dicho que en un comienzo no fue fácil equilibrar las personalidades de cada uno. Incluso, han llegado a decir que estas diferencias han representado la principal dificultad para la empresa. En diversos momentos existieron divisiones “importantes” que fueron solucionadas “diciéndose las cosas a la cara”. Hoy, sin embargo, la relación es de cordialidad y profesionalismo. “Funcionan bien y tienen los mismos objetivos. Eso los ayuda mucho”, explica un ex trabajador del grupo.

Aterrizaje en México

Si bien todavía no se concreta el acuerdo, conocedores detallan que la familia Ibáñez Atkinson se interesó en Niu por ser la cadena de sushi más grande de Chile (con más de 30 locales a lo largo del país). Es, además, un negocio que genera flujos de forma consistente, con una amplia base de clientes y ambiciosos planes de expansión.

De hecho, el horizonte más lejano sería llegar a Estados Unidos y franquiciar sus locales. Sin embargo, eso todavía es a largo plazo, han dicho entendidos.

Inversiones Gran Araucaria Dos Limitada (también conocida como IGA Dos) es la sociedad que busca ingresar a la propiedad de Niu Foods. Está ligada a los Ibáñez Atkinson, familia que tiene participación en distintos rubros: venture capital (Kayyak Ventures), medicina (Clínica Meds), alimentos (Embotelladora Andina), industria (Enaex, Sigdo Koppers, Saam), entre otras.

En particular, IGA Dos nació en 2016 luego de separarse de Inversiones Gran Araucaria S.A. Actualmente la sociedad es administrada por Sebastián Ibáñez Atkinson, hijo del empresario Felipe Ibáñez Scott.

De acuerdo al Registro de Comercio, también aparece como apoderada Josefa Valdés, quien es gerenta de talento y cultura de Stars Investment, el family office de los Ibáñez Atkinson.

Esta no es la primera apuesta familiar por el rubro gastronómico. El hermano de Felipe Ibáñez, Nicolás, es dueño del negocio de Papa John’s a través de su oficina de inversiones Drake. Partieron por Chile y España, pero actualmente están en Portugal, Holanda y Puerto Rico, entre otros países.

Si bien los plazos de la FNE aún no están definidos, desde el family office afirman que están trabajando para tener una entrada estratégica en el negocio. Lo que buscan es ayudar a la cadena de restaurantes a ejecutar su ambicioso plan de crecimiento tanto dentro como fuera de Chile. Todavía no se conoce el monto de la operación ni el porcentaje de adquisición.


Tercer negocio gastronómico que entra a la FNE este año

2022 ha sido un año en el que han entrado diversos negocios gastronómicos a la Fiscalía Nacional Económica (FNE). El 13 de junio dicho organismo aprobó la posible compra de Patria Investments a Comercial Alca, uno de los principales importadores de alimentos de Chile, con oficinas en Santiago, Miami y China.

Tienen más de 4 mil clientes locales e internacionales. Al mes siguiente Carozzi acordó la compra del 100% de los derechos sociales de Lecherías Loncomilla Limitada, matriz de los Helados San Francisco, una firma que hoy tiene 250 colaboradores y más de 80 productos. El acuerdo ingresó a la FNE y está sujeto a aprobación. La apuesta de los Ibáñez Atkinson sería la tercera operación de M&A gastronómica que pasa por la agencia chilena.


Disminución de capital por US$ 13.000 millones

Diversos movimientos han tenido las sociedades ligadas a este conglomerado gastronómico. El último ocurrió el 30 de agosto, cuando notificaron la disminución de capital de la sociedad Niu Sushi a Niu Foods SpA, la matriz del holding. En particular, según consta de la documentación publicada en el Diario Oficial,  acordaron disminuir el capital de dicha firma de $ 13.000 millones a solo $ 1 millón. Todo el resto fue devuelto al único accionista, es decir, Niu Foods SpA.

 

El negocio de la pelota: los ganadores y perdedores del campeonato nacional

Con la temporada recién terminada, Colo-Colo -el equipo campeón- recibirá cerca de US$ 11 millones en premios, mientras que la U, a tres años de cambiar su propiedad, mantiene un estricto plan de eficiencia para mejorar sus números internos. Eso sí, ahora Azul Azul deberá enfrentar la suspensión de aportes que hizo la CMF a Sartor -firma que gestiona el vehículo de inversión que controla el club- por “deficiencias relevantes detectadas en su gestión”. Cruzados, en tanto, levantará fondos por tercera vez para concretar su esperado “Proyecto Estadio”. Este es el zoom a la billetera de los tres grandes del fútbol nacional en una semana llena de acontecimientos extrafutbolísticos.

SIGUIENTE »
« ANTERIOR