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Exgerente interpone demanda laboral en contra de Betterfly, la startup desmiente las acusaciones
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Una sola (y hasta ahora desconocida) demanda laboral esconde múltiples detalles de la operación interna de Betterfly, además de una crítica al liderazgo de su cofundador y CEO, Eduardo della Maggiora.
Dicha acción judicial fue presentada a principios de noviembre ante el 1º Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago por el otrora gerente digital de la firma (CDO, Chief Digital Officer en inglés), Cristián González, quien fue desvinculado a finales de julio de 2022.
La demanda surge luego de un fallido intento de conciliación ante la Inspección del Trabajo y por, comenta un conocedor, “importantes diferencias respecto a la política de stock options (un contrato que permite que un trabajador compre un determinado número de acciones de la sociedad empleadora -u otra relacionada- a un precio preferencial)”.
En particular, el 2 de noviembre ingresó la demanda en la que González (asesorado por Pedro Julio Martínez, subdirector del Trabajo durante Bachelet 1) acusa que Betterfly lo despidió de manera abusiva y que existió una vulneración de sus derechos fundamentales. Pero quizás lo más notorio es su crítica al CEO de la empresa, la cual -justamente- se dedica al bienestar laboral. “(Existieron) malos tratos por parte del mismo Eduardo della Maggiora”, se lee de la acción judicial.
Ante estas acusaciones, Betterfly pasó a la ofensiva esta semana: mediante un escrito legal el martes negaron todos los hechos y acusaron a Gonzalez de actuar de mala fe. Esta es la historia.
Cristián González estudió ingeniería civil en la Universidad Central, actualmente tiene 51 años y durante su carrera trabajó principalmente en dos grandes empresas: Telefónica y Consorcio. En agosto de 2019, junto con otros dos exejecutivos de la compañía chilena, armó su propia empresa de soluciones tecnológicas. La bautizó como Digitali y salió a buscar clientes.
El vínculo con Betterfly comenzó en enero de 2020, cuando la firma todavía se llamaba Burn To Give: no eran unicornio, no tenían cientos de trabajadores, ni el actual modelo de negocios. Sin embargo, y tal como lo ha comentado Eduardo della Maggiora en distintas ocasiones, querían convertirse en la primera empresa social de la región en superar una valoración de US$ 1.000 millones. En ese tiempo ambas empresas se juntaron para ver la posibilidad de generar una consultoría en tecnología. Hicieron “click” de inmediato y en febrero comenzaron a trabajar en conjunto.
De acuerdo con la demanda, Digitali ayudó a construir la tecnología de Betterfly, lo que extendió su vínculo comercial por varios meses. En diciembre de ese mismo año, y debido al estrecho trato que mantenían, Della Maggiora invitó a González a incorporarse como trabajador full time de la firma. Según se lee en el escrito ex JP Morgan le ofreció “ser ‘dueño’ de parte de Betterfly, a través de la opción de compra (stock option) de 45.000 acciones, a un valor muy bajo, de US$ 0,19 (valorizadas, en total, en US$ 150 mil)”. También habría puesto sobre la mesa un contrato de al menos cinco años con una remuneración ascendente.
De acuerdo a González, Eduardo della Maggiora le dijo que el valor de las stock options podrían crecer “10, 50 o 100 veces, dado el crecimiento exponencial que estaba teniendo Betterfly”.
Con todo esto, González aceptó.
Fusiones “con muchas dificultades y errores”
Comenzó a trabajar oficialmente el 1 de febrero de 2021 bajo el cargo de Chief Digital Officer (gerente de tecnología y/o digital). Su principal labor fue avanzar en el diseño e implementación de la plataforma. También fue el encargado de conformar un equipo de jefes de área para acelerar el desarrollo del producto.
A los pocos meses González -según narra en la demanda- se dio cuenta de algunos elementos que llamaron su atención, en especial el trato del CEO de la empresa: “La intensidad de trabajo que imponía Eduardo della Maggiora implicaba horas de trabajo de lunes a lunes, sobre todo para los líderes de la compañía. Mi foco fue llevar adelante el desafío profesional de armar la mejor fábrica digital de Latinoamérica, que me desvelaba y obsesionaba realizar de la mejor manera para lograr el objetivo”.
Asegura que algo similar habrían comenzado a identificar los trabajadores del área digital: “(Ellos) también notaban las inconsistencias y sentían los malos tratos, que yo los minimizaba poniendo el desafío profesional por delante siempre, dejando en un segundo plano estas situaciones”.
El demandante dice en el texto haber sido testigo de dos hitos clave para Betterfly: el aumento de capital por US$ 60 millones (Serie B) y la Serie C por US$ 125 millones. Este último acontecimiento los convirtió en el primer unicornio social de Latinoamérica.
Después de la Serie B (que ocurrió en junio de 2021) González recibió un aumento de sueldo del 23% y felicitaciones directas de Eduardo della Maggiora a través de una carta. “Tu esfuerzo, compromiso, transparencia, y desempeño han sido ejemplares”, le escribió el CEO. Además, detalló el aumento de sus stock options, llegando a 50.000. “Hoy representan un valor de US$ 690.208, considerando un precio por acción de US$ 13,8”, agregó.
También le tocó presenciar la estrategia de internacionalización de Betterfly, lo que los obligó a triplicar el equipo digital. Para eso, en septiembre de 2021, anunciaron la compra de cinco firmas tecnológicas (el 100% de Kunder, Heypay!, Nesto, Numi, y un porcentaje minoritario de Racional).
Y justamente esta operación fue la que gatilló, en el futuro, los problemas entre González y la plana directiva de la empresa.
El proceso de fusión, se lee de la demanda, ocurrió “con muchas dificultades y errores”. Es acá donde aparece la figura de Andrés Munita, socio de las cinco firmas que Betterfly adquirió (pero quien hoy está fuera de la insurtech). “Me entero de que (Munita) había generado un informe de más de 15 páginas con juicios personales y profesionales (en contra de González), que encontraba todo mal en la gestión que habíamos realizado a la fecha”, aparece en la acción judicial.
Según relata la acción judicial, Della Maggiora habría señalado que dichas acusaciones eran “como hechos verídicos, sin indagar (ni) verificarlos”.
La situación se profundizó en noviembre de 2021, cuando Munita removió a González de su “cargo y funciones”. No lo despidió, si no que quedó sin cargo concreto. Cuatro meses después, se le entregó un rol en el área de recursos humanos (que no se detalla en el escrito).
“Inconsistencias, menoscabo y malos tratos”
Desde que se concretó el cambio de piezas al interior de Betterfly, González -explica la demanda laboral- comenzó a “sufrir constantes amenazas y comentarios como ‘si no te gusta, te puedes ir’”.
“Le comento a Eduardo della Maggiora la situación de inconsistencias, menoscabo y malos tratos, pero recibí de él mismo dichos como: ‘Me mentiste’; ‘no tienes las competencias tecnológicas’; ‘no estás a la altura y calidad de un equipo de élite como el que necesito’; ‘ahora llegó gente que sabe’; ‘no existe agilidad’; ‘misión no cumplida’”.
En julio de 2022, luego de la partida de Andrés Munita de Betterfly, González volvió al equipo de tecnología bajo un nuevo jefe (Andrés Liberman). El 22 de ese mismo mes su superior lo invitó a hablar sobre su futuro en la compañía porque -comentan fuentes conocedoras- “no estaba cumpliendo con una serie de proyectos pactados”. A la semana siguiente González conversó con diversas personas de la firma -entre ellas Cristóbal della Maggiora, cofundador y presidente del directorio, y Sol de Cabo, VP de personas y cultura-, quienes le ofrecieron una propuesta para terminar la relación laboral.
Sin embargo, según se explica en la demanda, dicha oferta no cumplió “con el espíritu del acuerdo inicial de mi contrato de trabajo ni con los beneficios laborales entregados”. ¿Por qué? El acuerdo contemplaba un vínculo de cinco, por lo que él no estaba siendo indemnizado, y que sus 50 mil stock options “tampoco estaban en la propuesta de mutuo acuerdo”.
Para solucionar estas diferencias, ambas partes participaron de una audiencia de conciliación ante la Inspección del Trabajo. Pero nada se solucionó, todo lo contrario. “Lo más insólito, es que el representante de la demandada niega que las Opciones de Compra de Acciones que soy dueño sean un beneficio laboral y nos remite a Estados Unidos para su cobro (…) Es una maniobra evasiva, que intenta hacer ilusorio exigir mi prestación laboral en Chile”, plantea González en la demanda. En concreto se refiere a un correo que Cristóbal della Maggiora le escribió el 15 de octubre: “El plan de stock options lo ofrece y otorga Betterfly PBC, ubicada en el estado de Delaware, EEUU. Los contratos que firmaste son totalmente distintos y separados de los documentos de tu relación laboral. Es más, son en inglés y están sujetos a la ley de Delaware. Por todo lo anterior, el plan de stock options no es hoy ni era antes un beneficio laboral otorgado por tu ex empleador Betterfly Chile SpA”.
A esto él critica que “una prestación laboral que forma parte del contrato de trabajo deba ser demandada en otro país, bajo otra legislación y respecto de otra persona”.
En la acción judicial reclama $ 336 millones por concepto de daño moral, además de una indemnización adicional por $ 88 millones. Y por último, se solicita oficiar a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) para que “fiscalice el cumplimiento de pago de las denominadas stock options que ofrece Betterfly”.
Betterfly responde: “(González) busca enriquecerse sin causa”
En la noche del martes 13 de diciembre Betterfly -apoyado por al abogado Enzo Canales, de CMS Carey & Allende- ingresó la contestación a la demanda de González, en la que lo acusan de actuar de mala fe y tener la pretensión de enriquecimiento “sin causa”.
En primer lugar, sobre las stock options, afirman que “es falso que sea mi representada la que le haya ofrecido al actor acciones propias, sino que el señor González celebró un contrato de stock options con un tercero ajeno al juicio, Betterfly PBC, y para ello el actor debió validar una firma electrónica, creando un usuario y password secretos en un sistema denominado Carta (un software de administración de equity), y en donde él aceptó someterse a las normas de Delaware en cuanto a tal programa de participación, adhiriendo además a normas estadounidenses de la Securities Exchange Commision (SEC)”.
Por lo tanto, agregan, “(González) pretende ocultar la verdadera naturaleza jurídica del beneficio que demanda, asimilándolo a una especie de bono equivalente a 50.000 acciones de Betterfly Chile SpA”.
Y entregan un dato: “El 24 de octubre de 2022, (el demandante) ejerció el derecho de compra de 16.875 acciones de Betterfly PBC, esto a través del sistema Carta, a un valor por acción de US$ 0,19”.
Sobre sus cambios en los puestos, Betterfly afirma que -durante el liderazgo de González- el departamento digital sufría una serie de atrasos con proyectos comprometidos. “El actor se negaba a reconocer cualquier error por su parte, siempre atribuyéndolo a los demás, comentando que -atendido a su supuestamente exitoso desempeño en Telefónica, y la creación de empresas de tecnología- su labor no podía ser cuestionada por sus compañeros ni jefaturas”.
Además, la startup niega la existencia de maltrato y acoso laboral. Sobre las supuestas declaraciones de Eduardo della Maggiora, Betterfly menciona que González “no indica contexto, fecha, ni detalle alguno respecto a estos supuestos hechos, lo que impide poder ejercer debidamente el derecho a defensa”.
Y agregan: “Las frases que menciona el actor resultan carentes de toda relevancia. Por ejemplo, si es que existía una demora en la entrega de un informe, por supuesto que es lógico que se indique que “no existe agilidad”, y si se hizo mal un trabajo, se haga presente que la misión no ha sido cumplida. Parece el actor olvidar que parte de lo que implica una relación de subordinación y dependencia, es precisamente ‘el enjuiciamiento crítico’ de las labores realizadas por el trabajador”.
El próximo capítulo de esta trama llegará la próxima semana, el 20 de diciembre. Ambas partes se encontrarán en el Zoom de la audiencia preparatoria a las 9:40 am.
Carta interna de Eduardo della Maggiora
"Con mucha pena les escribo por el problema judicial que tenemos con Cristián González y que apareció en DF MAS", empezó escribiendo el CEO de la compañía, Eduardo della Maggiora, en una carta interna que se le envió a todo el personal de Chile de Betterfly durante la jornada del viernes 16 de diciembre.
En la misiva el ejecutivo mencionó que tienen "tranquilidad" por actuar de la "forma correcta", y que a González le dieron "varias oportunidades".
"Para nosotros las personas siempre estarán en el centro, por lo que quiero recordar que nuestro equipo de People & Culture siempre estará disponible para ustedes y que también seguiremos con nuestro plan de educación respecto de las stock options", finalizó Della Maggiora.
La trama entre Kunder, Munita y Della Maggiora
La historia comienza, justamente, con el arribo de Andrés Munita a Betterfly, luego de que se concretara la adquisición de Kunder, Heypay!, Nesto, Numi, y una porción de Racional en 2021.
Según relatan diversas fuentes internas, la relación entre Munita y Eduardo della Maggiora comenzó bien, pero se fue deteriorando con el tiempo. Esto obligó a buscar una salida anticipada para el ex CEO de Kunder y su socio Pedro Cortez. Algunos de los desarrolladores de la empresa también abandonaron el unicornio social. Ambas partes buscaron abogados (Luis Carlos Valdés estuvo con Andrés Munita, mientras que Francisco Riveros representó a Betterfly) para zanjar el tema contractual. El mayor desafío fue llegar a un acuerdo económico para terminar el contrato antes de la fecha pactada (no hubo una indemnización, sino que una salida anticipada). El monto acordado es parte de lo que no se revela. Si bien Munita y Cortez se fueron de Betterfly, existen otros socios de Kunder que se mantienen en posiciones de liderazgo.
En rodaje: el desconocido documental sobre Betterfly y Eduardo della Maggiora
Los directores (los hermanos Rolando y Eduardo Santana) buscan estrenar el filme el próximo año. ¿Y dónde? Todavía es una incógnita. Sin embargo, lo que sí sabe es que “pitchearán” su proyecto a las principales plataformas de streaming, como Netflix, Amazon y Star+.
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