En enero del año pasado Alfonso Swett Opazo recibió el Premio a la Trayectoria Ingeniería Comercial 2022. En la ceremonia de premiación el empresario y expresidente de la CPC dio un emotivo discurso en el que se refirió al cáncer de ganglios que lo aquejaba y que en ese momento había retrocedido. Lamentablemente la enfermedad volvió y le quitó la vida a los 56 años. “No quiero que me miren como una persona exitosa por este maravilloso premio. Premio que acojo con mi corazón muy agradecido y humilde. Quiero que me miren como una persona frágil”, señaló entonces.

Swett es uno de los cuatro hijos del empresario Alfonso Swett Saavedra y María Isabel Opazo, y también padre de cuatro hijas. Ingeniero Comercial UC y MBA de la Universidad de Duke University (USA). Fue gerente General de Costanera S.A.C.I., Director del Endowment de la Pontificia Universidad Católica de Chile; director de Forus S.A., Elecmetal S.A., Olisur S.A. y executive board member of Business at OECD (París, Francia); Director Fundación Economía y Administración Alumni UC. También miembro del Consejo de Política Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, presidente del Comité Ejecutivo CLAPES UC y del Consejo Asesor Nacional CLAPES UC.

 El servicio social fue también parte clave de su vida, hombre profundamente religioso, se desempeñó como director de la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN). Estudió en el Colegio Verbo Divino y estando en educación media le tocó conocer el campamento Arturo Prat y conmovido por las condiciones de vida de sus pobladores, decidió movilizarse y se iba a pasar los fines de semana ahí durante años para ayudar de distintas maneras. Cuando estaba en tercero medio pensó ser sacerdote. Lo conversó con su familia y fue a conocer el seminario de la congregación del Verbo Divino en La Florida. Cambió de opinión luego de pasar un fin de semana en silencio y reflexión. “Me di cuenta de que son muchos los llamados, pocos los elegidos. No tenía dedos para el piano. Yo era demasiado hiperquinético y no podía resistir el silencio”, comentó en entrevista con revista Capital el 2018.

Quiso estudiar filosofía, pero su plan no tuvo mucha aceptación familiar y finalmente optó por Ingenieria Comercial. Entró a trabajar en 1991 y su primer jefe fue Sebastián Piñera. Cuando Swett recibió su premio en la UC también le dedicó unas cálidas palabras al exmandatario que se encontraba entre los asistentes a la ceremonia. “Si bien es la persona más inteligente que he conocido, por lo que más lo admiro es por su corazón bondadoso, generoso y preocupado profundamente siempre por mí, esté donde esté. Ustedes siempre han visto en él un hombre brillante, pero su mayor virtud su corazón bondadoso”. Pocas semanas después su amigo perdería la vida en el accidente de helicóptero en lago Ranco y el empresario escribió cercanas palabras sobre su relación y su legado.

Swett Opazo estuvo a la cabeza de la Confederación de la Producción y del Comercio entre 2018 y 2020. Periodo en que le tocó enfrentar escenarios muy complejos como el estallido social y la pandemia. En ese entonces, recién asumido, se le preguntó cuál sería el sello de su gestión: “No tengo ningún objetivo de sello personal”, aseguró a revista Capital. “Yo estoy acá dos años y se acaba, pero la institución tiene una continuidad, los empresarios vamos a seguir tratando de aportar al bien común por muchos años más. Creo que uno comete errores, y hemos visto algunos recientes, cuando uno pone el yo delante de la institución o de la discusión en la vida pública (…) Nuestro principal desafío es que nos vean como un real actor de construcción de una mejor sociedad y no como defensores de intereses particulares de nuestras empresas”.

Sus restos serán velados en la Iglesia de San Francisco de Sales.